En un intento por tratar de superar el conflicto que mantienen desde inicio de semana varios miles de empleados del sector aluminio, Sanz declaró que el gobierno cancelará a los trabajadores en tres partes una deuda de unos 99,17 millones de dólares por intereses de prestaciones sociales.
El anuncio fue rechazado el jueves por algunos sindicatos que exigieron el pago inmediato de las obligaciones, según informó el dirigente sindical, Emilio Campos.
Varios miles de trabajadores de Bauxilum, Industria Venezolana de Aluminio C.A. (Venalum), Carbones del Orinoco C.A. (Carbonorca) y Aluminio del Caroní S.A (Alcasa) iniciaron esta semana protestas callejeras en la ciudad suroriental de Puerto Ordaz, sede de las empresas, para exigir al gobierno el pago de los pasivos laborales y la realización de inversiones en ese sector.
El ministro admitió que las cuatro empresas "tienen un costo de producción cercano a los 3.700 dólares por tonelada y estamos vendiendo aluminio a un precio que todavía no ha superado los 1.600 dólares, de manera que hay déficit crónico de estas empresas que tornan su situación bien difícil a objeto de puedan cumplir con sus compromisos laborales".
"El presidente Hugo Chávez ha tenido que estar auxiliando a estas empresas", indicó Sanz al reconocer que las compañías del sector aluminio no generan el suficiente flujo de caja para mantenerse y han requerido inyecciones por 400 millones de bolívares fuertes (unos 200 millones de dólares) este año.
Agregó que las empresas del aluminio tienen problemas estructurales que vienen arrastrando desde hace varios años, que se han agudizado con la crisis financiera mundial.
"La crisis nos está impactando" dijo el ministro al asegurar que el gobierno está tomando acciones para atenuar el efecto.
El ministro dijo que las protestas de los trabajadores del sector "no ayudan en nada" a la crisis prevaleciente.
Sanz informó que el gobierno pagará a los trabajadores entre finales de este mes, septiembre y octubre, la deuda de 213,22 millones de bolívares fuertes, que equivalen a 99,17 millones de dólares, generada por los intereses de las prestaciones sociales.
Campos, secretario general del sindicato de Carbonorca, dijo que un grupo empleados se aglomeró a las afueras de la estatal Corporación Venezolana de Guayana (CVG) en Puerto Ordaz para protestar la declaración del ministro y exigir una forma de pago diferente de la deuda laboral.
"Los trabajadores no están de acuerdo con la forma como se nos va a pagar" la deuda, agregó.
Los ocho sindicatos del sector aluminio han señalado que tanto Bauxilum como Alcasa y Carbonorca se encuentran en el "suelo" debido a la obsolescencia de sus equipos y falta de inversión por parte del gobierno.
De las cuatro empresas del sector la única que se encuentra funcionando a su total capacidad es Venalum, pero las limitaciones impuestas por el gobierno a las exportaciones del aluminio han afectado sus finanzas, según ha denunciado la dirigencia sindical.
De acuerdo a cifras de los sindicatos en el sector público del aluminio laboran unas 17.000 personas.
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