LONDRES.- El diferencial de la deuda española a 10 años se ampliaba contra el bund equivalente ante las noticia de que Grecia no podrá cumplir los objetivos de déficit acordados en el plan de rescate.
Está previsto que los inspectores de la troika den luz verde al tramo de 8.000 millones de euros de ayuda griega, pero la noticia sobre el déficit resalta la dificultad de Grecia para poner sus finanzas en orden.
La deuda española a 10 años aumentaba su spread en 12 puntos básicos a 337 pb, mientras que la italiana se ampliaba en 14 puntos básicos a 380 pb.
Precisamente hoy, el papel de Reino Unido en la Unión Europea planeó sobre la conferencia anual de los gobernantes conservadores británicos, pese a los esfuerzos de sus líderes por vetar un asunto que dividió el partido en los 90, la última vez que estuvo en el poder.
Los delegados que llegaban al centro de conferencias eran recibidos por el titular "Los votantes tory (conservadores) le dicen a Hague: abandona la UE ahora" en un periódico ofrecido por activistas de la página ConservativeHome, y seguido por un artículo con una imagen del titular de Exteriores, William Hague.
El artículo citaba un sondeo de YouGov para el diario anti UE Daily Express, indicando que más de dos tercios de los conservadores quiere que Reino Unido abandone la Unión.
El primer ministro, David Cameron, intentó atajar el debate el domingo en una entrevista anterior a la conferencia, cuando dijo que Reino Unido debe seguir siendo parte de la UE.
El asunto ha tomado un cariz de urgencia por los problemas financieros de miembros de la UE como una adeudada Grecia. Amenaza con impulsar las fricciones
Cameron ha dicho que quiere recuperar algunas competencias entregadas a la UE, pero insistió en que tendría que esperar a resolver la crisis financiera en la eurozona.
El primer ministro y su ministro de Finanzas, George Osborne, han instado a los miembros de la eurozona, de la que Reino Unido se mantiene aparte, a que saquen adelante las medidas para rescatar a países en problemas como Grecia.
Osborne, que tiene pocos recursos para tratar con una economía nacional que se desacelera, dijo que la resolución de la crisis ofrecerá más fuerza a Reino Unido que cualquier medida que él pueda tomar.
Sin embargo, el Parlamento debatirá el asunto de la membresía británica al club de 27 naciones en unas pocas semanas, y hay un grupo pequeño pero creciente de legisladores diciendo que es hora de poner fin a cuatro décadas de lazos estrechos con la Europa continental.
Una votación parlamentaria sobre el tema no sería vinculante, pero los activistas quieren elevar la presión en favor de un referéndum sobre la membresía británica en la UE, repitiendo el celebrado en 1975, apenas dos años después de que el país se uniera a lo que entonces era la Comunidad Económica Europea.
Douglas Carswell, un parlamentario conservador que ha hecho campaña contra la pertenencia a la UE, dice que la crisis actual del bloque es un momento ideal para pedir a los británicos que reconsideren la cuestión.
"Claramente va a haber un acuerdo nuevo con la Unión Europea", dijo Carswell en una reunión en un aparte de la conferencia titulada "Tenemos que hablar sobre Europa".
"Cualquier nuevo acuerdo hecho en nuestro nombre tiene que pasar por el pueblo", añadió.
A Cameron le gusta describirse como "euroescéptico" en un país donde muchos ven con hostilidad y suspicacia a la Unión Europea y sus instituciones.
Margaret Thatcher, líder de los conservadores en los 80 y que hizo de su bandera luchar por Reino Unido en la UE, sigue siendo una inspiración para muchos en la derecha del partido.
Creen que una actitud más dura con Europa aseguraría una victoria fácil de los conservadores en las elecciones de 2015, contentando a los miembros insatisfechos con los liberales demócratas de tendencias más a la izquierda.
Precisamente hoy, el papel de Reino Unido en la Unión Europea planeó sobre la conferencia anual de los gobernantes conservadores británicos, pese a los esfuerzos de sus líderes por vetar un asunto que dividió el partido en los 90, la última vez que estuvo en el poder.
Los delegados que llegaban al centro de conferencias eran recibidos por el titular "Los votantes tory (conservadores) le dicen a Hague: abandona la UE ahora" en un periódico ofrecido por activistas de la página ConservativeHome, y seguido por un artículo con una imagen del titular de Exteriores, William Hague.
El artículo citaba un sondeo de YouGov para el diario anti UE Daily Express, indicando que más de dos tercios de los conservadores quiere que Reino Unido abandone la Unión.
El primer ministro, David Cameron, intentó atajar el debate el domingo en una entrevista anterior a la conferencia, cuando dijo que Reino Unido debe seguir siendo parte de la UE.
El asunto ha tomado un cariz de urgencia por los problemas financieros de miembros de la UE como una adeudada Grecia. Amenaza con impulsar las fricciones
Cameron ha dicho que quiere recuperar algunas competencias entregadas a la UE, pero insistió en que tendría que esperar a resolver la crisis financiera en la eurozona.
El primer ministro y su ministro de Finanzas, George Osborne, han instado a los miembros de la eurozona, de la que Reino Unido se mantiene aparte, a que saquen adelante las medidas para rescatar a países en problemas como Grecia.
Osborne, que tiene pocos recursos para tratar con una economía nacional que se desacelera, dijo que la resolución de la crisis ofrecerá más fuerza a Reino Unido que cualquier medida que él pueda tomar.
Sin embargo, el Parlamento debatirá el asunto de la membresía británica al club de 27 naciones en unas pocas semanas, y hay un grupo pequeño pero creciente de legisladores diciendo que es hora de poner fin a cuatro décadas de lazos estrechos con la Europa continental.
Una votación parlamentaria sobre el tema no sería vinculante, pero los activistas quieren elevar la presión en favor de un referéndum sobre la membresía británica en la UE, repitiendo el celebrado en 1975, apenas dos años después de que el país se uniera a lo que entonces era la Comunidad Económica Europea.
Douglas Carswell, un parlamentario conservador que ha hecho campaña contra la pertenencia a la UE, dice que la crisis actual del bloque es un momento ideal para pedir a los británicos que reconsideren la cuestión.
"Claramente va a haber un acuerdo nuevo con la Unión Europea", dijo Carswell en una reunión en un aparte de la conferencia titulada "Tenemos que hablar sobre Europa".
"Cualquier nuevo acuerdo hecho en nuestro nombre tiene que pasar por el pueblo", añadió.
A Cameron le gusta describirse como "euroescéptico" en un país donde muchos ven con hostilidad y suspicacia a la Unión Europea y sus instituciones.
Margaret Thatcher, líder de los conservadores en los 80 y que hizo de su bandera luchar por Reino Unido en la UE, sigue siendo una inspiración para muchos en la derecha del partido.
Creen que una actitud más dura con Europa aseguraría una victoria fácil de los conservadores en las elecciones de 2015, contentando a los miembros insatisfechos con los liberales demócratas de tendencias más a la izquierda.
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