lunes, 8 de agosto de 2011

Wall Street se derrumba tras la rebaja a la nota de EEUU


NUEVA YORK.- Las acciones estadounidenses se desplomaron el lunes, y el índice S&P 500 anotó su mayor caída en cerca de tres años, debido a los crecientes temores a una nueva recesión después de que la deuda del país perdiera su calificación AAA. Las acciones se desplomaron en Wall Street, en una jornada dominada por la ansiedad de los inversionistas luego que Standard & Poor's rebajó la calificación de la deuda de Estados Unidos. El índice industrial Dow Jones cayó (5,5 y cerró en 10.809,85 unidades. Fue la sexta peor pérdida de puntos para el Dow en los últimos 112 años y la peor en un día desde diciembre del 2008. Cayó del nivel de 11.000 puntos por primera vez desde noviembre. Todas las acciones del índice Standard & Poor's 500 sufrieron pérdidas.

Una ola de ventas en pánico elevó el volumen de las operaciones y llevó al S&P a su peor día desde diciembre de 2008. Todas las acciones del referente cerraron en territorio negativo. El promedio industrial Dow Jones perdió un 5,55 por ciento, para cerrar extraoficialmente en 10.809,85 puntos.
El índice Standard & Poor's 500 se hundió un 6,66 por ciento, para cerrar en 1.119,46 puntos, mientras que el Nasdaq Composite perdió un 6,90 por ciento, para cerrar en 2.357,69 puntos.

La Bolsa de Nueva York cayó pues a su nivel más bajo en 10 meses, luego del anuncio de la degradación de la nota de crédito de Estados Unidos: el Dow Jones perdió 5,55% y el Nasdaq 6,90%.
Según cifras definitivas, el Dow Jones Industrial Average abandonó 634,76 puntos a 10.809,85 puntos y el Nasdaq, de dominante tecnológico, 174,72 puntos a 2.357,69 puntos.
Es la primera vez desde octubre que el índice vedette termina bajo los 11.000 puntos y su peor jornada en términos de porcentaje desde diciembre de 2008, un período negro para el sector financiero.
El índice ampliado Standard & Poor's 500 perdió por su parte 6,66% (o 79,92 puntos) a 1.119,46 puntos.
No ayudaron a los mercados los primeros comentarios de Obama en público desde que la agencia Standard & Poor's decidiera bajar la tradicional nota "AAA" a "AA+" de la deuda estadounidense.
Obama dijo que "sin importar lo que pueda decir una agencia (de notación), fuimos y seremos siempre un país triple A", al argumentar que la economía estadounidense es todavía una de las inversiones más seguras en el mundo.
Los mercados "ya estaban en plena baja, y la degradación es un shock adicional para los inversores nerviosos", observó Nigel Gault, de IHS Global Insight.
La decisión de S&P no es necesariamente "responsable" de la caída del mercado, pero puso de manifiesto los problemas de funcionamiento a la cabeza del Estado federal sobre la cuestión del presupuesto y la desaceleración de la economía estadounidense, explicó Kenneth Polcari, de ICAP Equities.
En consecuencia, "el mercado debe reevaluar los riesgos y es exactamente lo que está haciendo", concluyó el analista.
El mercado obligatorio, directamente concernido por la reducción de la nota estadounidense, paradojalmente se beneficiócon la decisión de S&P y se disparó. El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años, que evoluciona el sentido inverso a los precios, retrocedió a 2,338% contra 2,558% en la noche del viernes y el de los títulos a 30 años a 3,663% contra 3,823%, indicando que el mercado evoluciona en fuerte alza.
"La realidad es que la deuda estadounidense sigue siendo una buena inversión. Estados Unidos es la economía desarrollada más diversa, líquida y maleable y los bonos obligatorios detentan la posición envidiable de ser el mayor mercado mundial", subrayaron analistas de Briefing Research.
Más de 69 acciones cayeron por cada una que subió en la Bolsa de Valores de Nueva York. El volumen fue de 9.700 millones de acciones.
El lunes fue la primera oportunidad para que los inversionistas mundiales respondieran al anuncio de S&P's del viernes, que redujo su evaluación de la deuda del gobierno estadounidense de largo plazo en un peldaño, de AAA —el máximo— a AA+.
Los inversionistas se mostraron preocupados por la desaceleración económica de Estados Unidos, el empeoramiento de los problemas de deuda que amenazan a Europa y por la perspectiva de que se intensifiquen los temores en los mercados, como ocurrió durante la crisis financiera a finales del 2008.
"Lo que está sacudiendo al mercado es un temor relacionado con el crecimiento económico", dijo Kathleen Gaffney, co-gerente del fondo de bonos Loomis Sayles de 20.000 millones de dólares. "El mercado está bajo mucha presión, que realmente tiene poca relación con la degradación", señaló la especialista.
En cambio, agregó, los inversionistas están enfocados en "cómo van a superar Europa y Estados Unidos la pesada carga de una deuda alta" si el crecimiento económico sigue siendo lento.
El presidente Barack Obama dijo el lunes que Estados Unidos puede arreglar sus problemas con un poco más de voluntad política.
"Los mercados subirán y bajarán, pero este es Estados Unidos", manifestó Obama a los periodistas en la Casa Blanca. "No importa lo que alguna agencia pueda decir, siempre hemos sido y siempre seremos un país de triple A".
El mandatario intentó asegurar a los inversionistas y la ciudadanía que las autoridades nacionales sólo necesitan demostrar "sentido común y cooperación" para controlar la enorme acumulación de deuda del país.
Obama dijo que la mayoría de los inversionistas del mundo coinciden en que Estados Unidos sigue siendo un país seguro para colocar su dinero.
El nerviosismo atizó los recuerdos de la crisis financiera de hace tres años, llevando a los inversionistas a alejarse de las acciones y buscar refugio en los activos que consideraban como inversiones más estables, como los bonos del Tesoro y el oro.
El precio de los bonos del Tesoro subieron agudamente, y los rendimientos, que se mueven en sentido contrario al precio, cayeron. El rendimiento del bono a 10 años bajó a 2,34%, de 2,57% del viernes, igualando su nivel más bajo del año, registrado la semana pasada.
"Eso se debe mayormente a un vuelo hacia lugares seguros", dijo Thomas Simons, economista de mercado de dinero con Jefferies & Co.
El oro estableció un precio récord al subir 61,40 dólares para colocarse en 1.713,20 dólares por onza troy.
El petróleo se hundió. El crudo West Texas Intermediate cayó 5,57 dólares (6,4 a 81,31 dólares por barril en la Bolsa Mercantil de Nueva York. Ese cierre es el más bajo del año para el crudo, pero sigue arriba del menor nivel de los últimos 12 meses, de 71,63 dólares por barril.
El crudo Brent cedió 5,63 dólares (5,2 y cerró en 103,74 dólares por barril en el mercado de futuros ICE de Londres.
La moneda estadounidense se depreció ante el yen, pero recuperó terreno frente al euro y otras divisas de países industrializados. El dólar disminuyó de 78,34 a 77,70 yens, mientras el euro bajó de 1,4265 a 1,4196 dólares.
Poco después del inicio del intercambio bursátil en Wall Street, el Dow Jones se desplomó más de 250 puntos. Más tarde recuperó algunas de las pérdidas, pero luego volvió a caer y llegó a bajar hasta 375 puntos. Al mediodía, el Dow retrocedió 289 unidades (2,5 y descendió a 11.156 puntos.
"El temor de una repetición del 2008 es lo que realmente está impulsando las inversiones", dijo Gary Schlossberg, economista senior de Wells Capital Management.
En cuanto a los mercados bursátiles en Europa, el índice británico FTSE 100 cerró con perdida de 3,4%, el indicador francés CAC-40 se desplomó 4,7% y el índice alemán DAX cayó 5%.
El principal mercado de Grecia tuvo el peor desempeño en Europa al perder 6% y descender a 998,24 puntos, su nivel más bajo desde enero de 1997.
En Asia, el índice japonés Nikkei 225 finalizó con una pérdida de 2,2%.

Mercados en pánico pese a las llamadas a la calma de los líderes

MADRID.- Las bolsas acusaron este lunes el golpe de la degradación de la deuda estadounidense, pese a la movilización de gobiernos y autoridades financieras para contener el pánico, con el telón de fondo de la desaceleración económica mundial.

Pese a las declaraciones del presidente Barack Obama, la Bolsa de Nueva York cayó a su nivel más bajo en 10 meses: el Dow Jones perdió 5,55% y el Nasdaq 6,90%.
Obama defendió el crédito de Estados Unidos luego de que la agencia calificadora Standard & Poor's (S&P) degradara el viernes un nivel la calificación de su deuda, de "AAA" a "AA+".
"Sin importar lo que pueda decir una agencia, fuimos y seremos siempre un país triple A", dijo Obama, al argumentar que la economía estadounidense es todavía una de las inversiones más seguras en el mundo.
Es la primera vez desde octubre que el índice vedette termina bajo los 11.000 puntos y su peor jornada en términos de porcentaje desde diciembre de 2008, un período negro para el sector financiero.
Los mercados "ya estaban en plena baja, y la degradación es un shock adicional para los inversores nerviosos", observó Nigel Gault, de IHS Global Insight.
Fráncfort, principal plaza bursátil de la Eurozona, perdió un 5,02%, París 4,68%, Londres 3,39%.
Madrid y Milán, que se habían beneficiado de la calma que parecía reinar en el mercado de la deuda tras la decisión del Banco Central Europeo de comprar títulos españoles e italianos en el mercado secundario, terminaron en baja de 2,44% y 2,43% respectivamente, sucumbiendo al pánico general que se agudizó con las pérdidas de Wall Street en la apertura.
"Los inversores están preocupados por los crecientes riesgos de una recesión mundial, la amenaza de dificultades de los bancos y la creciente falta de confianza en los políticos de la UE para resolver la crisis de la deuda y la crisis de los bancos", dijo Neil MacKinnon, analista de VTB Capital.
En el primer día de calma tras la tormenta de la semana pasada España e Italia pudieron respirar aliviados tras la decisión del BCE. Los intereses de los bonos españoles a 10 años cayeron al 5,154% al cierre de los mercados, frente al 6,2% el viernes, y los italianos al 5,286% (6,1%).
Y la prima de riesgo, interés exigido a los bonos españoles frente a los alemanes, bajó en el caso español a 288 puntos y el del italiano a 301, tras haber superado la semana pasada por primera vez el umbral de los 400 puntos.
La compra de deuda por parte del BCE pretende "prevenir o más bien moderar el contagio que ambas economías han estado sufriendo y ha llevado a los diferenciales de deuda a máximos históricos", señaló Nuria Alvarez, analista de Renta 4.
Pero para moderar ese contagio a España e Italia también "es clave que se avance en el proceso legislativo de las medidas anunciadas por el Eurogrupo el 21 de julio" , recomendó.
Pero la pregunta ahora es hasta cuándo va a seguir jugando el BCE de bombero.
El gobierno alemán volvió a descartar este lunes un aumento de la dotación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF).
Muy pesimistas, los economistas de Commerzbank estiman que la distensión solo podría durar "dos días".
"La decisión del BCE no es un arma letal, en particular en un entorno macroeconómico mundializado y con un impacto de la degradación de la nota de Estados Unidos difícil a evaluar", dice Gilles Moëc Gilles Moëc, economista de Deutsche Bank.
El voluntarismo de los dirigentes europeos, los del G7 y del G20, que se afirmó a lo largo del fin de semana, sin duda contribuyó también a esta relajación.
Las plazas asiáticas habían cerrado antes que las europeas con pérdidas. Tokio se dejó 2,18%, afectada además por la valoración del yen frente al dólar, Hong Kong 2,17%, Sídney 2,9% y Seúl 3,8%.
Las plazas latinoamericanas también se hundieron: Sao Paulo cayó 8%, México 5,88%, Bogotá 4,11%, Santiago 6,92, Lima 7,09% y Buenos Aires 10,73%.
Los problemas de la deuda tanto en Europa como Estados Unidos se topan con señales serias de desaceleración económica en las principales economías mundiales, en un momento en que brotan nuevas preocupaciones sobre una nueva recesión tras la del 2008-2009.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en junio, "aparecieron señales fuertes de inversión de los ciclos de crecimiento en Estados Unidos, Japón y Rusia".
El clima de degradación es general en las principales economías mundiales, alerta, y ello por tercer mes consecutivo.
En este ambiente, los precios del petróleo también se hundieron, perdiendo más de cinco dólares en Nueva York y Londres.
En el New York Mercantile Exchange (Nymex), el barril de West Texas Intermediate terminó en 81,31 dólares, una caída de 5,57 dólares o 6,4% en relación al viernes, su piso desde fines de noviembre.
En el IntercontinentalExchange de Londres, el barril de Brent del mar del Norte perdió 5,63 dólares a 103,74 dólares.
"Los mercados bursátiles son diezmados y al crudo le pasa lo mismo", observó Matt Smith, de Summit Energy.
En estas circunstancias, el más favorecido era el oro, como valor refugio por excelencia, que alcanzó 1.720,80 dólares la onza, al final de la jornada en Nueva York, un nuevo hito histórico.

La prima de riesgo española se estabiliza

MADRID.- La prima de riesgo española caminaba el lunes sobre un finísimo hilo mientras los analistas cruzaban los dedos para que las iniciativas acordadas el fin de semana por las autoridades políticas y económicas del euro tengan un efecto más duradero que las adoptadas el pasado 21 de julio.

La institución monetaria europea anunció el domingo medidas para aliviar las tensiones del mercado de deuda de la eurozona a la vez que el G-7 ratificó su compromiso de apoyar el crecimiento y la estabilidad de los mercados financieros.
El diferencial del bono español a 10 años, que a primera hora del lunes bajó abruptamente frente a su equivalente alemán alentado por noticias de compra de bonos por parte del BCE, se estabilizaba a mediodía en torno a los 290 puntos básicos (pb), unos 83 pb por debajo del nivel de las últimas transacciones del viernes en plena tormenta financiera.
"Ahora los más importante para los mercados es constatar si las compras del BCE de los bonos españoles e italianos van a ser duraderas", dijo Nicolás López, director de análisis de M&G.
"Si las compras van a ser por un plazo corto, pues volveremos a las andadas, pero si van a ser ilimitadas en el tiempo, entonces van a disuadir a los que tienen posiciones cortas en bonos españoles", agregó López.
Sin embargo, algunos analistas opinan que, una vez que el BCE ha entrado en acción con la compra de deuda, ya no existe un punto de retorno hasta conseguir la estabilización del mercado.
"Es razonable que el BCE exigiera ayer domingo a los gobiernos, sobre todo al italiano, algún sacrificio antes de emitir su comunicado, pero hecho éste, ya no hay vuelta atrás", dijo Emilio Ontiveros, presidente de Analistas Financieros Internacionales.
"Una vez iniciadas las intervenciones, sería un desastre que el mercado ganase el pulso al segundo banco central más importante del mundo", agregó Ontiveros.

La nota AAA de Francia y Reino Unido, bajo escrutinio

LONDRES.- Francia y Reino Unido son las más vulnerables en Europa a una revisión de la nota crediticia tras la rebaja a Estados Unidos, ya que un anémico crecimiento y un alto endeudamiento las coloca entre los prestamistas más débiles del mundo calificados con triple A.

Ambos países tienen panorama estable, lo que haría improbable una repentina rebaja, mientras que los mercados se han mostrado impresionados por la estrategia de recorte de deuda británica que ha impulsado los rendimientos de sus bonos a mínimos récord.
Pero un repunte el lunes en el coste de asegurar deuda de Francia contra una suspensión de pagos puso de relieve la sensación de alarma desatada por el recorte de la calificación a Estados Unidos el viernes, mientras bancos y corredurías advertían de que las agencias calificadoras podrían tener ahora en su mira a los prestamistas europeos con altas calificaciones.
"Francia ha retrocedido a la línea del territorio AA+/Aa1/AA+ (un escalón por debajo de AAA), de manera que los riesgos a su nota triple A están creciendo al extenderse la tensión", dijo la firma de servicios financieros BBH en una nota a clientes.
En otra indicación de la creciente preocupación en torno a Francia, los diferenciales entre los rendimientos de los bonos de Francia y Alemania a 10 años tocaron la semana pasada máximos históricos y el lunes se mantenían amplios.
Lo que más podría disparar una decisión para colocar a Francia en observación negativa sería un fracaso del Gobierno en obtener el respaldo parlamentario para un límite constitucional sobre futuros déficits públicos, algo a que los legisladores izquierdistas en la oposición se han comprometido a rechazar.
Reino Unido, que no es miembro de la zona euro, parece menos vulnerable al tener su propia moneda que puede bajar en valor y sus propios tipos de interés, pero también podría caer bajo revisión dado sus débiles fundamentos económicos.
"Hay (...) muchos países en Europa que deberían ser recortados justo como se ha rebajado a Estados Unidos", dijo el inversor estadounidense Jim Rogers, cofundador del Fondo Quantum, mientras los líderes del mundo batallan por calmar la turbulencia del mercado desatada por los niveles de deuda de Estados Unidos y Europa.
Tras hacer historia al despojar a Estados Unidos de su calificación AAA, Standard and Poor's confirmó la máxima nota para Francia y un panorama estable el fin de semana. Moody's y Fitch se abstuvieron de hacer comentarios, pero ninguna ha dado indicios de que podrían cambiar sus panoramas sobre Estados Unidos, Francia o Reino Unido.
Suministrando más tranquilidad a los mercados, los administradores de fondos acudieron a los bonos británicos y de Francia en las primeras operaciones del lunes, después que la rebaja a Estados Unidos le forzara a mudar sus fondos del Tesoro estadounidense.
No obstante, los credit default swaps (CDS) -seguros sobre posible suspensión de pagos- a cinco años de Francia repuntaron 15,5 puntos básicos en el día, según datos de Markit, llevándolos más cerca del nivel de los estados calificados AA como Bélgica, aunque analistas advirtieron de que el mercado con frecuencia exagera la reacción.
"El mercado de CDS está muy disfuncional", dijo Mark Schofield, jefe global de estrategias de tasas de interés con Citi.
"Aunque desde la perspectiva de fundamentos fiscales Francia parece ser el más débil entre los emisores AAA en Europa, aún creo que dado los muy bajos niveles de rendimientos, la profundidad del mercado doméstico, la capacidad de continuar financiándose a bajos niveles, hace improbable que Francia sea rebajada en un futuro cercano", agregó.
En lo que respecta a Reino Unido, dijo, "es improbable que el país sea rebajado. En este momento hemos visto en vigor un endurecimiento fiscal significativo".
En la zona euro, sólo Austria, Finlandia, Francia, Alemania, Luxemburgo y Holanda tienen una calificación triple A y el coste de la deuda francesa es el más alto cuando se trata de asegurarlo.
Francia también tiene el déficit más alto de todos esos países de la zona euro, así como la deuda y el déficit primario más elevado y es el único triple A del bloque de la moneda única que registra déficit de cuenta corriente.
El ratio de su deuda-PIB, que se encamina a alcanzar un 86,9 por ciento el próximo año y es descrito por la oficina nacional de auditoría como acercándose a una zona peligrosa, podría aumentar por la contribución francesa al nuevo rescate a Grecia.
S&P dijo en junio que probablemente rebajaría la nota de Francia a largo plazo si no se hacían nuevas reformas y señaló que para preservar su calificación AAA el país galo deberá equilibrar su presupuesto en los próximos cinco años, algo que no se alcanza desde 1974.
La agencia podría revisar su panorama de calificación en otoño si el presidente Nicolas Sarkozy no gana respaldo para su norma de equilibrio presupuestario constitucional.
Para obtener el apoyo necesita de una mayoría de tres quintas partes del voto parlamentario en las dos cámaras pero el opositor Partido Socialista ha dicho que votará en contra.
Reino Unido tiene un déficit aún más alto que Francia, así como un déficit primario y un ratio deuda-PIB y también tiene un déficit de cuenta corriente, pero el débil crecimiento -y el efecto que eso pueda tener en su enorme deuda- es la mayor amenaza.

El crudo de Texas cae el 6,41% hasta los 81,31 dólares por barril

NUEVA YORK.- El petróleo de Texas cayó hoy el 6,41 % y cerró a 81,31 dólares por barril, su nivel más bajo desde noviembre pasado, arrastrado por la rebaja de la calificación de la deuda soberana de Estados Unidos por parte de la agencia Standard & Poor's.

Al final de la primera sesión de la semana en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en septiembre -los de más próximo vencimiento- restaron 5,57 dólares al precio de cierre anterior.
Esta caída se debe al nerviosismo que ha generado entre los inversores la decisión de S&P de degradar el viernes y por primera vez en la historia la nota de la deuda de EEUU desde la máxima posible de "AAA" a "AA+".

Las Bolsas europeas invierten la tendencia y suben tras el anuncio del BCE

PARÍS.- Las principales Bolsas europeas, que abrieron este lunes a la baja, se recuperaban siguiendo la tendencia marcada por Madrid y Milán, que registraron alzas superiores al 3%, después de conocerse el anuncio del Banco Central Europeo (BCE) de que comparía obligaciones de España e Italia.

A las 10h, el índice Footsie-100 de Londres progresaba un 0,78%, el Dax30 de Fráncfort ganaba un 0,29%, el CAC40 de París ganaba un 0,42%, el Ibex-35 de Madrid saltaba hasta un 3,98% y FTSE Mib de Milán se disparaba un 4,55%.
El BCE anunció el domingo por la noche que aplicaría activamente su programa de compra de deuda pública de países de la zona euro en dificultades, sin especificar de qué países se trataba, pero los inversores inmediatamente pensaron en España y en Italia.
Según el ministro francés de Economía, François Baroin, el BCE está efectivamente dispuesto a comprar deuda española e italiana si algunos inversores se retiran. En el mercado de obligaciones, los intereses a diez años para España e Italia bajaban con fuerza a las 10h, por debajo del 6%, al 5,363% y el 5,248% respectivamente.

La gestora Legg Mason considera la rebaja del rating de EEUU "precipitada, equivocada y peligrosa"

NUEVA YORK.- El presidente y director de Inversiones de la gestora Legg Mason Capital Management, Bill Miller, ha asegurado que la decisión de la agencia de calificación crediticia Standard & Poor's de rebajar el rating de EEUU desde 'AAA' a 'AA+' es una acción "precipitada, equivocada y peligrosa".

   En un comunicado, el presidente de la gestora incidió en que el recorte de la calificación de S&P era "del todo innecesario" y el momento elegido para llevarlo a cabo "no ha podido ser peor".
   "Es inaceptable que compañías privadas con ánimo de lucro tengan un status legal especial en el corazón del sistema financiero mundial y que puedan actuar como un ente cuasi regulador", criticó Miller, quien espera que el Congreso de EEUU acabe con el oligopolio de las agencias de calificación crediticia.
   Asimismo, defendió la credibilidad de la economía estadounidense y su capacidad para pagar sus deudas, y recordó que Estados Unidos emite su propia moneda, lo que significa que puede "imprimir" más billetes para hacer frente a sus compromisos.
   En este sentido, recalcó que la confianza de los inversores en los bonos estadounidenses y los bajos tipos de interés permiten a la economía estadounidense financiarse muy barato, al mismo tiempo que defendió que a día de hoy, en su opinión, el dólar no tiene competencia como divisa de referencia en los mercados.

Seis de cada diez estadounidenses prevén un empeoramiento de la economía

NUEVA YORK.- Seis de cada diez estadounidenses prevén que la economía empeore en los próximos meses, según una encuesta hecha pública este lunes por la cadena CNN y elaborada después de que la agencia de calificación Standard & Poor's rebajase la calificación de la deuda norteamericana.

   La encuesta, elaborada en base a 1.008 entrevistas realizadas entre el viernes y el domingo, señala que el 60 por ciento considera que la economía aún se encuentra débil e irá a peor. El porcentaje supone un incremento de 24 puntos frente a los datos de abril, cuando los estadounidenses parecían ser más optimistas sobre la evolución de las cifras.
   Un 31 por ciento considera que aunque la recuperación económica no ha comenzado todavía, se han sentado las bases para que así sea, mientras que otro 9 por ciento da la recuperación por iniciada.
   El pesimismo se ha extendido entre la ciudadanía hasta el punto de que tres de cada cuatro cree que al país le van las cosas bastante o muy mal. Las razones tras estos datos parecen encontrarse en parte en los sustos que en los últimos días han dado en los mercados, ya que más de la mitad de las personas entrevistadas tenía dinero invertido. De esta forma, la amplia mayoría ha lamentado que la caída de los mercados ha empeorado su economía doméstica: un 16 por ciento dice que lo ha hecho en gran medida y un 39 por ciento señala que de forma menor.
   Otro elemento de preocupación para los ciudadanos de Estados Unidos es el acuerdo que la pasada semana puso fin a la crisis de la deuda. Demócratas y republicanos negociaron 'in extremis' un pacto para elevar el límite de endeudamiento a cambio de un plan de recorte de gastos.
   El plan contenta al 48 por ciento pero otro 50 por ciento lo desaprueba. Un 48 por ciento de las personas encuestadas considera que el documento no recoge todos los recortes que harían falta en una situación como la actual y un 21 por ciento piensa lo contrario y lamenta que estas medidas van demasiado lejos.
   El acuerdo sobre deuda beneficia a los ricos, en opinión del 62 por ciento de los entrevistados, mientras que otro 27 por ciento lo ve como equitativo para todo tipo de bolsillos.

Obama afirma que EEUU será siempre un país 'AAA' y apela a la confianza de los mercados

WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha asegurado que los mercados siguen creyendo que la calificación crediticia de la deuda estadounidense es 'AAA' y continúan reafirmando que su crédito es "de los más seguros del mundo", por lo que ha recalcado que, diga lo que diga una agencia, "Estados Unidos siempre ha sido y será un país 'AAA'". 

   En una declaración institucional, Obama se refería así a la decisión de la agencia de calificación crediticia Standard & Poor's de rebajar en un escalón el rating de la deuda estadounidense desde 'AAA' hasta 'AA+' el pasado viernes.
   El presidente de EEUU incidió en que Estados Unidos no necesita que una agencia de calificación le diga que necesita llevar a cabo una reducción equilibrada de su déficit, y aseguró que los problemas a los que se enfrenta el país tienen solución y el país sabe lo que tiene que hacer para llevarla a cabo.
   Asimismo, reconoció que los problemas para aprobar un aumento del techo de deuda no fue un hecho "constructivo" y el debate prolongado y la amenaza de impago que provocó "no ha sido bueno para el país" y ha tenido un gran efecto en los mercados y ha afectado a la confianza de los consumidores y al crecimiento.
   En este sentido, subrayó que el desafío de la economía estadounidense sigue siendo hacer frente a su elevado déficit. Así, recalcó que, dado que no queda mucho margen para recortar el gasto, es necesario adoptar medidas adicionales que incluyan una reforma fiscal para que aporten los que más pueden aportar y una modificación de programas como Medicare.
   Obama añadió que esto no requiere medidas radicales sino sentido común y compromisos y defendió que se han presentado propuestas muy buenas desde ambos partidos. Sin embargo, remarcó que lo que falta es "voluntad política" en Washington para sacar adelante estas propuestas y advirtió de que no se puede poner la ideología por encima del bien común.
   En esta línea, confió en que la rebaja de su calificación por parte de S&P aporte "un nuevo sentimiento de urgencia" y anunció que presentará en unas semanas sus propuestas a la comisión bipartidista que estudia cómo recortar el déficit.
   En concreto, sus propuestas incluirán extender los beneficios a los desempleados y aumentar los salarios para fomentar el consumo y permitir así la creación de empleo, así como ayudar a aquellas compañías que quieran reparar las infraestructuras del país.
Barack Obama ha asegurado, por otra parte, que los problemas económicos que sufre Europa están afectando a Estados Unidos. "Cuando tienes problemas en Europa, en España, en Italia y en Grecia, estos problemas llegan a nuestras costas", ha señalado.
   Poco antes, este mismo lunes, Obama ha hablado por teléfono con el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, con quien ha coincidido en la necesidad de acelerar los acuerdos del Eurogrupo del pasado 21 de julio y reforzar la apuesta por el proyecto del euro.
   En su intervención ante una fundación demócrata, Obama ha señalado que heredó buena parte de los problemas de deuda pública cuando llegó a la Casa Blanca, tras ganar las elecciones de noviembre de 2008. "Tenemos un grave problema en términos de deuda y déficit, y muchos de ellos los heredé", han sido sus palabras. Además ha remachado que la crisis financiera no hizo sino agravar esta situación.
   A este respecto ha recordado que el sector privado lleva 17 meses consecutivos creando empleo, los beneficios corporativos aumentan y los mercados crediticios se han estabilizado durante su mandato. "Lo que es absolutamente cierto, incluso antes de estos últimos dos días en el mercado bursátil, es que la recuperación no está ocurriendo lo suficientemente rápida", ha admitido. 
   Los legisladores demócratas y republicanos y el propio Obama consiguieron hace una semana alcanzar un acuerdo sobre la deuda nacional, pero ello no ha servido para calmar los mercados financieros.

Bank of America se desploma más de un 15% en la Bolsa de Nueva York

NUEVA YORK.- Los títulos de Bank of America se dejaban más de 15% de su valor en la sesión de este lunes de la Bolsa de Nueva York, después de conocerse que la aseguradora American International Group (AIG) planea presentar una demanda contra la entidad relacionada con las hipotecas 'subprime', factor que empaña aún más una jornada que ya se preveía negativa tras la rebaja del rating de Estados Unidos hasta 'AA+' por parte de Standard & Poor's (S&P).

   En concreto, las acciones de Bank of America han llegado a caer un 16,4% durante la sesión, hasta los 6,83 dólares en comparación con los 8,17 dólares en los que cerró el pasado viernes.
   La entidad estadounidense lidera las pérdidas en la Bolsa de Nueva York en una sesión en la que la rebaja de un escalón de la calificación crediticia de Estados Unidos, desde 'AAA' hasta 'AA+', por parte de S&P el pasado viernes está llevando al parqué estadounidense a registrar un descenso del torno al 3% al cierre de los mercados europeos.
   En el caso de Bank of America, sus acciones se están viendo fuertemente afectadas también por la información del diario 'The New York Times' en la que señala que la aseguradora AIG planea presentar una demanda contra BofA con la que pretende recuperar más de 10.000 millones de dólares (6.993 millones de euros) en relación con las titulizaciones de hipotecas concedidas por su filial Countrywide.
   Según el diario, en la demanda, que podría suponer la mayor reclamación individual al respecto presentada hasta la fecha por un único inversor, AIG asegura que Bank of America y sus filiales Merrill Lynch y Countrywide Financial falsearon la calidad de las hipotecas titulizadas y colocadas a los inversores, según indicaron tres fuentes conocedoras de la situación.

S&P recuerda a EEUU que los países que han perdido la máxima nota tardaron al menos nueve años en recuperarla

NUEVA YORK.- La agencia de calificación crediticia Standard & Poor's considera que EEUU tiene "una probabilidad entre tres" de sufrir una nueva rebaja de 'rating' entre los próximos seis a veinticuatro meses y recuerda que sólo cinco países han logrado hasta ahora recuperar la nota 'AAA' tras haberla perdido, para lo que necesitaron entre nueve y dieciocho años.

    "Aún pensamos que los riesgos para la calificación apuntan a la baja, lo que explica nuestra perspectiva negativa", explicó el director de calificaciones soberanas de S&P, David Beers, en una conferencia organizada por la calificadora de riesgos para explicar su decisión de rebajar el 'rating' de EEUU. "No prevemos un escenario en el que se produzca un rápido retorno de EEUU a la categoría 'AAA'", añadió.
   No obstante, el ejecutivo de S&P precisó que en el caso de que demócratas y republicanos logren alcanzar un amplio consenso para establecer una estrategia de consolidación fiscal a medio plazo, EEUU podría recuperar entonces la máxima nota crediticia.
   "No obstante, dada la naturaleza del actual debate en el país, con la polarización de las opiniones, no observamos nada en el horizonte inmediato que sugiera que estamos ante este escenario", advirtió.
   Por otro lado, el director general de S&P, John Chambers, indicó que, históricamente, sólo cinco emisores soberanos entre todos aquellos que perdieron la máxima nota de solvencia lograron recuperarla, para lo que necesitaron entre "9 y 18 años".
   En concreto, los cinco países que, hasta la fecha, han logrado regresar a la máxima categoría crediticia tras haber perdido la 'triple A' son Canadá, Suecia, Finlandia, Australia y Dinamarca.
   "Cinco (países) han recuperado su 'triple A' y todos lo hicieron asumiendo, durante un periodo sostenido de tiempo, programas sustanciales de consolidación fiscal y no sólo estabilizando su deuda, sino reduciendo su peso en la misma", añadió.

Van Rompuy insta a flexibilizar con urgencia el fondo de estabilidad europeo

BRUSELAS.- El presidente permanente del Consejo de la UE, Herman Van Rompuy, ha llamado a los Estados miembros a aprobar con urgencia los acuerdos del pasado 21 de julio para flexibilizar el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) porque es será un paso "decisivo para recuperar la confianza de los mercados".

   En una declaración publicada este lunes, Van Rompuy celebra los movimientos de este fin de semana en Europa, desde las decisiones en España e Italia para reforzar la disciplina fiscal y el crecimiento, hasta la del Banco Central Europeo (BCE) para comprar deuda en los mercados secundarios. "Estas decisiones van a contribuir a la estabilidad financiera en la zona euro", ha destacado.
   Van Rompuy --que reconoce además la "estrecha cooperación" a nivel internacional para afrontar esta crisis también desde el G7 y el G20-- se muestra "animado" por la determinación de los jefes de Estado y de Gobierno de la zona euro de poner en marcha los acuerdos del pasado 21 de julio. La pronta convocatoria de parlamentos nacionales para acelerar este proceso confirma tal voluntad, en opinión de Van Rompuy.
   Los líderes del euro acordaron el segundo rescate de Grecia y flexibilizar el FEEF, dotado con 750.000 millones de euros, para permitir a este instrumento comprar deuda en los mercados y dar créditos preventivos a países en apuros. Los trabajos a nivel técnico continúan y se coordinan desde Bruselas con el objetivo de concluirlos lo antes posible, y después necesitarán el voto favorable de los parlamentos nacionales.
   "La aprobación urgente de nuestra decisión para hacer más flexible y eficiente el FEEF es decisiva para recuperar la confianza de los mercados", afirma Van Rompuy en su declaración.
   El presidente del Consejo de la UE explica que mantiene contactos constantemente con el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet; con el jefe del Eurogrupo, el primer ministro luxemburgués Jean-Claude Juncker; y con los países más afectados por la crisis de deuda en la Eurozona.
   "Continuaré en estrecho contacto con todos los Estadios miembro de la eurozona y con las instituciones de la UE para asegurar que la implementación de nuestras decisiones se realiza a tiempo y de manera adecuada", concluye.

El economista francés Sterdyniak pide a la Unión Europea que rebaje el poder de los mercados

SANTANDER.-   El economista francés Henri Sterdyniak ha opinado este lunes en Santander que la Unión Europea (UE) tiene que "forzar la solidaridad" entre los países miembros y "disminuir la importancia" que tienen "las especulaciones de los mercados" para salir de la crisis, porque la dependencia de los mercados es "sumamente peligrosa".

   Así lo ha indicado Sterdyniak en una rueda de prensa en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en la que ha comparecido junto con el editor Fernando Sánchez Pintado, con motivo de la presentación de la edición española del libro 'Manifiesto de economistas aterrados'.
   Sterdyniak ha destacado que los mercados se basan en "estrategias especuladoras y autobeneficiadoras", y mientras la zona euro "no sea capaz de tener una verdadera estrategia de crecimiento económico" y de "un nuevo impulso a la manera de producir y consumir" no se podrá "salir de la crisis".
   Así, ha asegurado que, cuando comenzó la crisis, la política económica de la UE fue pedir a los países austeridad a través de diferentes reformas que sólo hicieron que "bajase el crecimiento y  no entrase dinero por la vía fiscal", por lo que los mercados "no se tranquilizaron".
   Según Sterdyniak, ha señalado que la crisis ha mostrado que "los mercados financieros no son nada racionales" y funcionan a base de "rumores e historias", de los que ellos mismos "se autoalimentan" porque "todo el mundo cree en ellos", y es lo que ha sucedido con el caso de Italia.
   A este respecto, el economista ha explicado que Italia tiene una deuda pública del 120 por ciento, aunque ha precisado que no es de ahora sino desde hace 20 años y "nunca" ha planteado ningún problema,  y ha lamentado que en la actualidad "los mercados han inventado un cuento, que es que si ellos no confían en Italia, le suben el tipo de interés para que la deuda italiana sea insostenible".
   Además, con esto, lo que los mercados financieros quieren es asegurar que la UE "no podrá defenderle", por lo que Sterdyniak ha sentenciado que "el juego de los mercados financieros es peligroso".
   Sterdyniak ha considerado que a la UE "le hace falta ser muy fuerte para romper este ciclo especulativo" sobre las deudas públicas de los países miembros, y para ello tiene dos estrategias: "estallar o hacer que la deuda de toda la eurozona sea garantizada como 'eurodeuda'".
   En este sentido, ha considerado que el anuncio del Banco Central Europeo (BCE) de comprar deuda de España e Italia va en este sentido, pero, sin embargo, este tipo de medidas "no son tan fuertes, porque los mercados financieros siguen especulando", sobre todo con las deudas de los países del sur de Europa, porque creen que podrán conseguir "la piel de la zona euro".
   Los mercados financieros, ha descrito, son "especulativos" porque para vivir "necesitan tener crisis, periodos de euforia y especulación o periodos muy depresivos", y los políticos y dirigentes europeos deberían darse cuenta de que éstos son "sumamente peligrosos", porque lo que persiguen es "crear burbujas" con lo que consiguen que "todo se derrumbe y que no haya estabilidad económica mundial".
   Entre las soluciones que expone el libro 'Manifiesto de economistas aterrados', del que Sterdyniak es coautor, propone la creación de un Banco Europeo para la "inversión sostenible", que se basaría, según ha explicado el economista, en contener el ahorro europeo con el que después abordar "una reconversión estratégica".
   Según ha explicado Sterdyniak, el 'Manifiesto de economistas aterrados' pretende mostrar a políticos, dirigentes y ciudadanos como la UE ha sido "incapaz de implantar una estrategia coordinada" contra la crisis,  por lo que los mercados financieros comenzaron a "percatarse de los muchos defectos de la euro zona" y empezaron a "especular sobre el estallido" económico que podía acontecer.

Los datos del BCE no reflejan compras de deuda la semana pasada

FRANCFORT.- El Banco Central Europeo (BCE) no realizó compras de deuda pública de los países de la periferia del euro en los mercados secundarios de deuda durante la semana pasada, según indican los últimos datos de la actividad del programa de adquisición de activos de la entidad (SMP) públicados por la institución, que, por motivos técnicos, arrastra un decalaje de dos días y no confirma si el BCE realizó compras el jueves y el viernes, tal y como dejó entrever Jean Claude Trichet en rueda de prensa.

   Así, el BCE acumula 19 semanas consecutivas sin comprar deuda pública, lo que mantiene en 74.000 millones de euros el importe del programa, establecido en mayo de 2010 en respuesta a la erupción de la crisis de deuda en la zona euro tras el primer rescate de Grecia.
   No obstante, si bien el pasado jueves en rueda de prensa el presidente del BCE se limitó a sugerir que la institución había reactivado las compras de deuda pública, que los intermediarios centraron en bonos de Irlanda y Portugal, este domingo la entidad emitió un comunicado en el que anunciaba su intención de aplicar "activamente" este programa de compra de deuda, enfocado a la adquisición de deuda española e italiana.
   "El BCE va a implementar activamente su Programa del Mercado de Valores", explicó el organismo, que manifestó su satisfacción por los anuncios de Italia y España sobre reformas en las áreas presupuestaria y de política estructural.
   En este sentido, distintos operadores apuntan que la intervención del BCE en los mercados secundarios de deuda podría alcanzar un volumen de 2.000 millones de euros.

Directivos italianos se ofrecen para comprar deuda pública del país

ROMA.- Un grupo de 24 altos ejecutivos de las principales empresas italianas han mostrado su disposición a comprar títulos de deuda del Estado italiano para ayudar al país a eludir un desastre financiero, según refleja una carta remitida al diario fiannciero 'Milano Finanza'. 

   En la misiva, los consejeros delegados de empresas transalpinas como Pirelli, Tod's o Eni subrayan que "si Italia necesita nuestra ayuda, estamos aquí" porque "no permaneceremos sin hacer nada viendo cómo Italia se queda sin dinero".
  Los bonos italianos, que llegaron a registrar un diferencial respecto a la deuda alemana superior a los 400 puntos básicos la semana pasada, han registrado un acusado alivio este lunes después de que el Banco Central Europeo anunciara que compraría títulos italianos y españoles en los mercados.
   El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, anunció el pasado viernes que aceleraría la aplicación de algunas medidas contenidas en su plan de ajuste para conseguir el déficit cero en 2013 y aseguró que aplicaría reformas de carácter laboral, económico y financiero.
Según los empresarios, Italia es un país "fuerte y rico, con una deuda pública fuerte pero con una deuda privada y pública menor que en Inglaterra o Alemania". Los directivos han asegurado que "sus industrias y sus bancos son sólidos".
Entre los firmantes de este manifiesto se encuentran la Presidenta del Consejo Nacional de Consultores del Trabajo, Marina Calderone, el director ejecutivo de 'Tod's', Diego della Valle, el director de comunicación de 'Eni', Stefano Lucchini, el director ejecutivo de 'Kme Group, Vincenzo Manes o el director ejecutivo de Pirelli, Marco Tronchetti, así como el Secretario de la Presidencia de la República Italiana, Donato Marra.

El PIB de Francia crecerá un 0,2% en el tercer trimestre

PARÍS.- El Producto Interior Bruto (PIB) de Francia crecerá a un ritmo del 0,2% en el tercer trimestre, según la primera estimación provisional del Banco de Francia.

   De este modo, la previsión de crecimiento del PIB galo se sitúa tres décimas por debajo de la estimación de la oficina de estadística francesa, Insee.
   El Gobierno de Francia prevé que la economía del país logrará crecer un 2% este año.

Standard & Poor's mantiene la calificación de la deuda de Francia en AAA

PARÍS.- Standard & Poor's mantiene la máxima nota, AAA, para la calificación de la deuda pública de Francia, con una perspectiva "estable", según ha afirmado en una entrevista concedida al diario 'Liberación' una representante de la agencia de calificación estadounidense.  

  "Francia está catalogada con la nota AAA con una perspectiva estable. Por ello, no hay razón para preocuparse por su solvencia", ha asegurado la representante de Standard & Poor's en Francia.

Fitch precisa que aún no ha concluido su revisión de la calificación de EEUU

LONDRES.- La agencia de calificación crediticia Fitch Ratings ha precisado que aún mantiene abierto el proceso de revisión del rating de la deuda soberana de Estados Unidos, que actualmente cuenta con la máxima calificación posible, 'AAA', y ha recordado que esta revisión concluye "a finales de agosto".

   "Fitch espera concluir su revisión prevista del rating soberano de Estados Unidos a finales de agosto", ha subrayado la agencia en un breve comunicado días después de que Standard & Poor's recortara la calificación de EEUU en un escalón, hasta 'AA+'.
   Fitch señala que la revisión se centrará en los fundamentos crediticios soberanos de Estados Unidos en comparación con otros emisores que cuentan con la misma calificación que el país, así como en sus perspectivas fiscales y económicas en el medio plazo teniendo en cuenta los acuerdos del 2 de agosto.
   El mismo día en que se elevó el límite de deuda en Estados Unidos, la agencia publicó un comunicado en el que reconocía que este acuerdo era "un primer paso en la dirección correcta" y acorde con su rating triple 'A', y subrayaba que el riesgo de suspensión de pagos del país permanece "extremadamente bajo".
   Aun así, Fitch señalaba que el acuerdo es "un primer paso importante", pero no el final del proceso para poner en marcha un plan creíble para reducir el déficit presupuestario a un nivel que garantice el rating triple 'A' de EEUU a medio plazo, e incidía ya entonces en que aún no había concluido su proceso de revisión de la calificación.
   La aclaración de Fitch se produce después de que el viernes a última hora Standard & Poor's rebajara por primera vez en la historia la deuda de Estados Unidos, desde 'AAA' hasta 'AA', debido a la preocupación sobre el déficit público pese al acuerdo alcanzado esta semana por el presidente, Barack Obama, y legisladores demócratas y republicanos.
   Por su parte, Moody's ha asegurado este lunes que confía en que las autoridades de EEUU implementen nuevas medidas de ajuste del déficit que permitan al país conservar su máxima nota de solvencia, después de que la calificadora de riesgos confirmara el 'rating' estadounidense la semana pasada, aunque cambiará a 'negativa' su perspectiva sobre la deuda de EEUU.

El Ibex 35 alcanza su nivel más bajo desde abril de 2009

MADRID.- El parqué madrileño ha cerrado la sesión con una caída del 2,44%, que ha situado al Ibex 35 en el nivel de los 8.459,4 puntos, la cota más baja desde el 8 de abril de 2009, arrastrado por los recortes en Wall Street.
 
   La jornada ha terminado con sólo dos valores en positivo: Banco Popular (+0,15%) y BME (+0,03%). El mayor descenso correspondió a ArcelorMittal (-9,67%), Gamesa (-6,92%) y CaixaBank (-6,02%). Telefónica, por su parte, cayó un 2,51%, seguida de Repsol YPF (-2,1%), Bankinter (-1,9%), BBVA (-1,77%) y Banco Santander (-1,15%). Banco Sabadell escapó a los recortes y terminó plano.
   La rebaja del 'rating' a la deuda norteamericana aplicada este fin de semana por Standard and Poor's ha lastrado a Wall Street y ha empañado la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de seguir con su programa de compra deuda pública, en este caso de Italia y España.
   No obstante, la decisión del BCE sí ha tenido impacto en el mercado de deuda y ha logrado una caída de la prima de riesgo española de más de 100 puntos básicos, hasta situarse en los 290 puntos básicos.
   El Ibex acogió con fuertes subidas la decisión adoptada por el instituto emisor este domingo, hasta cotizar durante algunos momentos por encima de los 9.000 puntos. Sin embargo, tras dos horas de cotización  comenzó a desinflarse, arrastrado por la caída del resto de indicadores europeos. La apertura bajista de Wall Street terminó de lastrar al selectivo, que se anotó un pronunciado descenso y marcó la cota más baja en más de dos años.
   Además, Standard & Poor's considera que EE.UU tiene "una probabilidad entre tres" de sufrir una nueva rebaja de 'rating' entre los próximos seis a veinticuatro meses y recuerda que sólo cinco países han logrado hasta ahora recuperar la nota 'AAA' tras haberla perdido, para lo que necesitaron entre nueve y dieciocho años.
   Todos los indicadores europeos cerraron con fuertes descensos, superiores a Madrid y Milán, que se dejó también un 2,4%, y en concreto, Francfort cedió un 5,02%, seguido de París (-4,68%), Londres (-3,39%) y Lisboa (-3,13%).
   En el mercado de divisas, el euro cede posiciones frente al dólar y al cierre de la sesión el cambio entre las dos monedas quedaba fijado en 1,4200 unidades.

Geithner: los bonos de EEUU son seguros pese a la rebaja de la nota de S&P

WASHINGTON.- El secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, ha asegurado que los bonos soberanos del país son ahora tan seguros como lo eran antes de que la agencia de calificación de crédito Standard & Poor's decidiera rebajar la calificación de la deuda soberana de los Estados Unidos de AAA a AA+.

   Consultado acerca de si los bonos del Tesoro de Estados Unidos son ahora tan seguros como lo eran la semana pasada, Geithner ha dicho: "Absolutamente. Y la decisión de S&P no ha cambiado nada".
   Geithner ha señalado en una entrevista con la cadena de televisión NBC/CNBC que los líderes europeos deben asegurarse de tener un "soporte financiero inequívoco" para los países de la zona euro con problemas de deuda.
   El secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, que se había planteado la opción de dimitir después de que el Gobierno alcanzara el acuerdo para elevar el límite de deuda, ha anunciado que permanecerá en su puesto a petición del presidente, Barack Obama. 
   "El presidente ha pedido al secretario Geithner que permanezca en el Tesoro y da la bienvenida a su decisión", ha afirmado el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, a través de un comunicado.
   Geithner había señalado que podría dejar su cargo una vez se aprobara la elevación del techo de la deuda, pero fuentes de la Administración han indicado que tanto Obama como miembros de la Casa Blanca le han pedido que no renuncie en este momento.
   La situación derivada de las negociaciones para alcanzar un acuerdo sobre dicha elevación del techo de deuda, que llevaron a la mayor economía mundial al borde de la suspensión de pagos, han dado lugar a nuevas preocupaciones después de que la agencia de calificación de crédito Standard & Poor's decidiera rebajar la calificación de la deuda soberana de los Estados Unidos de AAA a AA+.
   "El secretario Geithner ha hecho saber al presidente que planea quedarse en su puesto en el Tesoro", ha señalado la secretaria asistente del Tesoro, Jenni LeCompte. "Geithner espera con entusiasmo el importante trabajo que hay por delante con los desafíos a los que se enfrenta nuestro gran país", ha agregado. Geithner es el único miembro del equipo económico de Obama que permanece en su cargo.

El BCE pidió a Italia que acelerase las reformas a cambio de una intervención en el mercado de deuda

ROMA.- El presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, y el futuro presidente de la institución, Mario Draghi, escribieron una carta el pasado viernes al primer ministro, Silvio Berlusconi en la que instaban al Gobierno italiano a "acelerar" las reformas anunciadas el pasado viernes si quería "una intervención" de la institución sobre los títulos italianos, según informa el diario 'Corriere della Sera'. 

   Aunque no ha trascendido el contenido exacto de la carta, el rotativo indica que Draghi y Trichet indicaron las medidas que debían ser aplicadas e incluso el calendario de éstas. Además, el BCE indica también que los instrumentos legislativos que se deben aplicar debían ser "más eficaces y más rápidos".
   En este sentido, Draghi y Trichet exhortaron a Berlusconi a iniciar de inmediato la liberalización del mercado empresarial en Italia, así como comenzar enseguida la privatización de las empresas públicas.
   Ambos piden también al Ejecutivo varias reformas laborales, como menos rigidez en las normas sobre los despidos de los contratos a tiempo indeterminado, intervenciones sobre el empleo público y superar el modelo actual centrado en una extrema flexibilidad de los contratos temporales y de los jóvenes.
   Además, Draghi y Trichet indican en la carta, recogida por el rotativo milanés, que en Italia es necesaria una contratación que incentive la productividad empresarial.
   Berlusconi compareció el pasado viernes para anunciar que adelantaría las medidas de su plan de ajuste y expresó su intención de introducir en la Constitución el equilibrio presupuestario, en lo que están trabajando esta semana dos comisiones del Parlamento.
   Asimismo, el jefe del Ejecutivo afirmó que el Gobierno pretendía alcanzar el déficit  cero en el año 2013 y anunció reformas económicas, como la liberalización del sector empresarial, para salir de la crisis en la que está inmerso el país.

La OCDE constata una "desaceleración" de la actividad económica en los principales países

PARÍS.- El índice compuesto de indicadores líderes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) correspondiente al mes de junio refleja "desaceleración" de la actividad económica en las principales economías del mundo. 

   La OCDE señala que el indicador, comparado con la evaluación realizada el mes anterior, apunta que han surgido "fuertes señales" de un punto de inflexión en los ciclos de crecimiento de países como Estados Unidos (103,1 puntos en junio frente a los 103,3 puntos del mes anterior), Japón (103,6 puntos frente a 103,8 puntos) y Rusia (103,2 puntos frente a 103,6 puntos).
   El indicador, diseñado para anticipar los puntos de inflexión de la tendencia de la actividad económica, también apunta a una desaceleración de la actividad económica de Canadá (100,5 puntos frente a 101 puntos), Francia (100,6 puntos frente a 101,2 puntos), Alemania (102,9 puntos frente a 103,5 puntos), Italia (100,2 puntos frente a 100,9 puntos) y  Reino Unido (101 puntos frente a 101,3 puntos).
   En esta misma línea, la OCDE también consta una ralentización de la actividad en otras de las economías más fuertes del mundo como Brasil (96,6 puntos frente a 97,7 puntos), China (99,9 puntos frente a 100,2 puntos) e India (96,1 puntos frente a 97 puntos).
   En el caso de España, el indicador compuesto se situó en junio en 101,1 enteros, frente a los 101.5 puntos básicos de mayo. De esta manera, sigue por debajo de la media de 102,2 puntos del conjunto de los países de la OCDE, que baja tres décimas respecto al mes anterior, y de los 101,5 puntos de la eurozona, que desciende seis décimas.

Bruselas insiste en que las reformas de Italia y España son "suficientes"

BRUSELAS.- La Comisión Europea (CE) no ha querido valorar si la compra de bonos españoles e italianos será suficiente para estabilizar la zona euro hasta que se pongan en marcha los cambios del fondo de rescate europeo acordado por los líderes el pasado 21 de julio, pero ha recalcado que descarta que vaya a ser necesario lanzar un plan de ayuda para las economías de España o Italia porque estos dos países están emprendiendo las medidas de ajuste necesarias.

   "No creemos que sea necesario un apoyo financiero para Italia o España como ya dijo Rehn. Creemos que las cosas están claras para estos dos Estados miembros, han anunciado medidas más profundas para la consolidación fiscal y creemos que estas medidas serán suficientes para garantizar una estabilidad financiera", ha afirmado en una rueda de prensa en Bruselas un portavoz comunitario, Olivier Bailly.
   El portavoz de la Comisión Europea no ha querido comentar la reacción de las bolsas este lunes ni la rebaja de la prima de riesgo de los bonos españoles e italianos, pero ha valorado el mensaje "muy claro de confianza" que tanto el Banco Central Europeo (BCE) como los países del G7 y del G20 han enviado este fin de semana a los mercados.
   "Los distintos mensajes difundidos este fin de semana por el G20, el G7, el BCE, los diferentes jefes de Estado y de Gobierno van en la misma dirección y envían un mensaje muy claro de confianza a los mercados y a los actores clave", ha subrayado Baily. "Esperamos que siga siendo así durante la jornada y durante los próximos días y meses", ha añadido
   El portavoz de la CE ha evitado comentar directamente la respuesta de los mercados a los movimientos al más alto nivel realizados este fin de semana y al anuncio del BCE de su decisión de comprar deuda española e italiana. "No corresponde a la Comisión comentar o prejuzgar las reacciones del mercado", ha advertido.
   No obstante, el portavoz ha recordado las declaraciones del comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, el pasado viernes, cuando defendió que la entidad europea "toma y tomará las decisiones más adecuadas para garantizar la seguridad y la estabilidad de los mercados".
   Bailly ha apuntado, además, el papel activo del Ejecutivo comunitario en la respuesta del pasado fin de semana. La Comisión estuvo "plenamente implicada" en los contactos mantenidos por el G7 y el G20, ha insistido. También mantiene los trabajos "a nivel técnico y político" para acelerar el proceso que permita implementar "lo antes posible" los acuerdos del 21 de julio, para el segundo rescate de Grecia y la flexibilización del fondo europeo de rescate que permitirá comprar deuda soberana y dar créditos preventivos a los países en apuros.

Evitar una nueva recesión es "misión imposible", según Roubini, que pide al BCE tipos al 0%

LONDRES.- Las economías de EEUU y otros países desarrollados se encaminan hacia una nueva y severa recesión, según demuestran los datos macroeconómicos anteriores al pánico de las últimas jornadas, al mismo tiempo que aumentan las posibilidades de que España e Italia pierdan su acceso a los mercados de capitales, advierte Nouriel Roubini, quien recomienda al Banco Central Europeo (BCE) que rebaje los tipos de interés al 0% y compre "grandes cantidades" de deuda pública de estos dos países de la periferia. 

   "Hasta el año pasado los políticos siempre podían sacarse un conejo de la chistera para reactivar el valor de los activos y de la recuperación económica", apunta Roububini en un artículo publicado por 'Financial Times', donde recuerda los sucesivos programas de alivio cuantitativo de la Reserva Federal, las políticas de tipos próximas al 0% o las inyecciones de centenares de miles de millones de euros en bancos e instituciones financieras. "Sin embargo, ahora nos hemos quedado sin más conejos que sacar", afirma el profeta de la 'Gran Recesión'.
   De este modo, el economista recomienda al BCE y al resto de bancos occidentales que apliquen nuevas medidas de alivio cuantitativo (QE), a pesar de que su efecto sea limitado, y además, en el caso del instituto emisor de la eurozona, que recorte los tipos de interés al 0% y adquiera "grandes cantidades de deuda de Italia y España" para evitar que estos dos países pierdan el acceso a los mercados.
   En el caso de EEUU, Roubini señala que la "desacertada" decisión de Standard & Poor's de rebajar la nota del país en estos momentos ha incrementado las posibilidades de una recaída en recesión.
   Asimismo, el economista prevé que la Fed probablemente se verá forzada a lanzar un nuevo programa de alivio cuantitativo (Q3), aunque concluye que "será demasiado poco, demasiado tarde" y será aún menos efectivo que su antecesor.
   De hecho, Roubini sugiere que los países que, como EEUU, aún no han perdido acceso a los mercados de capitales, como Reino Unido, Japón o Alemania, deberían introducir "nuevas medidas de estímulo fiscal a corto plazo".
  "Puede que no sea evitable una nueva recesión, pero sí se puede eludir una segunda depresión, lo que es razón más que suficiente para adoptar medidas rápidas y concretas", concluye Roubini.

El oro marca un nuevo récord tras la rebaja de 'rating' de EEUU

LONDRES.- El precio de la onza de oro ha respondido con un nuevo máximo histórico de 1.715 dólares al histórico anuncio de la rebaja del 'rating' de EEUU por parte de Standard & Poor's, lo que supone un alza del 3,1% respecto al precio marcado en la apertura del mercado de futuros de Londres.   

Por contra, el precio del barril de petróleo Brent perdía más de dos dólares respecto a la apertura y cotizaba en 105,79 dólares, mientras que el precio del barril de Texas, de referencia en EEUU, cotizaba en 83,21 dólares, frente a los 84,85 dólares de la apertura.

Moody's espera medidas adicionales de ajuste por parte de EEUU

LONDRES.- La agencia de calificación crediticia Moody's confía en que las autoridades de EEUU implementen nuevas medidas de ajuste del déficit que permitan al país conservar su máxima nota de solvencia 'Aaa', después de que la calificadora de riesgos confirmara el 'rating' estadounidense la semana pasada, aunque cambiará a 'negativa' su perspectiva sobre la deuda de EEUU.

   "Esperamos que la recuperación económica continuará y que se adoptarán medidas adicionales de reducción del déficit", destaca Moody's en un informe, donde advierte, sin embargo, de que el desacuerdo entre los partidos políticos sobre la manera de reducir el déficit y las dificultades experimentadas para alcanzar un acuerdo para elevar el techo de deuda subraya el riesgo de "polarización política", uno de los principales factores que evidencian la perspectiva 'negativa' del 'rating' estadounidense.
   No obstante, la calificadora de riesgos considera que la máxima calificación de EEUU se justifica por la "incomparable diversidad y tamaño" de la economía estadounidense, así como por el rol del dólar a nivel global.
   Asimismo, Moody's destaca que, a pesar de que el endeudamiento de EEUU en comparación con el de otros países con la máxima nota crediticia es "en cierto modo elevado", tampoco está demasiado alejado de las posiciones de éstos.
   No obstante, la agencia advierte de que existe la posibilidad de rebajar la nota de solvencia de EEUU en el caso de que se observe un debilitamiento de la disciplina fiscal o se produzca un significativo deterioro de las perspectivas económicas cuyo impacto fiscal no sea compensado.

La prima de riesgo española cae 100 puntos tras el anuncio del BCE

LONDRES.- La prima de riesgo española ofrecida a los inversores por los bonos a diez años respecto al 'bund' alemán registra una caída de más de 100 puntos básicos en la apertura de los mercados del Viejo Continente tras anunciar el Banco central Europeo (BCE) que comprará "activamente" deuda española e italiana en los mercados secundarios.

   De este modo, el sobreprecio de la deuda española respecto al bono alemán a diez años se desplomaba hasta 285 puntos básicos, tras haber iniciado la sesión en 385 puntos básicos, con un rendimiento del 5,433%, lo que supone el mejor nivel del diferencial desde principios de año.
   Por su parte, el 'spread' de los bonos italianos caía también con fuerza y bajaba de 300 puntos básicos, hasta los 298 puntos básicos, con un interés del 5,56%.
Entretanto, los bancos centrales y los ministros de Economía y Finanzas del G-20 se han comprometido a adoptar "todas las medidas necesarias" para respaldar la estabilidad financiera y promover un crecimiento económico más fuerte.
   "Los ministros de Economía y los gobernadores de los bancos centrales del G20 afirmamos nuestros compromiso de adoptar todas las medidas necesarias para respaldar la estabilidad financiera y promover un crecimiento económico más fuerte en un espíritu de cooperación y confianza", indica el comunicado del G20, cuya presidencia corresponde actualmente a Francia.
   Asimismo, los miembros del G20 han mostrado su intención de mantener un estrecho contacto en las próximas semanas con el fin de "estar listos para adoptar medidas que garanticen la estabilidad financiera y la liquidez en los mercados".
También el G7 --compuesto por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido-- ha afirmado estar decidido a llevar a cabo medidas coordinadas para asegurar la liquidez y apoyar al funcionamiento de los mercados financieros, la estabilidad financiera y el crecimiento económico, según ha informado el grupo a través de un comunicado.
   "Estas acciones, junto con los esfuerzos continuados en disciplina fiscal, permitirán la existencia de la estabilidad fiscal a largo plazo", señala el texto.
   "Estamos comprometidos a enfrentarnos a las tensiones derivadas de los actuales desafíos en nuestros (de los países del G7) déficits fiscales, deuda y crecimiento, y damos la bienvenida a las acciones decisivas tomadas en Estados Unidos y Europa", agrega.  
   "Estados Unidos ha adoptado reformas que provocarán una reducción sustancial del déficit a medio plazo. En Europa, la cumbre de los países de la zona euro aprobó el 21 de julio un paquete exhaustivo de medidas para afrontar la situación en Grecia y otros países que se enfrenten a tensiones financieras", prosigue el comunicado.
   "Ahora estamos centrados en la implementación rápida y completa de los acuerdos alcanzados. Damos la bienvenida al comunicado franco-alemán y al comunicado del Banco Central Europeo (BCE)", añade.
   "No hay cambio en las garantías fundamentales de las recientes tensiones financieras que afectan a España e Italia. Damos la bienvenida a las medidas políticas adicionales anunciadas por ambos países para fortalecer la disciplina fiscal y apuntalar la recuperación de la actividad económica y la creación de empleo", afirma el comunicado.
   El G7 ha reafirmado su interés común en un "sistema financiero internacional fuerte y estable" y ha mostrado su apoyo a las tasas de intercambio determinadas por los mercados. "El exceso de volatilidad y los movimientos desordenados en las tasas de cambio tienen implicaciones adversas para la estabilidad económica y financiera", ha señalado a este respecto.
   Por último, los países miembro del G7 se han comprometido a mantenerse en "contacto cercano" durante las próximas semanas y a "cooperar de manera apropiada, estando preparados para llevar a cabo acciones que aseguren la estabilidad y la liquidez en los mercados financieros".
El Banco Central Europeo (BCE) adoptó la pasada madrugada una decisión clave para aliviar las tensiones que sacuden a España e Italia en los mercados. Apremiado por el temor a un hundimiento en las Bolsas, el organismo decidió la compra de deuda pública española e italiana en un intento por aliviar los elevados intereses que exigen los inversores a los bonos de ambos países.
Hoy, cinco operadores del mercado secundario de deuda, donde cotizan los títulos una vez emitidos, han confirmado que el instituto emisor ya estaría adquiriendo títulos españoles e italianos para atajar el acoso de los especuladores y garantizar estabilidad de la eurozona.
El BCE ha comprado esta mañana cerca de 2.000 millones de euros, principalmente en deuda a cinco años. El interés de los títulos a este plazo de España e Italia han bajado esta mañana en torno a 0,8 puntos porcentuales hasta el 4,5% y el 4,6%, respectivamente. Estos bonos tocaron el pasado jueves máximos en el 5,6% y el 5,5% el pasado jueves.
El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, convocó ayer por la tarde una videoconferencia urgente con los consejeros de la autoridad monetaria de la que salió la decisión de "aplicar activamente" el programa de compra de deuda de países con problemas, según el comunicado hecho público. Aunque no detalla expresamente qué tipo de deuda se adquirirá, el comunicado arranca con un reconocimiento de las reformas en Italia y España y con la convicción de que es "esencial" aplicarlas para reducir los desequilibrios, lo que equivale a decir que estos serán los países beneficiados por la compra de bonos.
La decisión supone un salto cualitativo en las hasta ahora tímidas actuaciones de la autoridad monetaria respecto a la compra de deuda de países en apuros. El programa se activó en marzo, en principio para adquirir bonos griegos, y el pasado jueves Trichet habló de reactivarlo, aunque solo se detectaron movimientos que tenían como objetivo la deuda irlandesa y portuguesa. Pasar de auxiliar a esos países, de reducida dimensión, a intervenir en Italia y España representa un importante paso en la estrategia de la autoridad monetaria.
El efecto en el mercado de esta operación es que el BCE obliga a deshacer posiciones a los especuladores que estén apostando en contra de la deuda de España o Italia en previsión de que sus títulos continuarán bajando de precio -que se mueve al contrario que su rentabilidad y por tanto, a mayor interés, más baratos están-. El paso atrás en estas apuestas, que en el argot se conocen como estar en corto, frena la presión vendedora del resto de inversores.
Ayer, el BCE culminó casi tres horas de encuentro con la determinación de "responder decisivamente" a los embates de los mercados, según fuentes del organismo. El organismo analizó "cuidadosamente" la situación de España e Italia, y valoró "los anuncios de los Gobiernos" de ambos países en el sentido de acelerar las reformas. "El eurosistema intervendrá de forma muy significativa en los mercados y responderá de un modo cohesionado", aseguró la misma fuente.
Sobre la mesa, una medida espinosa reclamada pese a los recelos alemanes: la conveniencia de que el BCE compre bonos italianos para evitar que Italia y España sigan la estela de Grecia y dejen de poder afrontar los intereses que les piden por su deuda. Durante todo el fin de semana se daba por plausible la compra de bonos italianos por parte del BCE. Sobre todo desde que el Gobierno italiano anunciara el viernes el endurecimiento de sus medidas de austeridad, interpretado como un mensaje para facilitar esa compra de bonos. La mayoría de analistas y fuentes que exigían anonimato apostaban también por la compra de bonos españoles para relajar su interés.
En frente se esperaba la oposición del presidente del Banco Central alemán (Bundesbank), Jens Weidmann, y de otros representantes centroeuropeos. Sus economistas consideran que la compra de bonos supone una violación de los tratados de la Unión Monetaria. Según sus críticos, el BCE está saliéndose de los límites de su mandato y favoreciendo, a costa de sus socios más competitivos, a los países que han gestionado mal sus cuentas.
El único comunicado emitido ayer fue uno conjunto de la canciller federal, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en el que se dicen "confiados en que el análisis del BCE ponga las bases adecuadas para intervenir en los mercados secundarios". Una referencia que parece aludir más a la capacidad que tendrá el fondo de rescate europeo para intervenir comprando bonos de países con problemas que a las actuaciones del banco central. En ese sentido, piden la "aplicación completa" de los acuerdos adoptados en Bruselas el 21 de julio para potenciar el fondo de rescate.
Pero también en el Gobierno alemán hay reticencias contra el programa de compra de bonos. Como Weidmann, muchos consideran que estas ayudas entorpecerán las reformas estructurales que consideran necesarias para que sus socios salgan del agujero. Es decir, que la compra de bonos aliviará los síntomas de la crisis sin arreglar sus causas.
De otro lado, los alemanes temen que la medida dispare la inflación en los países que mejor superaron la crisis económica. Los políticos desconfían de que la subida de precios pueda provocar un descontento que se refleje en las urnas. Además, muchos analistas destacan la aversión "histórica" de Alemania contra la subida de precios. Recuerdan como la hiperinflación de los años 20 desembocó en una profunda crisis social que dio alas al nazismo. Es el trauma alemán por antonomasia.
La compra de bonos es un sapo duro de tragar para el Gobierno de centro-derecha de Merkel que, tras rescatar a la banca durante la crisis financiera, aceptó a regañadientes otra ristra de medidas muy impopulares en el país. Empezando por los multimillonarios rescates de Grecia, Irlanda y Portugal.
Además, los mercados podrían no quedar convencidos de que tanto Bruselas como el BCE tengan la energía política y la capacidad de disparo financiero necesarias para proteger del peligro a Italia de manera duradera a no ser que consiga una improbable conversión a la disciplina fiscal y el crecimiento económico. En este sentido, los críticos recuerdan que las pasadas compras de bonos del BCE sólo tuvieron un efecto calmante temporal y que no evitaron los ulteriores rescates de Grecia, Irlanda o Portugal.
"A la larga creemos que la actual presión vendedora forzarán al BCE y el FEEF a tener cerca de la mitad de los bonos que se negocian de Italia y España, unos 850.000 millones de euros", han valorado los economistas del Royal Bank of Scotland en una nota de análisis. Uno de los antiguos economistas del BCE, Tobias Blattner, que actualmente trabaja en el sector privado, ha estimado en que el organismo deberá desembolsar a la larga unos 260.000 millones de euros (60.000 millones de deuda española y el resto italiana) para que su intervención tenga un verdadero impacto.
Esta enorme cantidad de deuda de países del sur de Europa en manos del BCE podría suponer una mutualización "de facto" del riesgo de deuda de la zona euro y podría causar un contragolpe político en el norte de Europa. Por este motivo, tal y como advierte Paul Taylor desde esta agencia de noticias, "aunque el fuego remita por el momento, prepárense para más incendios".
De hecho, tras la intervención, aumentan las advertencias por parte de algunos expertos de que la compra de bonos reducirá el margen de maniobra del instituto emisor para llevar a cabo las operaciones de drenaje de liquidez con la que trata de mantener la inflación bajo control. Esto es, que dispondrá de menos fondos para el que es su objetivo principal.
En la misma línea añaden que el formidable desembolso que necesita realizar el BCE para que su apoyo a la deuda española e italiana tenga éxito equivaldrá a un rescate encubierto, algo que está prohibido en los estatutos del instituto emisor. "Está en riesgo su credibilidad e independencia política", ha advertido Blattner.