"Creemos que nuestros tipos ahora son apropiados y los riesgos para la estabilidad de precios están controlados en buena medida", dijo González-Páramo al diario El Mundo.
González-Páramo añadió que el BCE no ve "presión a corto plazo" en la inflación.
"Los riesgos al alza y a la baja están equilibrados", aseguró.
También afirmó que no prevé una acción conjunta entre el BCE y la Reserva Federal de Estados Unidos, porque ese país tiene un ciclo económico ligeramente diferente y su sistema financiero está en una situación distinta.
"No veo en este momento qué podría justificar una unidad de mensaje y acción coordinada en el tiempo".
También aseguró que el BCE sería "más explícito" en diciembre acerca de sus planes de retirar las medidas de estímulo en 2010.
"La salida debe ser gradual y en el momento oportuno, sin que haya fecha concreta", afirmó.
"En la medida en que los mercados financieros se han normalizado mucho, no todas las medidas son igual de necesarias. Cabe pensar en ir retirando algunas medidas. En diciembre seremos más explícitos", dijo.
El directivo madrileño de 51 años también se refirió a la situación del mercado laboral español, del que dijo que "no es el origen de la crisis, pero no está facilitando la salida rápida de ella".
"Sin eliminar las trabas que ahora mismo hay en el mercado laboral, tendremos difícil retornar a una situación en la que éramos uno de los países más pujantes en la dinámica de crecimiento", afirmó. "Hay que dotar el sistema de flexibilidad y eliminar al máximo la segmentación del mercado entre fijos y temporales".
González-Páramo, que destacó la pérdida de productividad de la economía española, dijo que las empresas deben entender que "la I+D no se puede hacer siempre fuera", y agregó que deberían identificar "dónde está el futuro y darles la facilidad para perseguirlo en términos de crédito, de eliminar restricciones burocráticas y facilitar el ajuste de las capacidades de producción".
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