Europa, el principal destino turístico mundial, fue el que más ha sufrido, con una caída de 10 puntos, señaló Marcelo Risi, portavoz de la OMT, quien lo achacó a la recesión que diezma las principales economías del Viejo Continente desde finales de 2008 y a la depreciación de la libra, que lastra el poder adquisitivo de uno de los principales mercados emisores, Reino Unido.
América del Sur es la única región, fuera de África, que ha mantenido un crecimiento del turismo internacional. El turismo en América descendió un 5%, mermado por Estados Unidos, Asia-Pacífico registró caídas del 6%, mientras que Oriente Medio sufrió la mayor pérdida de turistas, al caer un 18%, continente al que la OMT augura una "larga recuperación" hasta alcanzar los niveles de 2007.
Mientras, África y América Latina concentraron los únicos crecimientos en turistas, con un 3% más y un 2%, respectivamente. La OMT destacó Kenia como uno de los principales destinos del Sub-Sahara y "el fuerte flujo" de visitantes a la parte mediterránea del continente negro.
El máximo organismo del turismo mundial remarcó la "dureza" del desempleo y la caída de la actividad industrial y sus efectos en el sector turístico, por lo que, tras "los malos resultados" de los cuatro primeros meses, prevé que el intercambió de viajeros continue disminuyendo lo que queda del año y alcancen descensos entre el 4% y el 6% para todo el 2009.
Concretamente, la OMT espera caídas hasta del 6% entre mayo y agosto, y entre el 3% y el 5% en los meses comprendidos entre septiembre y diciembre.
Risi subrayó que "este impacto en el turismo" se debe principalmente a la actual crisis económica y a los efectos de la gripe A (H1N1) y agregó que "no se espera una recuperación del sector antes del año que viene".
Según el portavoz de la OMT, para el resto de 2009 se estima que esa actividad se reduzca entre un cuatro y un seis por ciento en relación al año anterior.
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