MADRID.- El Estado registró un déficit de 36.364
millones de euros hasta mayo, en términos de Contabilidad Nacional, el
3,41% del PIB, lo que supone un aumento del 30,6% en comparación con la
cifra del mismo periodo del año anterior, según los datos ofrecidos
hoy por la secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández
Currás.
La cifra, que prácticamente roza el objetivo del 3,5% fijado
para el conjunto del año, es consecuencia de unos pagos que se situaron
en 68.072 millones de euros, un 1,7% más, mientras que los ingresos
sumaron 31.708 millones de euros, lo que supone una caída del 4,2%.
Currás ha achacado el aumento del déficit al apoyo al resto
de administraciones públicas, ciudadanos y empresas, y ha pedido que se
compare el déficit en términos homogéneos. En esta variable, el saldo
negativo del Estado se reduce al 2,38% del PIB frente al 2,56%
registrado en el mismo periodo de 2011, lo que supone 2.146 millones
menos.
En este sentido, la secretaria de Estado ha celebrado el
descenso de la variable, y ha confiado en que se siga moderando en los
próximos meses porque las medidas del Presupuesto aún no han tenido
efecto.
En cualquier caso y a pesar de reconocer que la recaudación
se está viendo afectada por el momento económico que vive España, "el
peor" en términos macroeconómicos, Currás ha asegurado que la cifra
registrada hasta mayo "se ajusta" a las previsiones presupuestarias.
Según Currás, el momento es "dificilísimo", aunque España
cumplirá los objetivos fijados a pesar de que el Estado va "peor de lo
que le corresponde" porque está apuntalando a las comunidades
autónomas, que están registrando mejores cifras de lo esperado en los
seis primeros meses del año.
Así, ha insistido más de una vez en que se cumplirán lo
pactado con Bruselas y ha reconocido que esta semana será "clave" en
seno de la UE porque se celebrará una cumbre "capital" para el euro,
aunque no ha confirmado si el encuentro servirá para modificar los
objetivos de déficit.
En cualquier caso, ha rechazado la idea de que la previsión
de ingresos sea demasiado optimista y ha garantizado que el Gobierno
estará "absolutamente atento" a todos los componentes de los
Presupuestos, tanto en gastos como en ingresos.
"No podemos ni vamos a relajar ningún esfuerzo de
contención", ha subrayado, tras asegurar que el Gobierno seguirá con
las reformas y las políticas de austeridad porque en algún momento
empezarán a dar efectos.
En concreto, el déficit registrado hasta mayo está afectado
por las transferencias de casi 9.000 millones a otras administraciones
(5.176 millones a CC.AA.) y las devoluciones de impuestos superiores a
lo que sería una campaña normal (1.600 millones más de lo habitual).
En términos de caja, una metodología contable que considera
los ingresos y pagos que efectivamente se han realizado, el déficit de
los cinco primeros meses suma 19.793 millones de euros, el 1,86% del
PIB, aunque en términos homogéneos se reduce en 1.482 millones.
Entre enero y mayo, los ingresos no financieros del Estado
sumaron 75.251 millones, un 0,1% menos. Los ingresos impositivos se
elevaron a 66.320 millones, un 4,6% menos. En concreto, los impuestos
directos aportaron 34.812 millones, un 1,2% menos, mientras que los
indirectos generaron 31.508 millones, un 8,1% menos.
Por figuras impositivas, la recaudación de IRPF alcanzó los
30.124 millones, un 0,8% más, lo que supone la primera tasa positiva en
lo que va de año gracias a la subida fiscal que puso en marcha el
Gobierno. También ha influido positivamente el incremento de la
recaudación por retenciones de capital mobiliario en un 13,6%.
Las retenciones sobre arrendamientos y fondos de inversión
frenan su descenso debido a la evolución positiva de mayo, aunque
siguen en tasas negativas del 1,7%y del 22,1%, respectivamente.
La recaudación del Impuesto de Sociedades cayó un 8% y sumó
3.572 millones, una "mala evolución" por la mayor agilización de las
devoluciones y la menor recaudación por retenciones de los intereses de
la deuda pública. Según Currás, en términos homogéneos, la recaudación
de este impuesto crecería un 22,6%.
El IVA, por su parte, bajó un 10,1%, hasta 22.782 millones de
euros por la acentuada atonía del consumo y al mayor esfuerzo en la
realización de devoluciones, que han aumentado el 7,3% frente al año
anterior.
Los ingresos por Impuestos Especiales bajaron un 2,8% hasta
mayo y totalizaron 7.466 millones de euros por el acaparamiento de
tabaco previo a la subida de tipos y precios y por el descenso del 7,2%
en el Impuesto de Hidrocarburos, en línea con la caída de carburantes.
Por su parte, los pagos no financieros ascendieron a 65.716
millones, lo que supone un incremento del 12% frente al mismo periodo
de 2011 por el adelanto de transferencias a otras administraciones
públicas, fundamentalmente a comunidades autónomas.
Todos los capítulos presentaron disminuciones menos los
gastos de personal (+1,4%), los gastos por intereses (+32%) y los
gastos de transferencias corrientes (+27,1%). Así, los pagos por gastos
corrientes en bienes y servicios bajaron un 30,7% y los pagos
destinados a financiar inversiones cayeron un 35,9%.
No hay comentarios:
Publicar un comentario