sábado, 10 de septiembre de 2011

Grecia dice que mantendrá el curso pese al derrumbe del PIB

ATENAS.- El Gobierno de la endeudada Grecia prometió el sábado mantener el curso de la austeridad, enviando un mensaje a sus cada vez más frustrados prestamistas de que hará todo lo que sea necesario para evitar una quiebra que sacudiría al euro.

El malestar por el fracaso del país en cumplir las metas fiscales impuestas en su rescate del Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea ha llegado a punto de ebullición, llevando a estrategas de la zona euro a dudar de su capacidad de evitar la suspensión de pagos o de seguir siendo miembro de la eurozona.
El ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, dijo a los prestamistas que su Gobierno sigue totalmente comprometido con su plan de rescate. Prometió reducir más las nóminas de empleados públicos, aumentar las privatizaciones y profundizar la reforma del mercado laboral.
"Si esas cosas no cambian, no sobreviviremos, no saldremos de la crisis", dijo durante una conferencia con empresarios.
Los empleados públicos, que ya han sufrido un recorte de cerca de un quinto en sus sueldos, ahora se enfrentan a la decisión del Gobierno de poner a miles de ellos en una "Reserva del Trabajo", en la que extraen un 60 por ciento de su sueldo y posiblemente se enfrentan al despido si no encuentran otro empleo en el sector público dentro de un año.
Pero las medidas de austeridad están enviando a la economía a una recesión aún más profunda. El producto interior bruto se contraerá en más de un 5 por ciento este año, dijo Venizelos, superando las previsiones previas en su tercer año seguido de contracción.
La recesión está cultivando el descontento público y se espera que miles de empleados civiles, estudiantes, taxistas y hasta aficionados al fútbol se manifiesten el sábado en Tesalónica.
Las protestas están programadas para coincidir con un importante discurso de política económica del primer ministro George Papandreou en la Feria de Comercio de Tesalónica, el mayor evento económico del país.
Aunque prometió mantener su lado del acuerdo, el Gobierno griego criticó duramente a sus socios de la UE por postergar la ratificación de un segundo rescate por 109.000 millones de euros para el país, acordado por los líderes de la zona euro el 21 de julio.
"Europa debe estar a la altura del desafío y avanzar en la implementación de las decisiones del 21 de julio, para poner fin (...) a lo que está pasando el pueblo griego", dijo el ministro de Desarrollo, Mihalis Chrysohoidis.

No hay comentarios:

Publicar un comentario