ROMA.- El tecnócrata Mario Monti se ha desmarcado por sorpresa de la política
de recortes que la canciller alemana Angela Merkel ha impuesto en la
vieja Europa. Tras una larga reunión para debatir los presupuestos
italianos para 2013, el equipo del mandatario ha acordado rebajar
impuestos a las rentas más bajas del país y subir el IVA en la mitad de
lo inicialmente previsto.
Con este movimiento, inesperado para analistas políticos y económicos, Monti lanza un guiño a las rentas medias y bajas del país transalpino aprovechando que el epicentro del huracán financiero se centra ahora en España. A pesar de haber escogido el camino contrario al marcado por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, el tecnócrata asegura que Italia conseguirá cumplir con los requisitos de déficit pactados con Bruselas para 2013.
Los presupuestos para el próximo año aprobados hoy en Roma recogen la reducción de un punto porcentual en los impuestos a los que hasta ahora estaban sometidos los dos tramos más bajos de renta contemplados en la regulación italiana. De este modo, los ciudadanos que cuenten con ingresos inferiores a 15.000 euros tributarán al 22% frente al 23% actual, mientras que aquéllos cuyos ingresos se encuentren entre los 15.001 y los 28.000 euros rendirán cuentas a la hacienda italiana por el 26% frente al 27% actual.
De esta medida, calificada por los expertos como de un intento por incentivar el consumo y, por tanto, la recuperación económica, quedan excluidos los tres tramos superiores de ingresos contemplados en la ley italiana. Sin embargo, éstos sí se beneficiarán también de que el IVA suba tan solo un punto porcentual a partir de junio de 2013, la mitad de lo que se esperaba hasta ahora.
Con este movimiento, inesperado para analistas políticos y económicos, Monti lanza un guiño a las rentas medias y bajas del país transalpino aprovechando que el epicentro del huracán financiero se centra ahora en España. A pesar de haber escogido el camino contrario al marcado por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, el tecnócrata asegura que Italia conseguirá cumplir con los requisitos de déficit pactados con Bruselas para 2013.
Los presupuestos para el próximo año aprobados hoy en Roma recogen la reducción de un punto porcentual en los impuestos a los que hasta ahora estaban sometidos los dos tramos más bajos de renta contemplados en la regulación italiana. De este modo, los ciudadanos que cuenten con ingresos inferiores a 15.000 euros tributarán al 22% frente al 23% actual, mientras que aquéllos cuyos ingresos se encuentren entre los 15.001 y los 28.000 euros rendirán cuentas a la hacienda italiana por el 26% frente al 27% actual.
De esta medida, calificada por los expertos como de un intento por incentivar el consumo y, por tanto, la recuperación económica, quedan excluidos los tres tramos superiores de ingresos contemplados en la ley italiana. Sin embargo, éstos sí se beneficiarán también de que el IVA suba tan solo un punto porcentual a partir de junio de 2013, la mitad de lo que se esperaba hasta ahora.
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