martes, 9 de marzo de 2010

Portugal reafirma su plan de austeridad pese a los sindicatos

LISBOA.- Los líderes sindicales portugueses prometieron el martes aumentar las protestas contra el plan de austeridad del Gobierno, aunque la administración socialista, presionada para reforzar las finanzas públicas, dijo que no retirará sus medidas.

El Gobierno presentó el lunes el anteproyecto de un plan a largo plazo para recortar el déficit del presupuesto a menos de un 3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) para 2013, mientras intenta convencer a los mercados de que puede evitar un crisis fiscal como la de Grecia.

Los inversores creen que Portugal es una de las economías más vulnerables en la zona euro, aunque su déficit y su deuda son menores que las de Grecia.

Manuel Carvalho da Silva, líder del mayor sindicato del país, CGTP, criticó el plan del Gobierno, que incluye límites a la inversión pública y los sueldos de los funcionarios, como "absolutamente desequilibrados" y dijo que no ofrecen ventajas para los trabajadores.

"Estos serán tiempos que llamen a la movilización de los trabajadores portugueses", dijo a la prensa tras un encuentro con el primer ministro, Jose Socrates, y con el ministro de Finanzas, Fernando Teixeira dos Santos, para discutir el programa.

Joao Proenca, jefe del segundo mayor sindicato UGT, dijo que es evidente que habrá protestas si el Gobierno sigue adelante con sus planes de limitar los sueldos del sector público.

Pero el ministro de Finanzas se mostró desafiante. Consultado sobre la amenaza de las huelgas, dijo: "Nos enfrentaremos a esta realidad si se materializa. Pero eso no disminuirá nuestra determinación y haremos lo que tenemos que hacer por el bien del país".

"Si no realizamos con éxito esta corrección en las finanzas públicas el escenario será mucho peor. Implicaría un bloqueo a la financiación de la economía portuguesa, dificultades enormes para las empresas, comprometiendo el crecimiento y los empleos", advirtió.

Teixeira dos Santos dijo que los sindicatos deberían entender que el plan es "una base sólida para el futuro del país".

"Si, por el contrario, creen que todo está bien y que nada debería hacerse, entonces creo que están apuntando a un futuro que no será en absoluto radiante", dijo el ministro.

Los sindicatos, que celebraron una huelga de empleados públicos el jueves pasado, ya estaban preparando las protestas contra la congelación en los sueldos de este año en el sector público.

El plan a largo plazo del Gobierno no permite subidas en los sueldos por encima de la inflación.

Los analistas en general no esperan huelgas masivas perjudiciales, pero advierten que las protestas podrían minar la popularidad del Gobierno.

El Gobierno quiere reducir el déficit a un 2,8 por ciento del PIB en 2013 frente al 8,3 por ciento este año, recortando el gasto en los empleados fiscales y la inversión pública, la inversión y elevando los impuestos sobre los ingresos altos y las ganancias en los mercados de acciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario