jueves, 23 de julio de 2009

El Parlamento de Francia aprueba la ley para trabajar en domingo

PARÍS.- El parlamento francés dio el jueves la aprobación final a una ley que relaja las restricciones a la horas laborables en domingo, tras una cerrada votación en el Senado en donde algunos miembros del partido gobernante votaron contra la medida.

La votación en el Senado puso punto final a la medida que se ha enfrentado a fuertes críticas de la oposición de izquierda y causó malestar aun en las filas de la centro-derecha.

Tras la votación, el grupo parlamentario socialista anunció que presentaría una apelación en el tribunal constitucional. La medida fue aprobada la semana pasada en la cámara baja del Parlamento y la Asamblea Nacional.

El Senado aprobó la ley con 165 votos a favor y 159 en contra, con muchos miembros de centro-derecha en desacuerdo.

La nueva ley permite a los minoristas abrir los domingos en áreas definidas como de alta importancia turística, pero los trabajadores sólo podrán trabajar de modo voluntario y recibiendo el doble de salario por horas extras.

También deja a las tiendas en zonas turísticas seguir abiertas, extiende el horario a las tiendas de ultramarinos y permitirá la creación de zonas especiales con comercio ampliado los domingos en París, las ciudades sureñas de Marsella y Aix-en-Provence, y la norteña Lille.

A pesar de las objeciones de la Iglesia, las horas laborales de los domingos se han flexibilizado gradualmente en muchos países europeos en los últimos años.

La ley francesa no va tan lejos como la británica - que liberalizó su leyes de comercio en la década de 1990 y en donde el domingo actualmente es un día de comercio normal en muchas áreas - y sigue medidas tomadas en Alemania para flexibilizar las restricciones al trabajo en domingo.

El Gobierno dice que las nuevas horas laborales aumentarán el gasto del consumidor, uno de los pilares de la economía francesa, dando a los compradores más opciones.

Los críticos de la ley dicen que abre el camino para una propagación generalizada de trabajo los domingos y que las leyes que impiden a los trabajadores les sea requerido trabajar probarán su ineficacia.

A comienzos de mes, un estudio encargado por el diario de izquierda Liberation mostró que poco más de la mitad de los franceses se oponía al trabajo dominical.

Pero la gran mayoría -más de un 80 por ciento- veía el domingo como un importante día espiritual y de recreación, y querían a nivel general que siga siendo un día de descanso.

Otros sondeos han mostrado que una mayoría de las personas está a favor de la conveniencia de horas laborales los domingos.

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