MADRID.- El Ibex ha logrado salvar con ganancias +1,6% una semana contaminada por las crecientes dudas sobre la recuperación de EEUU y de Europa, y sobre la solvencia de los países periféricos del euro, que han disparado sus primas de riesgo y la cotización del oro, valor refugio en momentos de incertidumbre. El retroceso en lo que va de año se mitiga al 10%.
El buen dato del índice de confianza empresarial de Alemania, el más alto registrado en tres años, obró el milagro el viernes al sembrar la esperanza en el Viejo Continente, donde las principales plazas salieron del desánimo en que estaban sumidas y viraron al verde, con los ojos puestos sólo en las buenas noticias.
El Ibex estrenará el lunes en los 10.727 puntos, con la incógnita de si Moody's mantendrá la máxima calificación de la deuda española en 'AAA' una vez que el Gobierno ha aprobado los presupuestos generales de 2011, movimiento que esperaba la agencia de calificación para tomar su decisión.
La semana arrancó con las dudas sobre la economía de Irlanda, que disparó los diferenciales de deuda de los países periféricos, sobre todo de Portugal y Grecia, pero también de España. Los 'blue chips' compensaron las ventas y permitieron al Ibex terminar con ganancias el lunes (+1,46%).
El éxito de las colocaciones de deuda de España, Irlanda y Grecia le permitió tocar los 10.900 durante la sesión del martes, trayectoria que truncó la apertura plana de Wall Street ante la reunión de la Reserva Federal estadounidense (Fed), lo que encogió sus ganancias (+0,2%) y le devolvió a los 10.700 puntos.
El mensaje del banco central norteamericano de que la recuperación del país se ha detenido aplastó las esperanzas de los inversores de todo el planeta y hundió al Ibex un 1,93% el miércoles, el mayor descenso desde el 11 de agosto, que le hizo retroceder a los 10.500.
La contracción de la economía de Irlanda y los malos datos de paro de Italia y de Estados Unidos acentuaron la tristeza del selectivo, que se dejó un 0,51% el jueves, aunque consiguió hacer pie al borde del precipicio, en los 10.501 enteros.
Sacyr se coronó medalla de oro del selectivo madrileño con una ganancia semanal del 11,27%, al calor de informes de bolsa con recomendaciones de compra que destacan la estabilidad financiera del grupo tras el acuerdo de refinanciación de Vallehermoso, su filial de promoción inmobiliaria.
Grifols ocupó la plata del palmarés (+8,45%), beneficiada, previsiblemente, por los problemas de su competidora alemana Octapharma, a la que le han retirado la licencia para varios productos hemoderivados en varios países europeos.
A gran distancia de los dos primeros puestos del podio, Inditex se llevó el bronce semanal (+3,84%), por delante del pelotón de empresas con ganancias de más de un 3%, entre las que acabaron Repsol (+3,63%), Técnicas Reunidas (+3,36%), OHL (+3,34%) y BBVA (+3,10).
Las acciones de Telefónica, que ha recibido 'luz verde' del regulador brasileño para la compra de Vivo, acumularon una ganancia en los últimos cinco días de 2,56%, superiores a las de Endesa (+1,61%) e Iberdrola (+1,58%), sincronizadas con la subida del índice.
El resto de valores del sector bancario describió tendencias dispares, con Banesto (+1,88%) y Bankinter (+0,31%) en terreno positivo, y Sabadell (-1,88%), Santander (-1,34%) y Popular (-0,61%) en rojo.
Gamesa acabó con el mayor retroceso (-2,72%), arrastrada por la salida de su capital de la familia Del Pino después de vender su participación del 5,64% con minusvalías que superan los 170 millones de euros.
Arcelormittal y Telecinco ocuparon el segundo y tercer puesto de mayores recortes, al ceder un 2,43% y un 2,36%, en cada caso.
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