Unos 400 pesqueros españoles, calcula el informe difundido al margen de una conferencia europea en La Coruña sobre el porvenir de la pesca, pasan un 90% de su tiempo fuera de aguas europeas y representan en toneladas la mitad de la flota española.
Algunos atuneros de más del centenar de metros de longitud, subvencionados por la UE, pescan en los océanos Índico y Pacífico y pueden capturar 3.000 toneladas de atún en un viaje, añadió el informe, que señala que varios de ellos fueron sancionados por pesca ilegal.
En tonelaje, España representa por sí misma un cuarto de la flota europea, es decir, el doble de las flotas británica y francesa, segunda y tercera en Europa, respectivamente. Entre el 2000 y el 2006, recibió un 46% de las subvenciones europeas del sector, por delante de Italia (11%) y Francia (9%), precisó el informe.
Estas subvenciones sirvieron principalmente para la modernización y construcción de grandes barcos de pesca, añadió Greenpeace. Sólo tres de los 53 pesqueros españoles que gozaron de ayudas para la construcción tienen menos de 24 metros.
Varios de los casos denunciados ya fueron objeto de correcciones a favor de reformas de la política pesquera. En el 2005, las ayudas para la construcción fueron suprimidas y entre 2007 y 2013 España solo recibirá 1.100 millones de euros de los 3.800 millones del Fondo europeo de Pesca.
El domingo y este lunes en La Coruña, unos 200 responsables gubernamentales europeos, profesionales y representantes de las ONG se dedicaron a debatir sobre las orientaciones de la nueva reforma del sector.
Si el 'statu quo' se mantiene, de aquí a 10 a 15 años, "es la catástrofe, con la quiebra de todo el sector y el riesgo de liquidar el porvenir económico de regiones enteras", advirtió el director general de pesca de la Comisión Europea, César Deben.
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