LONDRES.- La actividad del sector manufacturero en la zona euro se situó en
diciembre en 46,1 puntos, lo que implica un ligero empeoramiento
respecto al mes anterior y supone el decimoséptimo mes consecutivo en el
que el indicador PMI del sector elaborado por Markit queda por debajo
de 50 puntos, lo que supone una contracción de la actividad y sugiere un
agravamiento "bastante significativo" de la recesión en el último
trimestre de 2012.
En concreto, la producción manufacturera de
la zona euro se contrajo por décimo mes consecutivo en diciembre, a
medida que las empresas se vieron afectadas por una reducción del flujo
de los nuevos pedidos en total y de los nuevos pedidos para
exportaciones.
De este modo, la continua desaceleración en el
sector provocó una nueva destrucción del empleo en diciembre, acumulando
así una serie de once meses consecutivos con recortes de plantilla en
el sector.
Entre los países de la eurozona, sólo Irlanda
registró una mejora de las condiciones operativas del sector
manufacturero, mientras que los declives se aceleraron en Alemania,
España, Austria y Grecia, pero se moderaron en Francia, Italia y los
Países Bajos.
"El sector manufacturero de la zona euro se
mantuvo estancado en una fuerte contracción al final del año", indicó
Chris Williamson, economista jefe de Markit, quien considera "probable
que la recesión de la región se haya profundizado, y posiblemente de
forma bastante significativa, en el último trimestre".
En el caso de España, la actividad del sector manufacturero se situó en
diciembre en 44,6 puntos básicos, frente a los 45,3 del mes anterior,
lo que implica el vigésimo mes consecutivo en el que el dato queda por
debajo de 50 puntos, lo que implica una contracción de la actividad.
"El sector manufacturero español terminó el 2012 de la forma habitual,
registrando fuertes caídas en la producción, los nuevos pedidos y el
empleo", señaló Andrew Harker, economista de Markit y autor del informe,
quien destacó el aumento de los nuevos pedidos para exportaciones,
aunque las empresas encuestadas comentaron que dicho aumento refleja en
gran medida la debilidad de la demanda interna.
"Hay pocos
indicios que sugieren una mejora sostenida de las condiciones en el
sector en un futuro próximo, y el 2013 parece que va a ser otro año de
grandes dificultades para las empresas en medio de la continua débil
demanda interior", añadió.
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