CARACAS.- Los ingresos petroleros venezolanos aumentaron hasta 96.110 millones de dólares en 2010, cuando las inversiones sumaron 11.878 millones, informó el ministro de Petróleo, Rafael Ramírez, quien celebró la solidez del negocio y el gran interés internacional que despierta.
Suministrando cifras aún preliminares y evitando dar datos sobre las ganancias, el responsable celebró la recuperación de los precios del petróleo en 2010, lo que permitió un aumento de los ingresos de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) en más de 20.000 millones de dólares con respecto a 2009.
"El petróleo es un extraordinario negocio y nosotros estamos administrando nuestros recursos en el tiempo. Tenemos una cantidad de socios importantes, estamos satisfechos", celebró el ministro en una reunión con periodistas.
Ramírez consideró que el precio del barril "se está acercando a su valor justo", que para Venezuela son 100 dólares, y opinó que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no debe intervenir al respecto, salvo si la inestabilidad en Egipto produce un corte de suministro. "Venezuela no ha jugado nunca ni jugará al caos en el mercado petrolero", aseguró Ramírez. "Uno habla de 100 dólares en un contexto de estabilidad. Pero si se cierra el canal de Suez, eso puede llevar el precio del barril a 200 dólares", admitió.
Con respecto a las exportaciones, en 2010, PDVSA vendió al exterior una media de 2,45 millones de barriles al día (mbd), cifra ligeramente inferior a la de 2009. Venezuela, que produce unos 3 mbd, respeta un recorte de la OPEP de 364.000 barriles al día desde hace dos años.
Según Ramírez, las exportaciones a Estados Unidos, que rozan el millón de barriles al día, se mantienen pese a las diferencias políticas y además, Venezuela envía a China un promedio de 460.000 barriles al día.
"Venezuela no vende petróleo a cinco dólares a nadie. Todos los convenios son a precio de mercado. Nadie tiene descuento", aseguró, defendiéndose de quienes acusan al gobierno de Hugo Chávez de "regalar" el crudo.
Además, Ramírez subrayó que en 2010 PDVSA invirtió 11.878 millones de dolares y recordó que, por ejemplo, en 2002 las inversiones fueron de 3.251 millones.
Con respecto a la deuda, la estatal cerró 2010 con una deuda de 24.950 millones de dólares mientras que su patrimonio es de 74.720 millones. En 2009, la deuda fue de 21.419 millones de dólares. "Tenemos la capacidad de endeudarnos para trabajar en nuestro plan de inversión. Nunca dijimos que íbamos a trabajar con nuestro propio pulmón. Nadie lo hace", consideró.
El ministro se congratuló por el aumento de las reservas certificadas de crudo hasta 297.000 millones de barriles, lo que convertirá al país en el mayor depósito de petróleo del mundo. "Se han consolidado nuestras bases de recursos", dijo, manifestando que el objetivo es llegar a 313.000 millones de barriles, de los cuales 250.000 reposan en la Faja del Orinoco (sureste de Venezuela).
Además, el ministro celebró los avances en el sector gasífero en los campos del oriente y occidente del país. Las reservas de gas probadas se sitúan ya en 195 billones de pies cúbicos (TCF, según sus siglas en inglés) gracias fundamentalmente a las perforaciones en los campos Perla, situados costa afuera, en los que el gobierno venezolano, conjuntamente con la empresa española Repsol y la italiana ENI, logró certificar 15 TCF.
Por otra parte, Ramírez explicó que algunas empresas extranjeras no estaban cumpliendo sus compromisos de producción e inversión en sus asociaciones con PDVSA y hubo que darles un toque de atención.
"Si no cumplen sus contratos, yo estaría en condiciones de revertirlos", advirtió, explicando que "todas las grandes firmas extranjeras han respondido positivamente" a este llamamiento del gobierno.
Desde 2007, cuando el gobierno del país sudamericano recuperó el control de sus recursos petroleros, la estatal PDVSA recurre a numerosos socios foráneos, que trabajan en minoría accionaria, para certificar reservas y explotar crudo.
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