El servicio de estudios de la entidad catalana indicó que a este crecimiento también contribuirá el final del ajuste en el mercado inmobiliario y la generación de capacidad de ahorro en el sector privado no financiero.
"La rápida corrección de desequilibrios en la economía española anticipa la recuperación del crecimiento en 2010", señaló.
"En este escenario, aunque con riesgos económicos y financieros a la baja todavía presentes, es previsible que a partir de verano de 2010 la economía recupere una senda de crecimiento y se detenga la destrucción de empleo", añadió.
Antes de ello, la institución catalana prevé una contracción del PIB doméstico del 3,6 por ciento este año.
Según el informe, la fuerte caída de la actividad industrial y del comercio internacional, así como la destrucción de empleo y su impacto negativo en la confianza de los hogares, han llevado a una mayor intensidad de la recesión en el cuarto trimestre de 2008 y en el primero de 2009.
Según estas previsiones, en los próximos trimestres el ritmo de descenso de la actividad irá cediendo, aunque la tasa interanual será más negativa, alcanzando un máximo de caída del 4,1 por ciento en el tercer cuarto de este año.
Según los últimos pronósticos del Banco de España, el PIB caerá este año un 3,0 por ciento y un 1,0 por ciento en 2010.
El Gobierno, que tardará pocas semanas en actualizar su cuadro macroeconómico para el trienio 2009-2011, dijo que las proyecciones del banco central español se ajustaban a las condiciones de la economía en el momento de su elaboración.
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