BERLÍN.- La canciller alemana Angela Merkel dijo el domingo que el fondo de rescate europeo necesita ampliarse hasta ser una estructura permanente que permita a los países declararse insolventes y reestructurarse de la misma manera como lo hacen los bancos.
Merkel insitió en una entrevista con la emisora de televisión ARD que las actuales medidas de rescate deben ampliarse hasta convertirse en una estructura permanente para evitar que la crisis de Grecia arrastre a otras naciones.
La canciller también pidió que se establezcan más medidas que actúen como "barrera" alrededor de Grecia.
El parlamento alemán votará el jueves sobre si respaldará el mecanismo permanente de apoyo al euro, el cual entrará en vigor en el 2013.
Merkel expresó hoy su confianza en que contará con el respaldo de la mayoría de su partido para la aprobación de la reforma del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), el próximo jueves, en la votación de la cámara baja (Bundestag).
"Evidentemente, el gobierno siempre aspira a obtener una mayoría propia, a partir de los grupos parlamentarios que lo sustentan. Soy optimista y creo que esta vez se conseguirá", afirmó Merkel, en declaraciones a la primera cadena de la televisión pública, ARD.
La aprobación del proyecto se da por segura, puesto que desde la oposición socialdemócrata y verde se respaldará la reforma del FEEF, emanada de las resoluciones adoptadas en la cumbre de la eurozona, el pasado 21 de julio.
Sin embargo, destacados diputados de las filas del gobierno de centro-derecha de la canciller han anunciado que lo rechazarán.
La posibilidad de que el proyecto acabe siendo aprobado con el respaldo de la oposición sería un revés para la credibilidad de Merkel, tanto a escala doméstica como de cara al exterior.
La coalición de gobierno -integrada por la Unión Cristianodemócrata y su hermanada Unión Socialcristiana (CDU/CSU), además del Partido Liberal (FDP)- atraviesa una compleja situación, tras las derrotas electorales en serie sufridas en los comicios regionales celebrados este año.
La coalición de Merkel tiene en el Bundestag 330 del total de 620 escaños de la presente legislatura.
A juicio de la oposición, en caso de fallar esa mayoría propia la coalición de Merkel estaría políticamente acabada.
Los líderes de la eurozona aprobaron la reforma del FEEF en su cumbre del 21 de julio, pero para su entrada en vigor debe pasar por la aprobación de los Parlamentos nacionales de los países implicados.
Las cúpulas de la patronal y la industria alemana apelaron la semana pasada a los diputados del Bundestag a aprobarla y advirtieron de que un rechazo comportaría "consecuencias incalculables para la Unión Europea y la moneda común".
La comisión presupuestaria del Parlamento alemán aprobó, asimismo la semana pasada, la reforma del proyecto de ley, paso previo a la votación que tendrá lugar en el plenario.
A la votación del jueves en el Bundestag seguirá el viernes la que corresponde a la cámara alta (Bundesrat), donde las filas de la canciller no tienen mayoría.
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