viernes, 11 de febrero de 2011

Bruselas pide prorrogar un año el acuerdo de pesca con Marruecos

BRUSELAS.- La Comisión Europea ha presentado su propuesta para prorrogar un año el actual acuerdo de pesca entre la Unión Europea y Marruecos, que expira el próximo 27 de febrero, y para el que España pidió una extensión de al menos dos años, para tener tiempo suficiente para que las partes negocien un nuevo convenio. Además prevé medidas "transitorias" para continuar faenando en el caladero marroquí mientras se cumplen las etapas necesarias para pactar con Rabat la prórroga.

   Las negociaciones para un nuevo régimen que sustituya al actual están bloqueadas por las dudas de los servicios jurídicos del Parlamento Europeo y de la comisaria de Pesca, Maria Damanaki, sobre los beneficios que recibe ahora la población del Sáhara occidental, que, a su vez, reclama que sus recursos sean excluidos del acuerdo.
   Bruselas prevé "todas las garantías jurídicas para que la flota comunitaria no tenga que dejar de faenar" mientras se aplica la prórroga, toda vez que sea aprobada, ha declarado el portavoz comunitario responsable de Pesca, Oliver Drewes. El portavoz no ha dado detalles sobre el contenido de las medidas transitorias previstas en el documento de la Comisión, pero ha matizado que para que la propuesta entre en vigor necesita primero el visto bueno del Consejo de la UE y de la Eurocámara, por un lado, y de Rabat, por el otro.
   En concreto, el Ejecutivo comunitario pide a los 27 y a la Eurocámara poder negociar con las autoridades marroquíes una renovación "transitoria y por tiempo limitado" del régimen actual, al tiempo que recuerda que el protocolo actual establece, entre otras disposiciones, revisar las posibilidades de pesca de acuerdo a los informes científicos y recibir información "regular" sobre su impacto "regional", esto es también a la población saharaui.
   La comisaria Damanaki ha necesitado más de un año para que Rabat responda con información "concreta y extensa" a las garantías exigidas por la UE sobre el respeto de los Derechos Humanos y la pesca sostenible, según fuentes comunitarias. Su departamento examina ahora los informes recibidos a finales de diciembre de 2010 y las conclusiones determinarán las negociaciones para un nuevo pacto.
   El portavoz de la comisaria ha querido dejar claro este viernes en declaraciones a los medios que la oferta de Bruselas es una renovación "de sólo un año" y que "queremos y debemos emplear ese tiempo para reflexionar" sobre los datos remitidos por Rabat que, ha precisado, "servirán para establecer las etapas siguientes".
   En cualquier caso ha reiterado que Bruselas "asume que (los pescadores de la UE) podrán continuar con las mismas condiciones que existen ahora" mientras se ultima esta prórroga, entre el 27 de febrero --fecha en la que caduca el protocolo actual-- y la entrada en vigor de la extensión. Un periodo que podría durar "algunos días, pero también más tiempo", ha explicado Drewes.
   En un debate el miércoles a 27, España apostó por "una extensión de dos años que permita evaluar los efectos reales y evitar que la situación se repita en el futuro", según fuentes diplomáticas. Francia, Portugal y varios países bálticos apoyaron los argumentos españoles.
   No obstante, las fuentes indicaron que otros países como Dinamarca y Suecia recordaron sus dudas respecto al respeto de los Derechos Humanos en el Sáhara occidental y requisitos medioambientales.
   El acuerdo actual concede 119 licencias a la flota comunitaria --de las que un centenar son para España-- a cambio de una compensación de 36,1 millones de euros anuales, pero el Sáhara occidental reclama que sus recursos sean excluidos.
   En un reunión la semana pasada con Damanaki, la ministra española Rosa Aguilar quiso "dejar claro" que es "muy importante" para España y para el conjunto de la Unión Europea que se apruebe una prórroga temporal del acuerdo en los términos actuales, que evite a la flota comunitaria tener que retirarse de los caladeros marroquíes si no hay un nuevo pacto antes del 27 de febrero, cuando caduca el actual.
   Fuentes comunitarias afirman que "no hay tiempo" para cumplir todos los trámites jurídicos y burocráticos necesarios para que la prórroga temporal entre en vigor en ese plazo y advierten de que una vez que la propuesta necesita ser confirmada por Rabat, y por los 27 y la Eurocámara.
   Un grupo de trabajo del Consejo estudiará la semana próxima la propuesta de Bruselas y también lo harán en fechas similares los embajadores de los 27, con el objetivo de perfilar el texto y que sea adoptado por un Consejo de ministros antes de que finalice el mes. La prórroga podría entrar en vigor de manera "provisional" cumplidos estos pasos y se aplicaría de manera "definitiva" con la luz verde de la Eurocámara.

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