LA PAZ.- El presidente boliviano, Evo Morales, promulgó este fin de semana una polémica ley de pensiones -que baja la edad de jubilación de 65 a 58 años como principal novedad- en una ceremonia en la sede de una central de trabajadores donde lanzó ataques al capitalismo.
La actual norma baja también la edad de jubilación de las mujeres a los 55 años, a condición de que sea madre de tres hijos, y crea una Gestora de la Seguridad Social de Largo Plazo en reemplazo de las administradoras de pensiones española Previsión (Banco Bilbao Vizcaya Argentaria-BBVA) y Futuro (Zurich-Suiza).
Morales manifestó que en el pasado, los gobiernos demandaban ayuda de organismos internacionales "para imponer normas contra el pueblo boliviano (en el caso de reformas económicas, pero) ahora no necesitamos a expertos del Banco Mundial o del Fondo Monetario Internacional" para ello. "Ya no necesitamos expertos ni imposiciones en políticas laborales, sociales o económicas, los bolivianos desarrollamos, planteamos nuestras normas para el bien de todos", dijó en alusión a la antigua ley de pensiones, elaborada con ayuda internacional bajo el gobierno liberal de Gonzalo Sánchez de Lozada.
Mientras Morales pronunciaba su discurso en la sede de la unitaria Central Obrera (COB) en los alrededores de la sede sindical, en el centro de la ciudad, los maestros, cuyos dirigentes trotskistas son duros adversarios del gobierno, se manifestaban en contra de la ley de pensiones y otra educativa en ciernes.
El mandatario destacó que "junto a comandantes y presidentes como Fidel y Raúl (Castro, de Cuba) como Hugo Chávez (de Venezuela) y junto a los gobiernos del Alba- lideramos profundas transformaciones para nuestros países".
El gobernante izquierdista, que asumió su primer mandato en 2006 y el segundo este año hasta 2015, destacó que "ahora no es como antes, que sólo Cuba luchaba contra el imperialismo, contra el capitalismo".
En esa dimensión -dijo- "me atreví a plantearles en esa reunión de movimientos sociales en Cancún cómo plantearnos un nuevo socialismo basado en el vivir bien, un nuevo socialismo en la colectividad".
"Por supuesto, seguirá vigente la lucha de clases, pero por encima de la lucha de clases, se debe pensar cómo vivir en armonía con la madre Tierra, un nuevo socialismo, no para competir, sino para compartir".
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