"España ocupa el último lugar de la clasificación europea. En nuestro país sólo un 18,3 por ciento del total de empresas han lanzado nuevos productos al mercado y aunque el porcentaje sube al 39,5 por ciento entre las grandes empresas todavía estamos lejos del promedio europeo y a años luz de los países punteros de la UE", afirma el Instituto de Estudios Economicos (IEE).
No obstante, destaca que las diferencias entre países son "enormes". En este sentido, apunta que en Malta y Luxemburgo casi un 60 por ciento del total de empresas han logrado estar en el mercado con nuevos productos, y que en Suecia y en Eslovenia las empresas innovadoras han superado el 51 por ciento.
Además, indica que los Países Bajos registran una "cifra elevada" del 48,1 por ciento, mientras que Austria, Letonia y Finlandia se sitúan en torno a un 45 por ciento. "En Bélgica, Bulgaria e Irlanda más del 40 por ciento de las empresas han lanzado nuevos productos. La República Checa, Eslovaquia, Lituania, Grecia, Chipre, Dinamarca, Estonia y Polonia se suman a los países que superan la media europea del 32,4 por ciento", añade.
En esta línea, señala que sólo siete países, entre ellos España, cuentan con empresas que no se distinguen por su capacidad de innovar en productos y puntualiza que países como Reino Unido se queda en un 31,6 por ciento, al tiempo que Hungría y Alemania superan el 30 por ciento. "Portugal e Italia se sitúan en un 29,8 por ciento y en un 29,5 por ciento, respectivamente. Rumania alcanza un 24,7 por ciento", apostilla.
"La innovación es, sin lugar a dudas, uno de los motores esenciales para el crecimiento económico. La capacidad en investigación y desarrollo de un país es crucial para lograr nuevos procesos y nuevos productos, pero hace falta a la vez la aplicación práctica de las innovaciones en las empresas", concluye el IEE.
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