Viñals (FMI) dice que la reforma de la supervisión y regulación financiera se hace "ahora o nunca"

MADRID.- El consejero financiero y director de Asuntos Monetarios del Fondo Monetario Internacional (FMI), el español José Viñals, advirtió hoy en contra de la tentación de aplazar o descafeinar la reforma de la supervisión y regulación financiera, porque es necesaria para conseguir un sistema bancario eficiente y estable y prevenir futuras crisis como la actual. "O se hace ahora, o nunca", aseveró.

Viñals, que participó en el 'IX Encuentro Financiero de Caja Madrid', sostuvo que en la medida en que se vaya saliendo de la crisis financiera internacional se puede sucumbir al deseo de no acometer las reformas con la intensidad necesaria, lo que pondría de nuevo en riesgo tanto al sistema bancario como a la economía mundial.

"Así como lo que nos llevo a la crisis fue un exceso de confianza de todos, de reguladores supervisores e inversores, creo que debemos evitar un exceso de confianza en los momentos actuales y futuros", alegó el antiguo subgobernador del Banco de España, partidario de "aprovechar el momento" para introducir mejoras.

"Este es un riesgo al que hay que hacer frente, porque o la reforma se hace ahora o sino, no la haremos en mucho tiempo, con el riesgo de que crisis como la actual se vuelvan a repetir y colocar en jaque al sistema financiero y a la economía mundial, y en cierto modo es ahora o nunca", aseveró.

A su parecer, la lección que se extrae de la crisis actual es que hay que reforzar los marcos de regulación y supervisión financiera, para lo que es necesario "separar la paja del trigo" y distinguir entre lo bueno y lo malo del esquema actual, por que el sistema financiero ha funcionado bien durante quince años, pero ahora está funcionando "tremendamente mal".

Para Viñals, "hay que evitar ser tímido" en la reforma regulatoria, pero también hay que evitar sobrerregular en exceso, para poder ir hacia un sistema financiero más seguro y robusto pero sin debilitar la capacidad de innovación, el dinamismo y la eficiencia. "Hay que ver todos los árboles, y que no nos impidan ver el bosque", acotó.

La mala regulación y supervisión financiera de muchos países es "corresponsable fundamental de los problemas que ha habido", de la acumulación excesiva de endeudamiento y la infravaloración de riesgos excesivos ligados a incentivos a corto plazo, en vez de vinculados a la consecución de objetivos a medio y largo plazo.

Viñals abogó por una mayor regulación aplicada con más eficacia, con estándares más estrictos, como reforzar el capital regulatorio de las entidades y prestar mayor atención a la liquidez, al tiempo que se mostró partidario de ampliar el perímetro de la regulación para abarcar a más entidades, y de que los supervisores financieros nacionales avancen en su coordinación internacional.

Por otro lado, recalcó que la regulación financiera se encamina a evitar que el sistema financiero acentúe los ciclos económicos y realimente sus círculos viciosos a través de instrumentos como las provisiones, que el Banco de España lleva exigiendo a los bancos y cajas de ahorros desde hace casi una década.

La regulación internacional también tratará de lidiar con el problema de las entidades que son demasiado grandes o están demasiado interconectadas como para que las autoridades dejen que caigan cuando se demuestre que no son viables, y establezca mecanismos que contemplen la posibilidad de que sean liquidadas de forma ordenada, explicó el responsable del FMI.