TOKIO.- El Banco Central de Japón recortó este jueves su estimación de crecimiento en el archipiélago para los años presupuestarios 2010-2011 y 2011/2012, y advirtió de que la deflación continuaría un año más, una situación que lo obliga a mantener una tasa cero para impulsar la economía.
Según las nuevas proyecciones del Banco de Japón (BoJ), la ahora tercera economía mundial crecería un 2,1%, en vez del 2,6% previsto hasta ahora, en el año presupuestario 2010-2011, y 1,8%, en lugar de 1,9%, para 2011-2012.
"Durante la segunda parte del año presupuestario 2010 (abril de 2010 a marzo de 2011), el ritmo de la reactivación va a debilitarse sin dudas a raíz de la desaceleración de las economías en el exterior, el final de la medidas de apoyo a la compra de bienes de consumo y el alza del yen", explicó el BoJ en su diagnóstico semestral.
El BoJ estimó que la actividad en Japón podría "volver a un ritmo de crecimiento moderado" durante el período de abril 2011 a marzo de 2012, ya que "las exportaciones tendrían que progresar gracias a la reactivación de las economías extranjeras".
Duramente golpeada por la recesión de 2008-2009, la economía japonesa se recuperó luego, pero sigue dependiendo mucho de las ventas en el extranjero, entre otros hacia los países dinámicos emergentes.
Su consumo interno se reanudó algo gracias a las subvenciones e incitaciones fiscales del Gobierno para la compra de vehículos y de electrodomésticos respetuosos del mediomabiente, pero estos costosos programas llegan a su fin.
En cuanto a la deflación, la institución monetaria estimó que el ritmo de la baja de los de precios al consumidor debería "reducirse ya que la oferta y la demanda están reequilibrándose".
Sin embargo, "esto llevará tiempo" y Japón no volverá a tener inflación positiva hasta el año presupuestario 2011-2012, precisó el BoJ.
El BoJ mantiene su proyección de una caída de los precios de 0,4% en 2010-2011 y de una inflación ligeramente positiva, de 0,1%, en 2011-2012. Para 2012-2013, el índice de precios al consumo debería subir un 0,6%.
La caída de los precios que pesa desde hace 18 meses sobre la economía japonesa supone un freno importante para su reanudación, dado que disuade a las empresas e incita a los consumidores a aplazar sus compras. El yen fuerte que reduce los beneficios de los exportadores supone otro hándicap.
El BoJ subrayó que mantendrá su política de tasa cero "hasta que considere que la estabilidad de los precios está a la vista".
Conservó de hecho sin sorpresa este jueves los tipos comprendidos entre el 0,0% y el 0,1%.
En otro orden de cosas, China no utilizará su casi monopolio sobre el comercio de tierras raras como "herramienta de presión", informó este jueves un portavoz del ministerio chino de la Industria, en un contexto de querella con Japón a este respecto.
En otro orden de cosas, China no utilizará su casi monopolio sobre el comercio de tierras raras como "herramienta de presión", informó este jueves un portavoz del ministerio chino de la Industria, en un contexto de querella con Japón a este respecto.
"China no se servirá de las tierras raras como una herramienta de presión", declaró en una conferencia de prensa Zhu Hongren, portavoz del ministerio chino de Industria y de tecnologías de la Información.
Este anuncio se produce en momentos en que un encuentro previsto para el viernes en Hánoi entre los ministros de Economía de Japón, de China y de Corea del Sur fue anulado.
La agencia de prensa japonesa Kyodo informó, citando fuentes gubernamentales niponas no identificadas, que la anulación había sido reclamada por China debido a la querella por supuestas restricciones de sus exportaciones de tierra raras, unos metales indispensables para la electrónica y los automóviles.
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