Las remesas en enero pasado ascendieron a 1.320 millones de dólares, cuando en el mismo mes del 2009 sumaron 1.568 millones de dólares, según datos divulgados el lunes por el Banco de México.
La información de los envíos coincidió con la divulgación de un sondeo mensual del banco central entre analistas y consultores privados, quienes pronosticaron que el producto interno bruto (PIB) crecerá 3,9% al cierre del 2010, una mejor estimación que el mes anterior cuando preveían una expansión de 3,3%.
Para el 2011, los 31 analistas consultados también estimaron un mejor comportamiento del PIB al ajustar a la alza el crecimiento, de 3,5% a 3,7%.
La caída reportada por el Banco de México en enero de 15,78% es la mayor desde octubre de 2009, cuando se desplomó 35,86%, medida en términos anuales, según estadísticas del organismo.
Las remesas son la segunda fuente de divisas del país sólo detrás del petróleo, y han reportado en los últimos meses un comportamiento a la baja.
Los envíos, enviados casi en su totalidad desde Estados Unidos, bajaron 15,74% en todo 2009.
El banco central ha argumento como explicación de la caída de las remesas, la desaceleración económica en Estados Unidos, donde radica la mayoría de los emigrantes mexicanos, particularmente en 2009 cuando se vivió una de las peores crisis mundiales.
Más de 11,8 millones de mexicanos radican en ese país.
La crisis del 2009 afectó particularmente a México, que fue el país Latinoamérica con la mayor contracción económica, al caer su PIB un 6,5% .
Los pronósticos de los analistas privados de que las perspectivas económicas para 2010 son mejores, coinciden con las estimaciones del gobierno: la Secretaría de Hacienda espera un crecimiento de 3,9%, mientras que le banco central una expansión de 3,2% y 4,2%.
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