BRUSELAS.- El presidente del grupo de los socialistas y demócratas en el
Parlamento Europeo, el eurodiputado austriaco Hannes Swoboda, ha
defendido que la Comisión Europea acepte dar a España como "mínimo"
hasta 2016 para rebajar el déficit por debajo del 3% del PIB, algo que
también ha defendido para Portugal y Grecia.
"Creo que 2016 es el calendario mínimo que necesitemos, quizá
más... Para España, Portugal y Grecia", ha defendido el eurodiputado
austriaco durante un almuerzo con periodistas en Bruselas.
"España necesita por supuesto más tiempo. Y otro tipo de
políticas. No sólo en España, sino por parte europea. El problema es que
ningún país por sí solo puede cambiar el rumbo porque sería castigado
por las agencias de rating de forma inmediata", ha explicado.
"El 2016 es el mínimo para alcanzar el objetivo. Solo se pueden
reducir realmente las deudas con el crecimiento. No se puede tener
crecimiento si se recorta demasiado en el gasto financiero, social y
económico", ha advertido.
El presidente del grupo parlamentario de los socialistas ha
insistido en que la Comisión Europea debe mostrar flexibilidad para dar
más tiempo a los países con más dificultades para cumplir el déficit y
ha lamentado que hasta ahora tanto el presidente de la Comisión Europea,
José Manuel Durao Barroso, y el comisario de Economía y Asuntos
Monetarios, Olli Rehn "han fracasado en su trabajo porque no lo
aceptaron".
Además, el líder socialista ha insistido en que España necesita
"absolutamente" que la unión bancaria pueda comenzar a funcionar para
que se beneficie de la recapitalización directa de las ayudas europeas
para los bancos y no tengan que computar como deuda.
"Estamos poniendo mucha presión en el Consejo para que la unión
bancaria comience a funcionar. Debe ser al menos en los primeros meses
del año que viene o en la primera mitad porque de lo contrario España
estará en una situación desastrosa. Ya vemos que la perspectiva de
crecimiento es mucho peor", ha lanzado.
Swoboda no ha querido opinar abiertamente sobre si el Gobierno de
Mariano Rajoy debería solicitar un segundo rescate a la Eurozona para
que el Banco Central Europeo compre a su vez bonos de deuda españoles en
el mercado secundario después de solicitar ayuda para recapitalizar el
sector bancario del país, acordado por el Eurogrupo el pasado mes de
julio, por valor de hasta 100.000 millones.
"Si es para que venga la troika no", ha ironizado, en alusión a la
Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario
Internacional, las instituciones encargadas de supervisar los programas
de rescate de Grecia, Portugal e Irlanda.
Los socialistas y demócratas europeos critican las políticas de
austeridad y recortes promovidas desde el Ejecutivo comunitario e
insisten en que "hay alternativas" posibles. Ellos apuestan en todo caso
por más inversiones en los sectores con potencial de crear empleo y en
educación sin que computen dentro del cálculo de deuda y déficit,
fomentar industrias innovadoras, sobre todo entre las pequeñas y
medianas empresas y promover el diálogo real entre patronal y agentes
sociales para combatir el desempleo.
También defienden modernizar las administraciones públicas de
países como España, Grecia y Portugal para mejorar su eficacia y "más
presupuesto" europeo sobre todo para "las regiones pobres" de los países
en dificultad, incluido España
No hay comentarios:
Publicar un comentario