El secretario del Tesoro, Timothy Geithner, indicó en un comunicado haber aplazado la publicación, inicialmente prevista para el 15 de abril, para poder destacar el punto de vista del gobierno estadounidense por vías distintas, aprovechando los diferentes encuentros con sus homólogos extranjeros en los próximos meses.
El secretario del Tesoro, Timothy Geithner, dijo que retrasará la publicación ese informe, pues una serie de reuniones internacionales que se realizarán en los próximos meses serán una mejor manera de avanzar en la propuesta de Estados Unidos.
A pesar de esto, Geithner dijo en un comunicado que China deberá adoptar un "tipo de cambio más orientado al mercado" para equilibrar el déficit comercial de Estados Unidos con ese país, que sumó 226.800 millones de dólares el año pasado.
"Pienso que estos encuentros son la mejor manera de destacar los intereses de EEUU hoy", explicó. La posición de EEUU acerca del yuan, la divisa de China -su segundo socio comercial- es muy esperada. En el último informe, publicado en octubre, el Gobierno de EEUU no llegó a acusar a China de manipular la tasa de cambio, pero sí estimó que ésta era rígida e infravalorada.
Esta tasa de cambio, que no ha evolucionado desde mediados de 2008, es un tema de polémica recurrente entre ambos países. Numerosos legisladores estadounidenses quieren que el gobierno acuse abiertamente a China de manipulación, lo cual abriría camino hacia eventuales sanciones comerciales.
Pero Geithner precisó que su intención era intentar convencer a China para que deje el yuan flotar más libremente. "Una evolución de China hacia una tasa de cambio que sea más determinada por el mercado representaría una contribución esencial al equilibrio mundial", estimó, antes de volver a evocar los argumentos de Estados Unidos a favor de una revaluación del yuan.
Es el mayor desequilibrio de los intercambios comerciales de Estados Unidos. Los fabricantes estadounidenses argumentan que el yuan de China está subvaluado casi hasta por 40% y esto es una razón de peso para el enorme déficit comercial.
Si el yuan aumenta su valor ante el dólar haría que los productos estadounidenses sean menos caros en China mientras que los productos chinos serán más costosos para los consumidores estadounidenses.
El gobierno espera que China permita que su moneda aumente de valor ante el dólar como una manera de reducir la diferencia comercial, al igual que lo hizo hasta mediados del 2008, cuando la recesión, que comenzó en Estados Unidos y se contagió al resto del mundo, comenzó a reducir marcadamente las exportaciones chinas en otros países.
Hace dos semanas, un grupo de 130 representantes estadounidenses envió una carta al gobierno en la que le pedían que se mencionara a China como un país manipulador de divisas. Los legisladores también pidieron que el Departamento de Comercio imponga sanciones comerciales contra China con el argumento de que su sistema de cambio es una práctica comercial injusta.
Además, 14 senadores revelaron una iniciativa en la que se solicita sanciones más estrictas contra los chinos si no permiten que el yuan aumente su valor ante el dólar.
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