martes, 19 de octubre de 2010

Irak también busca convertirse en un peso pesado del sector gasífero

BAGDAD.- Irak organiza el miércoles una licitación para atribuir tres yacimientos gasíferos con la esperanza de atraer inversiones internacionales y convertirse en un actor importante en la producción de gas, una apuesta que parece más difícil que su ofensiva con el petróleo. 

"La licitación tiene como objetivo a aumentar la producción de gas para las necesidades domésticas, alimentar las centrales eléctricas y las empresas y hacer de Irak un actor regional e internacional en la producción y la exportación de gas", afirmó el portavoz del ministerio iraquí de Petróleo Assem Jihad.
El grupo francés Total, el japonés Mitsubishi y compañías de Rusia, Corea del Sur, Turquía e India figuran entre los 13 postulantes a esta licitación postergada ya dos veces.
Irak espera tener un éxito similar al que logró con su petróleo.
El año pasado, firmó acuerdos con grandes petroleras internacionales para desarrollar diez yacimientos petrolíferos y llevar su capacidad de producción a 12 millones de barriles diarios (mbd) en 2017, contra 2,5 mbd actualmente.
La capacidad de los tres yacimientos de gas es de unos 317.000 millones de m3.
El yacimiento de Akkaz, descubierto en 1992 en la provincia de Al-Anbar (oeste), tiene unos 50 kilómetros de largo y 18 km de ancho. Su capacidad está estimada en 158.000 millones de m3 y ya se perforaron seis pozos.
El yacimiento de Mansuriya, en la provincia de Diyala, se encuentra 100 km al noreste de Bagdad. Descubierto en 1979, tiene cuatro pozos y su capacidad es de 127.400 millones de m3.
Akkaz y Mansuriya ya habían sido sometidos a una licitación en el marco del proceso de desarrollo de los yacimientos petroleros, pero las concesiones no fueron otorgadas.
El tercer yacimiento es el de Siba, en el sur, cerca de la frontera con Irán y Kuwait. Descubierto en 1968, nunca fue desarrollado. Su capacidad es de 31.100 millones de m3.
Como en el caso del petróleo, se trata de contratos de servicios y no de reparto de ganancias, es decir que Bagdad pagará a las compañías un precio fijo.
Pero., para los analistas, repetir el éxito del petróleo no será sencillo.
"Las licitaciones del sector petrolero eran más fáciles porque existen oleoductos. En el caso del gas, es necesario construir a partir de cero, lo que requiere importantes inversiones", subrayó en ese sentido la experta Ruba Husari, fundadora de iraqoilforum.com.
Según Husari, los costos conciernen la construcción de gasoductos hacia las centrales eléctricas, fábricas o terminales de exportación.

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