MARSELLA.- El secretario de Estado del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, ha avalado los planes del futuro presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para afrontar la crisis económica y le ha deseado éxito en su puesta en marcha, porque considera que el análisis de la situación de Rajoy y el modo con que piensa afrontarla son los correctos.
Según han informado fuentes del PP, Rajoy ha aprovechado su primera reunión con un miembro de la Administración de Barack Obama desde que ganó las elecciones para exponer a Geithner su programa económico, que pasa por la reducción del déficit público, la reforma laboral y la reestructuración del sistema financiero.
Rajoy se ha reunido con Geithner por espacio de 35 minutos nada más llegar a Marsella, a donde ha acudido para asistir al Congreso del Partido Popular Europeo y donde también se reunirá con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel. El encuentro ha tenido lugar en el hotel en el que se aloja la delegación española.
Tras escuchar las explicaciones de Rajoy, que también ha hecho un dibujo del contexto económico en el que se encuentra España, el secretario de Estado norteamericano le ha asegurado que está "totalmente de acuerdo" con sus intenciones y le ha deseado todo el éxito del mundo en la tarea que debe afrontar, porque cree que sus intenciones son "lo que hay que hacer", según las mismas fuentes.
Por su parte, Geithner -que ha abandonado el hotel sin hacer declaraciones a los periodistas-- le ha expuesto cómo ve la situación económica en su país y le ha explicado la experiencia de Estados Unidos con la reforma del sistema financiero que inició Obama en 2009.
En concreto, le ha trasladado lo que, a su juicio, han sido aciertos y errores en esta tarea, aunque no ha expresado ninguna recomendación concreta para la reforma que prevé iniciar Rajoy.
Según la delegación española, no se ha hablado de la posibilidad de apostar por un 'banco malo' ni Geithner le ha dado ningún consejo: se ha limitado a exponerle cuáles eran sus problemas y qué soluciones se aplicaron.
Según las fuentes del PP, la conversación se ha centrado en las coyunturas española y norteamericana y no se ha hablado de los problemas de la deuda soberana en la Eurozona ni de las propuestas que se llevarán al Consejo Europeo de Bruselas, ni del proyecto del presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, ni tampoco del presidente del Consejo, Herman van Rompuy.
En la reunión han estado presentes, por parte española, el jefe de Gabinete de Rajoy, Jorge Moragas, el secretario de Economía del PP, Alvaro Nadal, y el embajador español en Francia, Carlos Barracheda. Por su parte, Geithner ha estado acompañado por su subsecretaria, Lael Brainard, y por el embajador norteamericano en España, Alan Solomont.
Según han indicado las fuentes 'populares', Geithner ha comenzado la entrevista expresándole su felicitación por su victoria electoral, que le ha hecho llegar también en nombre del presidente Obama. En el encuentro no se ha hablado de las relaciones bilaterales entre España y Estados Unidos, según han explicado las mismas fuentes, ya que el motivo de la reunión era fundamentalmente económico.
Geithner se ha trasladado expresamente a Marsella para reunirse con Rajoy, en el marco de una gira que está realizando por Europa para tener información de primera mano sobre la crisis de deuda soberana que atraviesa el continente.
Así, y aunque las fuentes 'populares' han señalado que la ronda de contactos del dirigente estadounidense pretende palpar de cerca la situación antes de la trascendente cumbre europea de Bruselas, han insistido en que en la entrevista con Rajoy no se ha hablado de los problemas del euro ni de otros líderes de la Unión.
En concreto, el secretario de Estado norteamericano ha llegado a esta localidad francesa después de reunirse con el presidente francés, con el ministro alemán de Economía, Wolfgang Schaeuble, y con el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi. Antes de volver a Estados Unidos viajará también a Italia para entrevistarse con su nuevo primer ministro, Mario Monti.
Rajoy continuará mañana jueves con sus reuniones bilaterales en su estreno en la escena internacional con los encuentros previstos con Barroso, Sarkozy y Merkel. Después, hablará ante el pleno del Congreso del PPE. Según ha explicado, el mensaje que pretende trasladar en Marsella es que, con su Gobierno, España volverá a ser un país fiable y cumplirá con sus compromisos, en concreto, con los límites al déficit público.
Además, previsiblemente, en los encuentros privados también trasladará a los dirigentes europeos cuál será su programa económico, tal y como ha hecho en la reunión con Geithner. También podría expresarle el apoyo a la propuesta franco-alemana para resolver la crisis de la deuda, que ya hizo público a los periodistas durante la celebración del 33 aniversario de la Constitución.
La semana pasada, Rajoy ya se entrevistó en Madrid con el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Industria, Antonio Tajani, y con el viceprimer ministro británico, Nick Clegg. Ambos se desplazaron a la capital española expresamente para reunirse con el ganador de las últimas elecciones generales.
Según han informado fuentes del PP, Rajoy ha aprovechado su primera reunión con un miembro de la Administración de Barack Obama desde que ganó las elecciones para exponer a Geithner su programa económico, que pasa por la reducción del déficit público, la reforma laboral y la reestructuración del sistema financiero.
Rajoy se ha reunido con Geithner por espacio de 35 minutos nada más llegar a Marsella, a donde ha acudido para asistir al Congreso del Partido Popular Europeo y donde también se reunirá con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel. El encuentro ha tenido lugar en el hotel en el que se aloja la delegación española.
Tras escuchar las explicaciones de Rajoy, que también ha hecho un dibujo del contexto económico en el que se encuentra España, el secretario de Estado norteamericano le ha asegurado que está "totalmente de acuerdo" con sus intenciones y le ha deseado todo el éxito del mundo en la tarea que debe afrontar, porque cree que sus intenciones son "lo que hay que hacer", según las mismas fuentes.
Por su parte, Geithner -que ha abandonado el hotel sin hacer declaraciones a los periodistas-- le ha expuesto cómo ve la situación económica en su país y le ha explicado la experiencia de Estados Unidos con la reforma del sistema financiero que inició Obama en 2009.
En concreto, le ha trasladado lo que, a su juicio, han sido aciertos y errores en esta tarea, aunque no ha expresado ninguna recomendación concreta para la reforma que prevé iniciar Rajoy.
Según la delegación española, no se ha hablado de la posibilidad de apostar por un 'banco malo' ni Geithner le ha dado ningún consejo: se ha limitado a exponerle cuáles eran sus problemas y qué soluciones se aplicaron.
Según las fuentes del PP, la conversación se ha centrado en las coyunturas española y norteamericana y no se ha hablado de los problemas de la deuda soberana en la Eurozona ni de las propuestas que se llevarán al Consejo Europeo de Bruselas, ni del proyecto del presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, ni tampoco del presidente del Consejo, Herman van Rompuy.
En la reunión han estado presentes, por parte española, el jefe de Gabinete de Rajoy, Jorge Moragas, el secretario de Economía del PP, Alvaro Nadal, y el embajador español en Francia, Carlos Barracheda. Por su parte, Geithner ha estado acompañado por su subsecretaria, Lael Brainard, y por el embajador norteamericano en España, Alan Solomont.
Según han indicado las fuentes 'populares', Geithner ha comenzado la entrevista expresándole su felicitación por su victoria electoral, que le ha hecho llegar también en nombre del presidente Obama. En el encuentro no se ha hablado de las relaciones bilaterales entre España y Estados Unidos, según han explicado las mismas fuentes, ya que el motivo de la reunión era fundamentalmente económico.
Geithner se ha trasladado expresamente a Marsella para reunirse con Rajoy, en el marco de una gira que está realizando por Europa para tener información de primera mano sobre la crisis de deuda soberana que atraviesa el continente.
Así, y aunque las fuentes 'populares' han señalado que la ronda de contactos del dirigente estadounidense pretende palpar de cerca la situación antes de la trascendente cumbre europea de Bruselas, han insistido en que en la entrevista con Rajoy no se ha hablado de los problemas del euro ni de otros líderes de la Unión.
En concreto, el secretario de Estado norteamericano ha llegado a esta localidad francesa después de reunirse con el presidente francés, con el ministro alemán de Economía, Wolfgang Schaeuble, y con el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi. Antes de volver a Estados Unidos viajará también a Italia para entrevistarse con su nuevo primer ministro, Mario Monti.
Rajoy continuará mañana jueves con sus reuniones bilaterales en su estreno en la escena internacional con los encuentros previstos con Barroso, Sarkozy y Merkel. Después, hablará ante el pleno del Congreso del PPE. Según ha explicado, el mensaje que pretende trasladar en Marsella es que, con su Gobierno, España volverá a ser un país fiable y cumplirá con sus compromisos, en concreto, con los límites al déficit público.
Además, previsiblemente, en los encuentros privados también trasladará a los dirigentes europeos cuál será su programa económico, tal y como ha hecho en la reunión con Geithner. También podría expresarle el apoyo a la propuesta franco-alemana para resolver la crisis de la deuda, que ya hizo público a los periodistas durante la celebración del 33 aniversario de la Constitución.
La semana pasada, Rajoy ya se entrevistó en Madrid con el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Industria, Antonio Tajani, y con el viceprimer ministro británico, Nick Clegg. Ambos se desplazaron a la capital española expresamente para reunirse con el ganador de las últimas elecciones generales.
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