LONDRES.- El banco suizo UBS elevó hoy su proyección del precio del oro a un mes a mil 300 dólares la onza, desde los mil 230 dólares de su anterior pronóstico, debido a compras de refugio y mayor demanda.
También la institución subió su estimado de la cotización del metal dorado a tres meses, a mil 300 dólares, frente a los mil 200 de su cálculo previo.
El precio del metal dorado escaló hoy por tercer día consecutivo en el mercado de Nueva York, al negociarse a mil 258,1 dólares la onza, contra los mil 253,10 del martes último.
En lo que va de 2010 creció 15 por ciento y podría alcanzar un récord por tercera vez desde el establecido en junio, cuando llegó a mil 266,50 dólares la onza, con lo cual marcó una década de continuos avances, según analistas.
Estos coinciden en que el nerviosismo sobre la economía global lleva a los inversores a buscar activos considerados como refugio seguro, como el caso del precioso metal.
Edel Tully, experta de UBS, consideró que el resurgimiento de temores por la deuda soberana europea estimula el alza de activos de refugio.
A su juicio, si los diferenciales de bono de la zona euro continúan su ampliación, el comercio del oro aumentará por temor.
La cotización del lingote disfruta de una creciente tendencia alcista desde hace varios años, la cual se acentuó en el actual.
Ella está favorecida por la incertidumbre reinante sobre la recuperación económica mundial y de Estados Unidos, en particular de la debilidad del dólar y las amenazas inflacionarias.
A juicio de Ole Hansen, especialista de Saxo Bank, una serie de elementos, incluyendo compras efectuadas por bancos centrales y temores sobre los mercados de divisas, soportan el metal amarillo.
El hecho de que asistamos a una mayor laxitud de la moneda estadounidense ayuda a impulsar el precio del lingote, que podría escalar mucho más, agregaría Hansen.
La onza terminó 2009 a mil 096 dólares en la división de metales COMEX de la Bolsa Mercantil de Nueva York, lo que supuso 23 por ciento de incremento respecto a los 891,9 de 2008.
El oro es un metal de transición blando, brillante, pesado, maleable y dúctil, que no reacciona con la mayoría de los productos químicos.
Normalmente se encuentra en estado puro en forma de pepitas, y ha sido utilizado tradicionalmente, entre otros unos, para acuñar y respaldar monedas.
También la institución subió su estimado de la cotización del metal dorado a tres meses, a mil 300 dólares, frente a los mil 200 de su cálculo previo.
El precio del metal dorado escaló hoy por tercer día consecutivo en el mercado de Nueva York, al negociarse a mil 258,1 dólares la onza, contra los mil 253,10 del martes último.
En lo que va de 2010 creció 15 por ciento y podría alcanzar un récord por tercera vez desde el establecido en junio, cuando llegó a mil 266,50 dólares la onza, con lo cual marcó una década de continuos avances, según analistas.
Estos coinciden en que el nerviosismo sobre la economía global lleva a los inversores a buscar activos considerados como refugio seguro, como el caso del precioso metal.
Edel Tully, experta de UBS, consideró que el resurgimiento de temores por la deuda soberana europea estimula el alza de activos de refugio.
A su juicio, si los diferenciales de bono de la zona euro continúan su ampliación, el comercio del oro aumentará por temor.
La cotización del lingote disfruta de una creciente tendencia alcista desde hace varios años, la cual se acentuó en el actual.
Ella está favorecida por la incertidumbre reinante sobre la recuperación económica mundial y de Estados Unidos, en particular de la debilidad del dólar y las amenazas inflacionarias.
A juicio de Ole Hansen, especialista de Saxo Bank, una serie de elementos, incluyendo compras efectuadas por bancos centrales y temores sobre los mercados de divisas, soportan el metal amarillo.
El hecho de que asistamos a una mayor laxitud de la moneda estadounidense ayuda a impulsar el precio del lingote, que podría escalar mucho más, agregaría Hansen.
La onza terminó 2009 a mil 096 dólares en la división de metales COMEX de la Bolsa Mercantil de Nueva York, lo que supuso 23 por ciento de incremento respecto a los 891,9 de 2008.
El oro es un metal de transición blando, brillante, pesado, maleable y dúctil, que no reacciona con la mayoría de los productos químicos.
Normalmente se encuentra en estado puro en forma de pepitas, y ha sido utilizado tradicionalmente, entre otros unos, para acuñar y respaldar monedas.
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