Ambas noticias económicas reforzaron la creencia de que la economía de la eurozona, que creció un ritmo trimestral 1% en el segundo trimestre de este año _ equivalente a un ritmo anual superior al 4% _ avanza ahora con mayor moderación, reflejando el enfriamiento económico de Estados Unidos.
La noticias provocaron caídas en las bolsas de valores europeas y el euro.
Eurostat, la oficina de estadísticas de la UE, dijo que la producción industrial _ el principal motor de la recuperación en los 16 países de la eurozona _ se mantuvo inalterada en julio, tras bajar un 0,2% en junio y un enorme aumento en los tres meses anteriores.
El estancamiento fue menor al pronosticado _ una expansión industrial del 0,2% en el mes.
Mientras tanto, el sondeo mensual ZEW, atentamente seguido por industriales y economistas, indicó que el sentimiento inversionista alemán, país con la mayor economía de la eurozona, se contrajo en septiembre mucho más de lo pronosticado.
Su índice principal cayó a menos 4,3 puntos frente a los 14 puntos de agosto _ la caída en territorio negativo fue inesperada ya que los pronósticos apuntaban a una baja a 10 puntos.
El panorama descrito por dos indicadores económicos es que la eurozona casi con toda probabilidad no repetirá en el segundo trimestre la expansión económica del primero, ya que el crecimiento económico en Estados Unidos se ha moderado y muchos países europeos adoptaron medidas de austeridad para contener el déficit presupuestario y la acumulación de la deuda soberana.
Aunque la recuperación económica de la eurozona ha comenzado a perder fuerza, los analistas dudan que llegue a degenerar en una recesión.
El lunes, la Comisión Europea actualizó su pronóstico sobre el crecimiento económico de la eurozona en este año al 1,7% del 0,9% formulado en mayo. Empero, reconoció que habrá una expansión más moderada en el segundo semestre del año.
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