Aríztegui consideró que los organismos supervisores han incurrido en "fallos graves" por no exigir un mayor cumplimiento de las normas, por lo que se mostró a favor de "una revisión de los esquemas institucionales de supervisión", durante la clausura de un curso organizado por el BBVA y la APIE en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
El subgobernador solicitó que la reforma cuente con "los recursos necesarios" para cumplir "eficazmente" con sus funciones y una implantanción ordenada, aunque no "precipitada", cuyo plazo de puesta en marcha estipulado por la UE se sitúa en 2010.
Asimismo, Aríztegui pidió que se creen "claras líneas de responsabilidad" para evitar una organización excesivamente complicada y se dote a los distintos comités supervisores de los poderes y de los recursos necesarios para operar.
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