lunes, 30 de agosto de 2010

Los consumidores de EEUU dan un apoyo modesto, pero bienvenido, a la economía

WASHINGTON.- Los consumidores estadounidenses emprendieron nuevamente el camino a las tiendas en julio, aportando a la economía un bienvenido apoyo, aunque modesto, en momentos en que la reactivación muestras señales de agotamiento.

Tras una sensible reducción en junio, los gastos de consumo de los hogares se recuperaron 0,4% en términos anualizados respecto del mes precedente (datos corregidos de variaciones estacionales), según la información divulgada este lunes en Washington por el Departamento de Comercio.

El resultado es mejor que el previsto por los analistas, que estimaban un aumento del consumo de 0,3%, según la mediana de las previsiones.

El aumento de los gastos fue superior al de los ingresos de los hogares, ya que, según el departamento de Comercio, los segundos se incrementaron 0,2%, lo que se ajusta a la previsión media de los analistas. En junio se habían estancado.

Tras la multiplicación de indicadores económicos decepcionantes el último mes, el aumento de los gastos de consumo en el inicio del tercer trimestre del que dan testimonio las cifras divulgadas por el ministerio, resulta estimulante.

"Mientras los hogares sigan gastando, la recuperación puede continuar", estima el economista Joel Naroff, de Naroff Economic Advisors. Los nuevos datos son "solamente correctos", observa. Sin embargo, "los salarios aumentan y la gente compra una gran gama de bienes; hay pocos motivos, pues, para pensar que nos encaminamos a una recaída".

"Al mismo tiempo", agrega, "nada indica que haya una recuperación sólida" en marcha. Las cifras indican que "el consumo continúa recuperándose, aunque modestamente, apoyado por una progresiva mejora de los ingresos del trabajo", opina Peter Newland, de Barclays Capital, que se refiere a un "consumo sólido al inicio del tercer trimestre".

Para Ian Shepherdson, de la firma de analistas HFE, el aumento de los gastos de los hogares en julio asegura como mínimo un alza del consumo de 1,3% en los tres meses del verano. Según Shepherdson, ese umbral sería ampliamente superado por el continuo aumento de los salarios, y el consumo podría incrementarse cerca de 2% en el tercer trimestre, es decir tanto como en la primavera boreal.

El consumo es el motor tradicional de la economía de Estados Unidos. Pero a causa de las dificultades que enfrentan los hogares, no ha sido el caso con la recuperación iniciada en el verano de 2009. El presidente de la Reserva Federal (banco central de EEUU), Ben Bernanke, indicó claramente el viernes que las perspectivas de la economía estadounidense se habían deteriorado recientemente.

Una de las claves de la recuperación pasa por la mejoría del mercado de trabajo, que permitiría quebrar el círculo vicioso del alto desempleo, en el que el escaso aumento de los salarios, la crisis del mercado inmobiliario, restricciones al crédito, fragilidad de los bancos y de las pequeñas y medianas empresas y la debilidad del consumo y del crecimiento, se alimentan mutuamente.

Tras la difusión el viernes pasado de las cifras revisadas del PIB, que dan cuenta de un claro enlentecimiento del crecimiento económico (de 3,7% en el primer trimestre a 1,6% en el segundo), economistas, inversores y políticos aguardan el informe oficial sobre el empleo en agosto, que se difundirá el próximo viernes. Los pronósticos no son nada optimistas y los analistas prevén un alza de 0,1 punto porcentual en la tasa de desempleo, que ascendería así a 9,6%.

No hay comentarios:

Publicar un comentario