MÉXICO.- Los
ministros de Finanzas del G20 iniciaron este domingo en México dos días
de reuniones para evaluar la situación económica mundial, con el foco
puesto en la crisis europea, aunque no tendrán definiciones sobre un
eventual pedido de rescate de España a sus socios de la Unión Europea
(UE).
En un encuentro plagado de deserciones -no asisten a la cita el
secretario del Tesoro estadounidense Tim Geithner ni el ministro de
Hacienda de Brasil, Guido Mantega-, los titulares de Finanzas de este
foro de países ricos y emergentes darán especial atención a las
negociaciones de Grecia con sus acreedores, a España, y a la situación
fiscal de Estados Unidos.
"Hay preocupación alrededor de cómo se resuelve el que se ha llamado
'precipicio fiscal' en Estados Unidos", resumió el ministro mexicano de
Finanzas, José Antonio Meade, consultado en rueda de prensa.
La falta de acuerdo en el Congreso estadounidense para reducir el
colosal déficit público podría disparar lo que se conoce como un
"precipicio fiscal" a inicios de 2013, un paquete de recortes de gastos y
aumentos de impuestos que podría golpear el ya vacilante crecimiento
económico mundial.
"Estados Unidos tiene que armar un programa de consolidación fiscal
hacia adelante, pero hay la percepción que un ajuste de esta magnitud es
mayor del monto que se requeriría para asegurar que Estados Unidos
regrese a un esquema sostenible", concluyó Meade.
Con Europa buscando aún salidas a la crisis, una fuente oficial
francesa señaló esta semana que los ministros podrán "hacer un balance"
de las medidas que se adelantan para superarla, antes de la próxima
reunión del Eurogrupo el próximo 12 de noviembre.
También "haremos un balance de la degradación de la situación a nivel
mundial, para ver si algunos países que tienen márgenes de maniobra
siguen dispuestos a hacer más para relanzar la actividad", añadió el
informante, que pidió no ser identificado.
La presidencia mexicana del G20 había indicado en días previos a la
reunión que esperaban explicaciones de España sobre su negativa a pedir
ayuda a sus socios europeos, a través de un programa de compra de deuda
soberana por parte del Banco Central Europeo (BCE), una situación que
tensa los mercados.
Pero la reunión de México parece no ser la ocasión para que España precise sus decisiones futuras.
El ministro de Economía de España, Luis de Guindos, dará un discurso
ante sus pares del G20 en la noche del domingo, pero se concentrará en
las reformas en curso en su país, ya que no considera fundamental
justificar la negativa española a pedir un rescate a sus socios
europeos, informaron fuentes de su delegación este domingo.
El ministro Guindos se concentrará en "explicar el plan de reformas
que se está llevando a cabo", especialmente "la reforma bancaria y la
reforma laboral", y "cómo responde la economía española", indicó la
fuente que pidió no ser identificada.
El informante indicó que Madrid no considera fundamental dar
explicaciones sobre su negativa a pedir ayuda a sus socios europeos a
través del programa del BCE, una alternativa que le permitiría bajar sus
costes de financiamiento.
El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, afirmó el pasado
lunes que para España "no es imprescindible" pedir ayuda financiera a
sus socios europeos. También ha señalado que de considerarlo necesario,
echará mano a esa alternativa.
El estado de las negociaciones de Grecia con sus acreedores -Unión
Europea, Fondo Monetario Internacional (FMI) y Banco Central Europeo-
para lograr la liberación de una nueva partida de ayuda por 31.500
millones de euros que le evite entrar en default a mediados de
noviembre, ocupará asimismo el encuentro en México.
El parlamento griego debe votar el miércoles nuevos recortes por
18.000 millones de euros, en medio del descontento social de una
población que lleva más de cinco años de recesión bajo rigor fiscal
extremo.
La reunión en México sigue al encuentro de presidentes del G20 en
junio en el balneario mexicano de Los Cabos (noroeste), cuando los
dirigentes acordaron adoptar "todas las medidas necesarias" para
impulsar el crecimiento.
Desde entonces, el FMI recortó su previsión de crecimiento global a
3,3% para 2012, el desempleo en la eurozona subió al récord de 11,6% en
setiembre -en España llega al 25%- y los países emergentes registran una
desaceleración.
No hay comentarios:
Publicar un comentario