Los bancos chinos prestaron 220.000 millones de dólares (1,5 billones de yuan) en junio, informó el miércoles el banco central en su sitio web. La cifra superó los pronósticos y superó las de mayo, de 97.000 millones de dólares (665.000 millones de yuan) y de abril, de 86.000 millones de dólares (590.000 millones de yuan).
Los economistas ven en el crecimiento del crédito una señal de que la economía comienza a revivir mientras Pekín busca proteger a China de la crisis global con un paquete de gastos en obras públicas y otros proyectos de 586.000 millones de dólares (4 billones de yuan).
Gran parte de ese estímulo sería financiado por los bancos estatales chinos.
La cifra anunciada hoy llevaría los préstamos bancarios de la primera mitad del año a 1,1 billón de dólares (7,3 billones de yuan).
El crecimiento del gasto ha ayudado a despertar el entusiasmo de los inversionistas e impulsó una suba de las bolsas de China. El índice de referencia de la bolsa de Shanghai, la principal del país, llegó el lunes a su punto más alto en 13 meses para luego bajar levemente.
Algunos analistas y funcionarios chinos, entre ellos el gobernador del banco central, han advertido sobre posibles problemas, como una burbuja en los precios de inmuebles y acciones o un aumento de los préstamos de baja calidad, si los bancos no muestran cuidado al prestar dinero.
El gobierno no ha expresado su preocupación de manera oficial pero algunas advertencias sobre posible especulación bursátil y otros usos riesgosos del dinero han aparecido en el diario del Partido Comunista y otros medios oficiales.
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