MADRID.- El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha avisado de que una vez
"agotadas" las opciones para una recapitalización privada de la banca a
través del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) puede ser necesario un
"mayor recurso a la financiación pública" para preservar la estabilidad
financiera y rescatar entidades "problemáticas".
En un informe
de un equipo de evaluación financiera del organismo liderado por
Christine Lagarde, se justifica esta suposición en la intención de
evitar que los costes de resolución sean "demasiados elevados" para la
industria, tras constatar que el Gobierno español persigue una
estrategia de reparto de "cargas" entre el sector privado (FGD) y
público (FROB).
Los expertos del FMI, de visita en España del
1 al 21 de febrero y del 12 al 25 de abril, instan a continuar
"profundizando" en la estrategia de reformar el sector bancario, y para
ello priorizan el tratamiento de forma "global y efectiva" de los
activos problemáticos en las carteras bancarias.
En este
sentido, el FMI, que considera que la crisis en el sector financiero
español "no tiene precedente", sugiere la posibilidad de fijar
sociedades públicas o privadas "especializadas" en la gestión de activos
tóxicos, tal y como se plantean el Banco de España y el Ministerio de
Economía. Ahora bien, reitera que puede resulta "particularmente útil"
un diagnóstico "completo" de dichos activos.
Tras resaltar la
solvencia y suficiente capitalización de las entidades mayor tamaño,
identifica a diez bancos como "vulnerables", con ayudas públicas en su
mayoría, de los cuales cinco ya han sido adquiridos o fusionados con
otras entidades solventes y otros tres están en procesos de subasta.
Para los dos bancos restantes, "en particular el del mayor tamaño" en
-alusión a Bankia-, que han recibido el visto bueno del supervisor para
cumplir con las exigencias de la reforma, los expertos del FMI aconsejan
tomar medidas "rápidas y decisivas" para fortalecer sus balances.
Sobre los requerimientos para limpiar los balances de activos
inmobiliarios, advierte de que será "difícil" que algunos bancos cumplan
con la reforma, por lo que no descarta "presiones adicionales" sobre
los bancos que afronten mayores necesidades de financiación mayorista.
La prueba de resistencia ejecutada por el equipo del FM, sobre más del
90% del sector constata que la mayor parte de las entidades españolas
podrían resistir "shocks" futuros, si bien subraya "bolsas de
vulnerabilidad".
Por otro lado, el organismo internacional alaba el "acertado" proceso
de concentración para fortalecer el sector, ya que considera este
adelgazamiento como "condición esencial" para apoyar la recuperación
económica.
"A menos que se produzca un saneamiento rápido y
adecuado de balances en las entidades débiles, los bancos solventes
sufrirán innecesariamente por la pérdida de confianza de los mercados",
advierte.
Por último, insta a fortalecer la independencia
regulatoria del Banco de España y de la Comisión Nacional del Mercado de
Valores (CNMV), así como la autoridad del organismo dirigido por Miguel
Ángel Fernández Ordóñez para abordar, de forma "preventiva", la
acumulación de riesgos en el sistema.