viernes, 6 de noviembre de 2009

El presidente de General Motors Europa deja la compañía, según 'Der Spiegel'

FRANCFORT.- El presidente de General Motors Europa y presidente del consejo de supervisión de Opel, Carl-Peter Forster, abandonará su puesto al frente de la filial europea del grupo automovilístico norteamericano debido a la repentina cancelación de la venta de Opel a Magna International anunciada esta semana, según una información de 'Der Spiegel'.

El candidato a sustituirle podría ser el vicepresidente mundial de General Motors y responsable de las Operaciones Internacionales de la compañía, Nick Reilly, mientras que la publicación alemana sitúa al vicepresidente de Marketing y Comunicación de la compañía, Bob Lutz, de 77 años de edad, como sustituto de Forster al frente del consejo de supervisión de Opel.

La filial alemana de General Motors, Opel, declinó, en un escueto comunicado, hacer comentarios sobre las informaciones de prensa que apuntan a la eventual salida de la compañía del consejero delegado de General Motors Europa y presidente del consejo de supervisión de Opel.

Opel señala que actualmente se están produciendo especulaciones en torno a los círculos de dirección de la compañía, como el consejo de supervisión. "Opel no puede hacer comentarios sobre estas especulaciones en este momento", añade.

Además, la empresa no comenta tampoco en este momento las especulaciones sobre el consejo de administración de Opel o sobre los miembros individuales de este consejo. "En el momento adecuado, Opel hará públicos los comentarios en coordinación con General Motors", afirma.

La firma con sede en Alemania asegura que, tras la decisión de General Motors de mantener Opel, habrá conversaciones con todas las partes implicadas, "que empezarán en los próximos días".

Por otra parte, la información de 'Der Spiegel' afirma que los empleados de la compañía temen que Reilly se sitúe al frente de General Motors en Europa para llevar a cabo una "dura" reestructuración de las plantas que Opel tiene en el 'Viejo Continente', lo que podría provocar numerosos despidos.

Igualmente, este nombramiento también es visto como una provocación para el fabricante alemán porque Reilly, hasta ahora, era el responsable de los negocios internacionales de GM, así como de la comercialización internacional de la marca Chevrolet, que ha dificultando la expansión de Opel relegándola a marca regional europea.

El abandono de Forster también está motivado por criticar abiertamente al consejo de administración de la matriz de GM por su decisión de cancelar la venta de Opel a Magna, así como por declararse en numerosas ocasiones como un defensor de la operación. "Es un giro repentino difícil de comprender y me habría gustado un resultado diferente de las negociaciones", explicó Forster el pasado miércoles en una entrega de premios.

Sin embargo, en ningún momento se ha cuestionado la labor de Forster al frente de GM Europa, ya que durante su mandato ha conseguido mejorar significativamente la calidad de los modelos de Opel, un logro por el que fue galardonado con el 'Volante de Oro', en especial por el modelo Insignia, según explicó 'Der Spiegel'.

Por otra parte, el consejero delegado de General Motors, Fritz Henderson, declaró ayer a la prensa de Detroit, que "en cuestión de días o semanas" se iba a crear un nuevo equipo de gestión para la firma alemana.

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