lunes, 4 de abril de 2011

La OIEA ve necesario dar pasos contra el temor nuclear

VIENA.- El jefe del organismo de supervisión nuclear de Naciones Unidas dijo el lunes en un foro de seguridad que son vitales unos estándares estrictos y una transparencia total para restaurar la confianza de la opinión pública en la energía nuclear ante la crisis de la planta japonesa de Fukushima. 

Durante más de tres semanas, Japón ha estado tratando de estabilizar una planta de energía nuclear que se vio gravemente afectada por un fuerte terremoto y el devastador tsunami que le siguió minutos después. El desastre ha generado nuevas evaluaciones sobre el uso de esta tecnología en todo el mundo.
"La crisis en Fukushima Daiichi tiene enormes implicaciones para la energía nuclear y nos enfrenta a un gran desafío", dijo Yukiya Amano, director general del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), ante una reunión en Viena con delegados de 72 naciones.
En declaraciones en una convención para revisar las normas de seguridad nuclear, programada antes de la crisis, Amano dijo a los delegados que no podían asumir un enfoque "como si todo fuera normal".
"La preocupación de millones de personas en todo el mundo sobre si la energía nuclear es segura debe ser tomada con seriedad", declaró.
"El apego riguroso a los más sólidos estándares internacionales y a la total transparencia, en tiempos buenos y malos, es vital para restaurar y mantener la confianza pública en la energía nuclear", agregó Amano en su discurso.
La emergencia de Japón en su destruida planta de Fukushima ha puesto toda la atención pública sobre si el organismo de la ONU está preparado para afrontar un accidente con implicaciones para otros países.
Una herramienta para fortalecer los estándares es la Convención sobre Seguridad Nuclear que las delegaciones estaban discutiendo el lunes, pero el pacto es voluntario.
El OIEA no tiene autoridad para aplicar ninguna de las recomendaciones de seguridad que emite, aunque sus labores pueden reducir la posible proliferación de armas atómicas.
Amano dijo que para fines del año pasado, más de 60 países miembros del OIEA comunicaron al organismo con sede en Viena que estaban considerando introducir programas de energía nuclear.
"A la luz del accidente de Fukushima Daiichi, algunos países han anunciado revisiones de sus planes sobre energía nuclear", indicó, y añadió que de todas formas las razones por las cuales la tecnología es necesaria no han cambiado.
"Incluyen la creciente demanda global de energía, además de las preocupaciones sobre el cambio climático, los precios volátiles de los combustibles fósiles y la seguridad energética", manifestó.
Alemania y Suiza han dicho que cerrarán sus antiguos reactores o suspenderán más aprobaciones, China interrumpió los permisos para la instalación de nuevas plantas y Taiwán está estudiando reducir su producción de energía nuclear.

No hay comentarios:

Publicar un comentario