lunes, 14 de septiembre de 2009

Yukiya Amano, un experto en desarme, al frente de la AIEA

VIENA.- El japonés Yukiya Amano, nombrado oficialmente este lunes jefe de la Agencia Inter-nacional de la Energía Atómica (AIEA) por un período de cuatro años, es un especialista en desarme y lucha contra la proliferación nuclear.

Este diplomático de 62 años sucederá el 1 de diciembre al premio Nobel de la Paz egipcio Mohamed ElBaradei, quien renunció a presentarse a un cuarto mandato de cuatro años.

Tras ser aprobado por aclamación este lunes por la mañana durante la conferencia general anual de los 150 Estados miembros de la agencia, Amano se limitó a pronunciar un discurso en el que no mencionó Irán.

"Acepto humildemente el nombramiento en este puesto importante y expreso mi sincera gratitud a los Estados miembros por el apoyo y la confianza que me otorgan", declaró.

Nombrado en julio pasado por el consejo de 35 gobernadores de la agencia, el embajador japonés ante la AIEA desde 2004 tuvo que superar varias votaciones antes de imponerse a su homólogo sudafricano Abdul Samat Minty.

El risueño diplomático, reconocible por sus gafas redondas y criticado por algunos por falta de carisma, es un fino conocedor de los temas nucleares y estratégicos.

En una entrevista concedida en febrero de 2009, admitió sin ambages que la AIEA no sólo desempeña un papel técnico sino también político, principalmente en asuntos como los de Irán, Siria o Corea del Norte.

Nacido dos años después del final de la Segunda Guerra Mundial en Japón, concretamente el 9 de mayo de 1947, Amano estudió derecho y en 1972 entró en el ministerio de Relaciones Exteriores, donde se labró la reputación de experto en desarme.

Dirigió el servicio de Ciencia y el de Energía Nuclear en 1993. En 1999 fue nombrado subdirector general para el Control de las Armas y los Asuntos Científicos en el ministerio, y en 2002 su director.

En 2004 Amano se puso al frente del departamento de Desarme, de la No Proliferación y de Ciencia, antes de ser delegado ante la AIEA.

Durante su trayectoria profesional participó en las negociaciones para la revisión del Tratado de No Proliferación en 1995, 2000 y 2005, así como en las que se están llevando a cabo para la prevista en 2010.

Amano está casado y habla con fluidez inglés y francés. Estudió dos años en Francia y fue cónsul general de Japón en Marsella (sur) de 1997 a 1999.

No hay comentarios:

Publicar un comentario