MADRID.- La Seguridad Social española registró un
superávit de 2.466,48 millones de euros hasta septiembre, el equivalente
al 0,23% del PIB, ligeramente por debajo del que presentaba un mes
antes, cuando se situó en 2.721 millones (+0,3% del PIB), por la menor
aportación del Estado, según datos del Ministerio de Empleo.
Además, este salgo positivo es menos de la mitad que el que atesoraba la Seguridad Social en el mismo periodo de 2011, cuando el superávit alcanzó los 5.452,15 millones de euros.
Este menor superávit respecto al mes anterior se explica por una
menor aportación del Estado. Así, las transferencias recibidas del
Estado crecieron en 1.019,86 millones de euros, frente a los 1.440,49
millones del año anterior.
En términos homogéneos --descontadas estas transferencias-- los
ingresos financieros hasta septiembre reflejarían un descenso del 1,84% y
el superávit quedaría reducido a 1.446,62 millones de euros, inferior
en un 73,47% al registrado en igual periodo del ejercicio anterior.
En comparación, hasta el mes de agosto el superávit registrado en
términos homogéneos fue inferior, de 1.280,59 millones de euros, por un
peor comportamiento de los ingresos y de los gastos.
A 31 de septiembre, ya se han recibido el 88,28% del total de las
aportaciones contempladas en el presupuesto. Al respecto, el secretario
de Estado de Seguridad Social, Tomás Burgos, indica que "a
partir de este momento el sistema tendrá que hacer frente a sus
obligaciones sólo con sus cotizaciones, lo que alterará el resultado
final en meses sucesivos hasta final de año".
Los resultados detallados, muestran que el saldo positivo de
2.466,48 millones de euros es la diferencia entre unos ingresos por
operaciones no financieras de 90.456,59 millones de euros, que aumentan
un 0,72%, y unos gastos de 87.990,11 millones de euros, que crecen un
2,71% en tasa interanual.
Los gastos pendientes de imputación presupuestaria a esta fecha
alcanzarían un importe aproximado de 623 millones de euros,
fundamentalmente en los conceptos de incapacidad temporal y de
transferencias tanto por capitales coste como por aportaciones al
sostenimiento de servicios comunes a cargo de las Mutuas de Accidentes
de Trabajo y Enfermedades Profesionales de la Seguridad Social.
Del volumen total de los ingresos, el 91,94% corresponde a las entidades gestoras y servicios comunes de la Seguridad Social
y el 8,06% restante a las Mutuas de Accidentes de Trabajo y
Enfermedades Profesionales. En cuanto a los gastos, el 93,25% ha sido
reconocido por las entidades gestoras y el 6,75% por las Mutuas.
En términos de caja, que se corresponde con los cobros y pagos
efectivamente realizados durante el periodo considerado, estas
operaciones de carácter no financiero se concretan en una recaudación
líquida de 86.773,11 millones de euros, con un decremento porcentual del
0,67% respecto al ejercicio anterior, mientras que los pagos presentan
un aumento del 2,66%, alcanzando los 87.816,05 millones de euros, lo que
significa un desequilibrio de 1.042,94 millones.
Dentro del conjunto de los ingresos no financieros, más del 84%
del total corresponde a las cotizaciones sociales, que han ascendido a
76.267,12 millones de euros, lo que implica una disminución de 2,94%
respecto al mismo periodo del año anterior.
Esta caída viene originada por el descenso de la cotización de
ocupados en un 3,73%, mientras que la cotización de desempleados
registra una subida del 4,39%.
En conjunto, la Seguridad Social contempla en el
presupuesto del ejercicio un total de 106.322,96 millones de euros en
concepto de cotizaciones sociales. De esta forma, los ingresos por
cotizaciones representan el 71,73% de lo previsto para todo el ejercicio
2012.
Las transferencias corrientes totalizaron 10.030,05 millones de
euros, un 9,80% más que las acumuladas a septiembre del 2011, como
consecuencia del aumento que experimentan las aportaciones del Estado
para la financiación de las prestaciones de carácter no contributivo.
Los ingresos patrimoniales registran 2.526,11 millones de euros
mientras que las tasas y otros ingresos alcanzan 1.094,54 millones de
euros.
Por otro lado, las prestaciones económicas a familias e
instituciones totalizaron 81.703,46 millones de euros, cifra que
representa casi el 93% del gasto total realizado en el sistema de Seguridad Social.
La mayor partida, 79.100,59 millones de euros, corresponde a
pensiones y prestaciones contributivas, con un crecimiento interanual
del 3,35%, como consecuencia de la variación que experimentan las
pensiones, debido al incremento del colectivo de pensionistas y la
revalorización de todas las pensiones.
Dentro de las prestaciones contributivas, a las pensiones
(invalidez, jubilación, viudedad, orfandad y en favor de familiares) se
destinaron 73.696,10 millones de euros, un 4,30% superior a la del año
pasado.
Las prestaciones por maternidad, paternidad y riesgo durante el
embarazo se elevaron hasta los 1.683,53 millones de euros, lo que
representa una disminución interanual del 3,08%.
En incapacidad temporal, el gasto realizado alcanza un importe de
3.348,35 millones de euros, un 10,40% inferior al ejercicio anterior, lo
que supone seguir manteniendo la tendencia al descenso de dicha
prestación.
A 30 de septiembre de 2012, las pensiones y prestaciones no
contributivas presentan una caída interanual del 3,89%, alcanzando un
importe de 2.602,87 millones de euros, no obstante las pensiones no
contributivas registran un incremento del 1,20%, situándose en 1.536,68
millones, mientras que las prestaciones no contributivas experimentan un
descenso del 10,40% respecto al ejercicio anterior, situándose el gasto
realizado en 1.066,19 millones de euros.
Por lo que respecta a los gastos de gestión realizados por la Seguridad Social,
los gastos de personal experimentan una bajada del 1,23% respecto al
ejercicio precedente y en el mismo sentido destaca el descenso de un
9,61% en los gastos corrientes en bienes y servicios. De igual forma el
gasto destinado a inversiones registra una disminución del 27,53% en
relación al ejercicio anterior.