Por la noche en China, el dólar cotizaba a unos 6,8133 yuanes, luego de haber bajado a 6,7925.
"(Las autoridades) han retrocedido un poco, quieren mostrar que flota con un poco más de libertad que antes", dijo David Cohen, director de pronósticos económicos para Asia de la consultora Action Economics en Singapur.
El Banco Popular de China anunció el sábado que permitiría una flotación cambiaria más amplia de su moneda, en un intento de contrarrestar las acusaciones de que su política monetaria buscaba dar una ventaja desleal a los exportadores chinos en mercados internacionales.
La decisión revaluó a la moneda china el lunes, cuando el dólar bajó del cierre del viernes de 6,8272 yuanes hasta 6,7971.
Esa suba del 0,4% representó un despegue abrupto respecto del espectro limitado de flotación de cerca de 6,83 yuanes por dólar que se mantenía desde mediados de 2008.
En lugar del emparejamiento con el dólar, el banco central restauró su práctica de fijar el cambio del yuan contra una canasta de divisas, incluyendo el dólar. Tras la creación de ese sistema en 2005, el yuan ganó casi un 20% frente al dólar, hasta que Beijing detuvo su alza dos años después para ayudar a proteger sus exportaciones de la recesión global.
Beijing ha descartado una gran revaluación del yuan y dijo que la divisa se encuentra en su nivel adecuado. Las presiones sobre el yuan son generalmente alcistas. En vista de que China tiene superávit comerciales, el banco central compra el exceso de divisas extranjeras para mantener estable el valor del yuan.
A medio plazo, la tendencia seguirá siendo hacia un fortalecimiento del yuan. "Mucho dependerá de la dirección que tome el dólar", dijo Cohen.
En un principio, el programa fue limitado al comercio con la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, Hong Kong y Macao. La medida tenía como fin fomentar el uso internacional del yuan y dar a las empresas mayor flexibilidad para prever los riesgos de las fluctuaciones de divisas.
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