"La zona euro necesita fortalecer su gobierno económico común", declaró Zapatero tras celebrar un almuerzo de trabajo con Berlusconi en la sede del Gobierno italiano, el romano palacio Chigi.
"No hay salida nacional, sino europea", agregó Zapatero, quien admitió que los "retos que tenemos delante son de gran magnitud". Por su parte, Berlusconi, que también ha tenido que aprobar una serie de medidas de ajuste presupuestario debido a la crisis económica que azota a Europa, coincidió sobre la necesidad de una política económica común.
"Hemos convenido que se necesita una gobernanza precisa de aquí en adelante para todo aquello relacionado con la moneda única", aseguró Berlusconi. "Europa supo enfrentar bien la especulación internacional", recalcó primer ministro italiano, quien considera clave enviar un mensaje de confianza a los mercados y elogió el "coraje" de las medidas adoptadas por su homólogo español, así como su "autoridad" en el seno del Consejo de Europa.
"Comparto el mensaje de confianza de Berlusconi. Las medidas de reducción de gasto son para todos y el sacrificio que pedimos ahora a los ciudadanos es la prosperidad de mañana", afirmó por su parte Zapatero.
Los dos líderes europeos aseguraron también que coinciden en temas de política internacional, como el Líbano y América Latina, "continente de gran ascendencia estratégica", en palabras de Zapatero. Pese al clima de entendimiento, Berlusconi no quiso someterse a las preguntas de los periodistas y dejó al primer ministro español solo frente a la prensa.
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