La divisa europea valía 1,3579 este lunes a las 16.45 GMT, contra 1,3497 dólares el viernes por la noche en Nueva York, después de haber subido hasta los 1,3692 dólares hacia las 04.50 GMT, un máximo desde el 18 de marzo.
Los analistas temen sin embargo que este repunte sea de corta duración debido a los temores persistentes de contagio a otros países de la Eurozona, principalmente Portugal, Italia y España.
"La barrera de contención que proporciona el plan de ayuda a Grecia provee un respaldo considerable al euro, porque aporta claridad a la situación y debería reforzar la posibilidad para Grecia de refinanciarse en los mercados", comentó Daragh Maher, analista de Credit Agricole CIB.
"¿Pero cuánto tiempo tardará el mercado en desviar su atención hacia otros países de la Eurozona fiscalmente frágiles o hasta que, una vez digerida la noticia de Grecia, recupere su sentimiento negativo con respecto al euro debido a un débil crecimiento de la Eurozona? Dada la naturaleza impaciente del mercado, uno sospecha que no mucho", advirtió.
Tras dos meses de arduas negociaciones, los 16 países miembros de la Eurozona concluyeron el domingo los detalles de un acuerdo anunciado el 25 de marzo, comprometiéndose a prestarle, si lo requiere, hasta 30.000 millones de euros (40.000 millones de dólares) el primer año para ayudarla a superar una crisis que fragiliza a todo el continente y pesa sobre el euro.
La cifra será completada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), lo que podría llevar el total de préstamos a 45.000 millones de euros (60.000 millones de dólares).
Estos préstamos podrían ser concedidos a un interés del 5%, muy inferior al 7,5% que debe aceptar ahora Grecia en los mercados financieros, que han perdido la confianza en este país debido a sus enormes déficits y su descomunal deuda, que pesa actualmente 300.000 millones de euros.
"Incluso un paquete valorado en 45.000 millones de dólares no resolverá los problemas fiscales de Grecia", opinaron los analistas de Commerzbank, para los que la solución dependerá de que el plan vaya acompañado de medidas decisivas más allá del plan de austeridad actual, "que hasta ahora no ha convencido a los mercados".
Las bolsas europeas, que recibieron con agrado la noticia del plan griego en su apertura matutina, perdieron su impulso en el transcurso de la jornada. Londres logró ganancias del 0,12%, a 5,777.65 puntos, después de haber superado a primera hora el listón de los 5.800 puntos por primera vez en 22 meses. Madrid ganó un 0,58%, mientras que París y Fráncfort (+0,02%) cerraron en equilibrio.
Los mercados europeos, que ya habían repercutido con fuertes subidas el viernes los rumores de un acuerdo de los países de la Eurozona sobre Grecia, reflejaron la prudencia de los inversores antes de la publicación de los primeros resultados trimestrales de empresas este lunes.
La misma cautela reinaba en Wall Street, donde el Down Jones (+0,22%) y el Nasdaq (+0,17%) progresaban ligeramente a la espera de que el productor de aluminio Alcoa diera el tradicional pistoletazo de salida.
En Asia, la bolsa de Tokio terminó por su parte en alza del 0,42%.
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