MADRID.- La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, ha descartado la posibilidad de que España tenga que ser rescatada y ha afirmado que la sostenibilidad de la deuda española "está fuera de toda duda", a pesar de que las tensiones han situado la prima de riesgo por encima de los 500 puntos y han obligado al Tesoro a pagar un interés marginal superior al 7% en la última subasta.
"Absolutamente no", ha respondido Salgado en declaraciones a la Cadena Ser al ser preguntada por si el Gobierno cree que España puede necesitar un rescate y tras asegurar que la sostenibilidad de la deuda está garantizada porque la partida de los Presupuestos de 2011 destinada a pagar los intereses de la deuda, que ascendía a 27.000 millones, cerrará el ejercicio 3.000 millones por debajo de esa previsión.
"Vamos a gastar, incluso con estas tensiones, 3.000 millones menos, con lo cual la deuda es perfectamente sostenible, aunque desearíamos pagar precios más bajos porque los fundamentales de nuestra economía dicen que deberíamos pagar menos", ha añadido.
Salgado ha garantizado también que España podrá pagar los vencimientos de este año y ha explicado que la vida media de la deuda española es de 6,7 años, por lo que se tardaría entre seis y siete años en llegar al punto en el que Tesoro tendría que pagar el alto interés de las últimas subastas.
Asimismo, ha manifestado que la solución a la crisis de deuda debe ser coordinada en el seno de la UE, porque se han producido ataques sistémicos al menos a la deuda soberana de 12 de los 17 miembros de la zona euro.
En este sentido, ha asegurado que hoy le ha tocado el turno a España, pero ha recordado que ayer le tocó a Italia, que otro día fue Bélgica el centro de las dianas y que mañana puede ser cualquier otro país, incluso los considerados centrales, como Francia.
"Así que la solución tiene que ser coordinada", ha señalado la vicepresidenta económica, tras resaltar la importancia de cumplir los compromisos aprobados en Europa e insistir en las reformas aprobadas.
De hecho, Salgado se ha mostrado partidaria de actuar, a la vez, en dos líneas: que el Banco Central Europeo (BCE) compre deuda de los países europeos, al menos hasta que el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) entre en funcionamiento, y que los países de la zona euro se comprometan a seguir con el proceso de consolidación fiscal y de reformas estructurales.
En este sentido, ha insistido en la importancia de convencer "a todo el mundo" de que los países que tienen reformas en marcha están decididos a continuar con el proceso aunque el BCE intervenga, ya que existe alguna desconfianza en ese sentido, como la manifestada por la canciller alemana, Angela Merkel.
Además, se ha mostrado convencida de que si el FEEF ya estuviera en marcha no habría "ningún inconveniente" en el que el Banco Central actuara de forma "decidida" durante un "tiempo corto". "El problema es que somos lentos en la implantación de decisiones", ha admitido.
Por otro lado, Salgado ha descartado también que el euro esté en peligro y ha asegurado que existe una voluntad "decidida y manifiesta" de todos los países para dar estabilidad a la moneda única, seguir trabajando juntos y hacer que la Unión Europea vuelva a ser lo que ha sido siempre: una zona con un alto nivel de bienestar social y con niveles altos de crecimiento económico.
Preguntada por diálogo mantenido con el PP, Salgado ha asegurado que existe y que si no ha sido fluido no ha sido por parte del Gobierno. Ha explicado que han informado al líder de PP, Mariano Rajoy, de los temas económicos y las decisiones tomadas en la UE, aunque también se han puesto en contacto con él para exigir prudencia a los colaboradores del PP en sus declaraciones.
En este sentido, Salgado ha puesto como ejemplo la llamada que hizo tras escuchar las manifestaciones de uno de los representantes del PP sobre las cifras que se había encontrado en una comunidad autónoma tras ganar las elecciones municipales, en clara referencia a la presidenta de Castilla-La Mancha, Maria Dolores de Cospedal.
"Absolutamente no", ha respondido Salgado en declaraciones a la Cadena Ser al ser preguntada por si el Gobierno cree que España puede necesitar un rescate y tras asegurar que la sostenibilidad de la deuda está garantizada porque la partida de los Presupuestos de 2011 destinada a pagar los intereses de la deuda, que ascendía a 27.000 millones, cerrará el ejercicio 3.000 millones por debajo de esa previsión.
"Vamos a gastar, incluso con estas tensiones, 3.000 millones menos, con lo cual la deuda es perfectamente sostenible, aunque desearíamos pagar precios más bajos porque los fundamentales de nuestra economía dicen que deberíamos pagar menos", ha añadido.
Salgado ha garantizado también que España podrá pagar los vencimientos de este año y ha explicado que la vida media de la deuda española es de 6,7 años, por lo que se tardaría entre seis y siete años en llegar al punto en el que Tesoro tendría que pagar el alto interés de las últimas subastas.
Asimismo, ha manifestado que la solución a la crisis de deuda debe ser coordinada en el seno de la UE, porque se han producido ataques sistémicos al menos a la deuda soberana de 12 de los 17 miembros de la zona euro.
En este sentido, ha asegurado que hoy le ha tocado el turno a España, pero ha recordado que ayer le tocó a Italia, que otro día fue Bélgica el centro de las dianas y que mañana puede ser cualquier otro país, incluso los considerados centrales, como Francia.
"Así que la solución tiene que ser coordinada", ha señalado la vicepresidenta económica, tras resaltar la importancia de cumplir los compromisos aprobados en Europa e insistir en las reformas aprobadas.
De hecho, Salgado se ha mostrado partidaria de actuar, a la vez, en dos líneas: que el Banco Central Europeo (BCE) compre deuda de los países europeos, al menos hasta que el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) entre en funcionamiento, y que los países de la zona euro se comprometan a seguir con el proceso de consolidación fiscal y de reformas estructurales.
En este sentido, ha insistido en la importancia de convencer "a todo el mundo" de que los países que tienen reformas en marcha están decididos a continuar con el proceso aunque el BCE intervenga, ya que existe alguna desconfianza en ese sentido, como la manifestada por la canciller alemana, Angela Merkel.
Además, se ha mostrado convencida de que si el FEEF ya estuviera en marcha no habría "ningún inconveniente" en el que el Banco Central actuara de forma "decidida" durante un "tiempo corto". "El problema es que somos lentos en la implantación de decisiones", ha admitido.
Por otro lado, Salgado ha descartado también que el euro esté en peligro y ha asegurado que existe una voluntad "decidida y manifiesta" de todos los países para dar estabilidad a la moneda única, seguir trabajando juntos y hacer que la Unión Europea vuelva a ser lo que ha sido siempre: una zona con un alto nivel de bienestar social y con niveles altos de crecimiento económico.
Preguntada por diálogo mantenido con el PP, Salgado ha asegurado que existe y que si no ha sido fluido no ha sido por parte del Gobierno. Ha explicado que han informado al líder de PP, Mariano Rajoy, de los temas económicos y las decisiones tomadas en la UE, aunque también se han puesto en contacto con él para exigir prudencia a los colaboradores del PP en sus declaraciones.
En este sentido, Salgado ha puesto como ejemplo la llamada que hizo tras escuchar las manifestaciones de uno de los representantes del PP sobre las cifras que se había encontrado en una comunidad autónoma tras ganar las elecciones municipales, en clara referencia a la presidenta de Castilla-La Mancha, Maria Dolores de Cospedal.
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