BUENOS AIRES.- Argentina trabaja en un proyecto para impulsar la industria nacional del libro y lograr que este sector vuelva a ser líder en producción nacional y exportaciones en Iberoamérica, reveló aquí la ministra de Industria, Débora Giorgi.
El plan, que elabora esa cartera, busca alentar inversiones y generar empleos, pero sin modificar la premisa fundamental del Gobierno en este ámbito: que el libro no pague Impuesto al Valor Agregado (IVA), aclaró.
En un acto con empresarios en la Federación Argentina de la Industria Gráfica y Afines (Faiga), Giorgi puntualizó que en la actualidad Argentina consume 76 millones de libros al año, el 78 por ciento de los cuales son de importación.
Sólo el pasado año se adquirieron en otros países libros por 115 millones de dólares, por lo cual "necesitamos una industria más fuerte y que no solo abastezca al mercado interno, sino que exporte", sostuvo.
La titular de Industria recordó que los libros de origen extranjero no pagan el IVA en origen ni al entrar al país, mientras los nacionales lo pagan sobre los insumos que utilizan, acumulando así un costo tributario que impacta en el valor final.
Con el nuevo proyecto se busca neutralizar el sobrecosto que genera a la industria nacional el pago del IVA en la compra de insumos "con una propuesta creativa que no afecte lo fiscal" y confiera un impulso genuino a la producción nacional, enfatizó.
Precisó además que de 2003 a la fecha las importaciones del sector se incrementaron más del 150 por ciento, mientras los principales destinos de las ventas externas fueron Brasil (19 por ciento), Chile (19), Uruguay (14) y México (9), entre otros.
La industria gráfica argentina la componen unas ocho mil empresas que dan empleo directo a más de 40 mil trabajadores. En 2010 generó exportaciones indirectas (a través de sectores industriales que utilizan papel) por mil 500 millones de dólares.
El plan, que elabora esa cartera, busca alentar inversiones y generar empleos, pero sin modificar la premisa fundamental del Gobierno en este ámbito: que el libro no pague Impuesto al Valor Agregado (IVA), aclaró.
En un acto con empresarios en la Federación Argentina de la Industria Gráfica y Afines (Faiga), Giorgi puntualizó que en la actualidad Argentina consume 76 millones de libros al año, el 78 por ciento de los cuales son de importación.
Sólo el pasado año se adquirieron en otros países libros por 115 millones de dólares, por lo cual "necesitamos una industria más fuerte y que no solo abastezca al mercado interno, sino que exporte", sostuvo.
La titular de Industria recordó que los libros de origen extranjero no pagan el IVA en origen ni al entrar al país, mientras los nacionales lo pagan sobre los insumos que utilizan, acumulando así un costo tributario que impacta en el valor final.
Con el nuevo proyecto se busca neutralizar el sobrecosto que genera a la industria nacional el pago del IVA en la compra de insumos "con una propuesta creativa que no afecte lo fiscal" y confiera un impulso genuino a la producción nacional, enfatizó.
Precisó además que de 2003 a la fecha las importaciones del sector se incrementaron más del 150 por ciento, mientras los principales destinos de las ventas externas fueron Brasil (19 por ciento), Chile (19), Uruguay (14) y México (9), entre otros.
La industria gráfica argentina la componen unas ocho mil empresas que dan empleo directo a más de 40 mil trabajadores. En 2010 generó exportaciones indirectas (a través de sectores industriales que utilizan papel) por mil 500 millones de dólares.
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