En discursos con ocasión del feriado nacional que marca la unificación de los siete emiratos hace 38 años, destacaron las gestiones del país para crecer y diversificar su economía.
Sus discursos no mencionaron los 60.000 millones adeudados por Dubai World, el conglomerado estatal con intereses que van desde bancos a puertos en 50 países y la tienda de modas de lujo Barney's New York, así como un hotel con seis torres en Las Vegas, y que ha encabezado el crecimiento del emirato.
Dubai World sorprendió la semana pasada a los mercados mundiales al anunciar que pedirá a sus acreedores un aplazamiento de por lo menos seis meses en el pago de 26.000 millones de dólares que adeuda, mientras reestructura sus finanzas.
El anuncio estremeció los mercados financieros del mundo al temer los inversionistas el posible impago de Dubai World, además de ser un posible indicio de problemas económicos globales más amplios que puedan minar la incipiente recuperación global tras la peor crisis económica acaecida en décadas.
Dubai se transformó de una país desértico en la Disneylandia del Medio Oriente gracias al dinero barato tomado a crédito, especialmente el destinado a proyectos de construcción de lujo.
La crisis global congeló la liquidez y el precio de los bienes raíces se desplomaron junto cuando comenzaron a vencer los pagos. Los temores a que Dubai no pueda efectuarlos estremecieron la semana pasada los mercados bursátiles, especialmente las de los emiratos, que sufrieron pérdidas de hasta un 8% en un día.
Empero, en el feriado nacional los funcionarios de los EAU se mostraron optimistas.
"No hay duda de que los drásticos cambios y desafíos que encara la economía global demuestran que la economía (de los EAU) es sólida, construida en firmes cimientos capaces de capear la crisis, sin importar su dificultad", dijo el ministro de Economía, Sultán Al Mansouri.
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