La Universidad de Yale anuncia despidos y congelación de sueldos

NUEVA YORK.- La prestigiosa Universidad de Yale quiere llevar a cabo recortes de plantilla y la congelación del sueldo de sus decanos, entre otras medidas, para hacer frente a un déficit de 150 millones de dólares que acumula en sus cuentas, publicó hoy el diario New York Times.

Afectada por una reducción en las donaciones privadas que recibe, la conocida universidad situada en Connecticut hizo llegar esta semana un informe a profesores y empleados en el que su presidente, Richard Levin, comunicó que la entidad se veía obligada a apostar por seguir reduciendo sus costos en los próximos años.

"Acciones similares que tomamos el año pasado eliminaron más de la mitad del déficit, pero aún contamos con un agujero de 150 millones de dólares", explicó Levin en un informe en el que muestra su intención de acabar con esa deuda "en el próximo y los siguientes años".

Según el Times, las donaciones que recibe la universidad se situaron en 16.300 millones de dólares en junio pasado, frente a los 22.900 millones de junio de 2008, cuando alcanzó su máximo histórico.

Ante esa situación, los responsables de Yale, que ya despidieron a cien de sus 9.200 empleados en 2009, anunciaron su intención de seguir recortando su fuerza laboral este año y, aunque no ofrecieron cifras concretas, aseguraron que esa medida, como hasta ahora, no afectará al cuerpo docente de los distintos centros que la integran.

La propuesta del presidente de la universidad incluye asimismo la congelación de algunos salarios y la obligatoriedad al pago del seguro de salud a aquellos empleados que cobren más de 83.000 dólares al año.

Además, Yale llevará a cabo la cancelación de algunos programas de investigación y aplicará reducciones presupuestarias a otros, al tiempo que también prevé una reducción de entre el diez y el quince por ciento en el número de los nuevos estudiantes graduados a quienes no se les cobra matrícula.

Entre otras medidas de ahorro, la universidad también prevé, según el Times, que todos los edificios rebajen la temperatura de su calefacción hasta los veinte grados centígrados.

Numerosas universidades estadounidenses han llevado a cabo medidas similares desde que empezó la crisis económica y, según recordó el Times, la Universidad Cornell despidió a 150 de sus empleados y la de Princeton eliminó unos cuarenta puestos de trabajo, la igual que prejubiló a 145 empleados.