LA ROCHELLE.- Los Verdes de Francia han condicionado su apoyo al Partido Socialista al cierre de las centrales nucleares del país, poco después de que una encuesta mostrara el descontento popular con la existencia de las mismas.
De esta manera, se pide el cierre inmediato de todas aquellas que tengan más de 30 años y el cierre progresivo de todas las demás durante los próximos 20 años. El país cuenta con 58 centrales, controladas por la empresa estatal EDF, y producen cerca del 80 por ciento de la electricidad que se consume en Francia.
El apoyo de Los Verdes, que consiguieron el tres por ciento de los votos en las elecciones de 2007, parece fundamental para los socialistas en su intento de vencer al actual presidente, Nicolas Sarkozy, en las elecciones presidenciales de abril de 2012. "Es en oposición a Sarkozy, junto con el resto de fuerzas políticas que quieren participar en el Gobierno, por lo que hacemos este pacto", ha señalado la secretaria general de Los Verdes, Cecile Duflot.
El desastre en la central nuclear japonesa de Fukushima-1 ha provocado que este asunto entre en la agenda política europea. Alemania ha anunciado esta semana que va a cerrar todas sus centrales antes de 2022.
Otras de las condiciones impuestas por Los Verdes son la anulación del aumento de la edad de jubilación de los 60 a los 62 años, la prohibición de la extracción gas de esquisto, el abandono de nuevos planes para la construcción de grandes autopistas y la implementación de un sistema de voto representativo proporcional en Francia.
El primer ministro, François Fillon, ha descartado el cierre de la industria nuclear francesa, pero ha ordenado un estudio sobre los costes del sector, incluyendo investigación y desarrollo, medidas de seguridad y almacenamiento de residuos.
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