La información semanal sobre el empleo e informes acerca de la vivienda y la manufactura fueron insuficientes para disipar el nerviosismo en torno a lo rápido que ha avanzado el mercado. Las acciones han cerrado con ganancias en ocho de los últimos 10 días.
De acuerdo con los cálculos preliminares, el promedio industrial Dow Jones cayó 7,79 puntos, el 0,1%, a 9.783,92. El miércoles, el Dow saltó 108 puntos, a su mejor nivel en el año.
El Standard & Poor's de 500 acciones retrocedió 3,27 unidades, el 0,3%, a 1.065,49, mientras que el índice compuesto Nasdaq perdió 6,40 puntos, el 0,3%, a 2.126,75.
El ritmo de las ganancias ha provocado advertencias de algunos analistas, quienes consideran que las acciones han subido demasiado y muy rápido.
"Este mercado se ha saturado un tanto de buenas noticias", dijo Jeff Kleintop, jefe de estrategas de mercado en LPL Financial.
El Departamento del Trabajo informó que el número de personas que presentaron por vez primera solicitudes de prestaciones por desempleo cayó a 545.000 la semana pasada, respecto de la cifra de 557.000 revisada al alza y correspondiente a la semana inmediata anterior.
Los economistas encuestados por Thomson Reuters esperaban que el número de solicitudes subiera.
Fue el menor nivel de nuevas solicitudes de ayuda por desocupación desde comienzos de julio, lo que sugiere que los recortes de plazas se están moderando. Sin embargo, las personas que siguen recibiendo ayuda por desempleo aumentaron a 6,2 millones, ligeramente arriba de los pronósticos de los analistas.
Muchos economistas consideran que el desempleo es el mayor obstáculo para un repunte de la economía, y el mercado laboral capta ahora buena parte de la atención de los inversionistas en la bolsa.
Por separado, el Departamento de Comercio informó que la construcción de viviendas nuevas aumentó en agosto a su nivel más alto en nueve meses, en medio de un crecimiento en la edificación de apartamentos.
La cifra de casas cuya construcción ha comenzado subió 1,5%, a una tasa anualizada de 598.000 unidades, el mes pasado, justo por debajo del ritmo que los economistas habían pronosticado.
En otra señal bienvenida, el índice del banco central de Filadelfia sobre condiciones regionales de las manufacturas subió a 14,1 puntos en septiembre, respecto de 4,2 en agosto. El número más reciente es el más alto desde junio del 2007 y la segunda lectura positiva en fila. Sin embargo, una caída en los nuevos pedidos, respecto de agosto, preocupó a algunos inversionistas.
Los precios de los bonos saltaron, abatiendo el rendimiento. El certificado del Tesoro a 10 años cayó a un rendimiento de 3,39%, en comparación con el 3,48% observado al cierre del miércoles.
El dólar tuvo un comportamiento mixto ante otras divisas, mientras que el oro cayó.
El crudo descendió 3 centavos, a 72,47 dólares por barril, en la Bolsa Mercantil de Nueva York.
Unas tres acciones bajaron por cada dos que subieron en la Bolsa de Valores de Nueva York, donde el volumen de operaciones fue de 1.500 millones de dólares, respecto de los 1.600 millones intercambiados el miércoles.
El Russell 2000, indicador de las empresas pequeñas, bajó 1,91 punto, el 0,3%, a 615,47.
En otros mercados internacionales, el FTSE 100 británico subió 0,8%, el DAX alemán ganó 0,5%, el CAC-40 francés se incrementó 0,6% y el Nikkei japonés aumentó 1,7%.
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