MADRID.- La crisis que afecta a España, con la mayor tasa de desempleo entre los países industrializados, provocó una caída de ventas de automóviles nuevos del 17,7% en 2011 y alcanzó su nivel más bajo desde 1993, anunció este lunes la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles (Anfac).
En total, 808.059 automóviles fueron matriculados durante el pasado año, por las 982.015 unidades en 2010, año en el que durante el primer semestre estuvo vigente una ayuda gubernamental para apoyar al sector.
Los constructores más requeridos fueron Seat, Volkswagen y Ford. Solamente en diciembre, las ventas retrocedieron un 3,6%, hasta las 66.458 unidades.
"La tasa de desempleo, la crisis de confianza y la restricción del crédito han estancado el mercado en volúmenes de 1993", destacó ANFAC en un comunicado.
España, doblemente castigada por la crisis internacional y el estallido de su burbuja inmobiliaria, se debate para mantener su crecimiento y probablemente recaiga en la recesión a principios de 2012, mientras que su tasa de desempleo, del 21,52%, es la más elevada entre los países industrializados.
"Es el tercer año consecutivo en el que el mercado termina en unos volúmenes por debajo del millón de unidades", lamentó Anfac, que insistió en los efectos negativos que tendrán estas malas ventas para las finanzas públicas de España.
Esta intensa caída del mercado en 2011 "ha provocado una merma muy significativa de la recaudación fiscal por adquisición de vehículos", destacó Anfac.
"Hemos estimado que en el año 2011 se dejaron de ingresar cerca de 450 millones de euros (unos 582 millones de dólares) por la recaudación en la imposición directa de la compra de automóviles", estimó la directora económica de Anfac, Arancha Mur, citada en el comunicado.
"También hemos estimado que por cada 100.000 matriculaciones nuevas que se produzcan en el canal de particulares, las Arcas Públicas recibirían una inyección de ingresos de cerca de 320 millones de euros" (unos 414 millones de dólares), valoró Mur.
El presidente de la asociación Ganvam, Juan Antonio Sánchez Torres, que representa 4.600 concesionarios y servicios oficiales y 3.000 compraventas, "el ejercicio 2011 que acaba de concluir fue un año para olvidar que marcará un triste hito para la automoción". "La crisis y la falta de financiación han reducido las matriculaciones a la mitad con respecto a los niveles previos a la crisis, lo que en sólo doce meses ha provocado el cierre de medio millar de empresas y la pérdida de 5.000 puestos de trabajo", lamentó.
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