jueves, 4 de abril de 2013

Japón anima a Wall Street


NUEVA YORK.- Las ambiciosas medidas de estímulo anunciadas hoy por el Banco de Japón fueron el principal impulso de la bolsa neoyorquina, donde el Dow Jones de Industriales subió un 0,38 % y cerró en su segunda mejor marca de la historia.

Los demás índices importantes subieron también, en una jornada con pocas novedades dentro de Estados Unidos, tanto a nivel de indicadores macroeconómicos como de anuncios empresariales, por lo que los principales factores se produjeron en Japón y Europa.
En Tokio, el Banco de Japón anunció un nuevo esquema de flexibilización monetaria que apuesta por ampliar la base monetaria, al duplicar la compra de deuda pública y de activos financieros de mayor riesgo, muy parecido al que aplica desde hace tiempo la Reserva Federal estadounidense.
Mientras tanto, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, dejó claro que está dispuesto a bajar aún más los tipos de interés si persiste la debilidad económica de la zona euro.
Animados por estas decisiones de Japón y la zona euro para revitalizarse (sobre todo en el país asiático, donde las medidas anunciadas parecieron de amplio alcance), los inversores y operadores no parecieron preocupados por los datos semanales de solicitudes de subsidios de desempleo en EE.UU.
El verdadero alcance de la situación del empleo en marzo se conocerá mañana, con la divulgación de los datos del desempleo en este país, y en ese dato se verá si la entrada en vigor de los recortes automáticos en el presupuesto federal ha costado -o no- empleos a la trabajosa recuperación económica estadounidense.

El Banco de España se dota de una nueva estructura de supervisión financiera

MADRID.- El Banco de España implantará una nueva estructura de supervisión financiera con el objetivo de reforzar la vigilancia, sobre todo de una parte del sector bancario español, que llevó al Gobierno español el año pasado a pedir un rescate de hasta 100.000 millones de euros a sus socios europeos.

El banco emisor manifestó el jueves que la nueva estructura de supervisión tiene como objetivo dar cumplimiento a las medidas establecidas en el Memorando de Entendimiento (MOU) firmado el año pasado entre el gobierno español y las autoridades comunitarias con motivo del rescate del que hasta ahora el Ejecutivo ha pedido algo más de 41.000 millones de euros.
La nueva supervisión también persigue preparar la estructura de la dirección de supervisión a las futuras demandas que puedan derivarse de la implementación del supervisor único.
El estallido de la burbuja inmobiliaria dejó a finales de 2007 a una parte del sector financiero español, como las cajas de ahorros muy activas en la concesión de créditos a promotores y en megaproyectos que no se ciñeron estrictamente a criterios de rentabilidad, con un balance repleto de activos tóxicos.
Tanto las autoridades europeas en Bruselas como el Fondo Monetario Internacional (FMI) han advertido en el pasado reciente de las necesidades para las autoridades españolas de mejorar las estructuras de gobernanza de las antiguas cajas de ahorros para despolitizar sus órganos de gobierno.
El nuevo modelo de supervisión obedece también en parte a una nueva realidad creada en el sector financiero español tras la conversión de las antiguas cajas en bancos, tal como recoge el documento el jueves.
De hecho, la dirección general de supervisión (DGS), que se estructurará en cuatro grupos, se responsabilizará en el grupo 'Inspección I' precisamente de la supervisión directa de los bancos procedentes de las antiguas cajas de ahorros.
En los grupos de inspección II y III se integrará la supervisión de los bancos definidos como sistémicos por las normativa internacional del Financial Stability Board (FSB) y el resto de bancos, cooperativas de créditos y demás entidades financieras.
Dentro del grupo de inspección IV se integrarán dos nuevos grupos, uno de cumplimiento normativo, que apoyará y coordinará las actividades que ya se venían realizado en la dirección general de supervisión con la supervisión del blanqueo de capitales, remuneración de altos cargos y comercialización de productos financieros por la entidades de crédito a sus clientes, explicó el Banco de España.
La venta de productos financieros complejos, como las preferentes, a personas con escasa cultura bancaria ha provocado una gran indignación en una parte de la población española que ha quedado atrapada con sus ahorros en activos financieros que carecían de liquidez tras el recrudecimiento de la crisis.
Además, el otro grupo que se integrará del segmento de la inspección IV estará dedicado en exclusiva a la supervisión de la SAREB o también denominado banco malo -- creado como condición para la concesión del crédito bancario a España --, en virtud de lo establecido en la ley española sobre reestructuración y resolución de entidades.

Draghi: "España no es Chipre"

FRANCFORT.-   El rescate pactado entre el Gobierno de Chipre y la troika-- el Banco Central Europeo, la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional-- no representa un modelo para futuras intervenciones en otros países, ha asegurado este jueves el presidente del BCE, Mario Draghi, quien apuntó que cada caso es diferente, poniendo como ejemplo que "España no es Chipre".

   "Chipre no representa un modelo para nadie más", afirmó el banquero italiano en la tradicional rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno de la institución, que mantuvo por consenso los tipos de interés en el 0,75%.
   En este sentido, el máximo responsable de la política monetaria de la eurozona subrayó que el caso de Chipre no puede extrapolarse a otros países. "Existen diferencias de espacio, ya que en esencia España no es Chipre, y también hay diferencias temporales, en esencia Irlanda no es España, porque ambos eventos tuvieron lugar en momentos diferentes", argumentó.
   No obstante, el presidente del BCE apuntó que el problema no es el 'autorrescate' ('bail in') en sí mismo, sino que son la ausencia de reglas y amortiguadores de capital o de otro tipo los que pueden acabar desencadenando un autorrescate desordenado.
   A este respecto, Draghi indicó que una de las particularidades del caso de Chipre era la ausencia de activos, como bonos, que pudieran ser utilizados en cantidad suficiente en este 'autorrescate' en comparación con las dimensiones del sistema financiero del país.
   De este manera, el presidente del BCE opinó que las declaraciones del presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, que apuntaban a que el rescate de Chipre serviría de plantilla para otros países, "seguramente fueron malinterpretadas".
   Por otro lado, Draghi señaló que la propuesta original de ayuda a Chipre presentada por el BCE no incluía ninguna quita sobre los depósitos garantizados, como tampoco las presentadas por la CE y el FMI.
   "Después de largas negociaciones el resultado fue el que se vio, una tasa a los depósitos garantizados", dijo el banquero italiano, que admitió que tal decisión "no fue inteligente" por lo que fue corregida con rapidez en la reunión del Eurogrupo convocada al día siguiente.

Draghi: No hay un 'plan B' frente a la hipótesis de que un país salga del euro

FRANCFORT.- El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, ha asegurado que "no existe un 'plan B'" para hacer frente a la hipótesis de la salida de la eurozona de un país miembro, como llegó a especularse en el caso de Chipre.

   "No tengo respuestas para algo tan hipotético", dijo el banquero italiano al ser cuestionado sobre la existencia de medidas de contingencia en el caso de que algún país decidiera abandonar el euro.
   "Estas cuestiones son habitualmente formuladas por gente que subestima enormemente el significado del euro para los ciudadanos de la eurozona", dijo Draghi. "No hay 'plan B'", añadió.
   A este respecto, el presidente del BCE subrayó que la institución ha mostrado su determinación para acabar con "cualquier riesgo de redenominación" en la eurozona.
   Asimismo, el banquero italiano precisó que, en el caso de Chipre, una hipotetica salida de la eurozona del pequeño país mediterráneo no solucionaría los problemas de su economía.

Barroso dice que el rescate pone fin a un año de incertidumbre para Chipre

BRUSELAS.- El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha celebrado este jueves que el acuerdo para un rescate de hasta 10.000 millones para Chipre pone fin a "más de un año de incertidumbre", y ha confiado en que sirva para que el país recupere la estabilidad financiera, pero también para reforzar la confianza en el euro.

   "Celebro que se haya encontrado un acuerdo, un acuerdo que pone fin a más de un año de incertidumbre sobre Chipre", ha dicho Barroso en una comparecencia en Viena, tras reunirse con el canciller federal de Austria, Wermer Faymann.
   Barroso se ha mostrado confiado en que el rescate "ayudará al país en su camino de vuelta a la estabilidad financiera, a unas cuentas públicas sostenibles y a un modelo de negocio que haga honor a su nombre", al tiempo que ha destacado que "también ayudará a recuperar la estabilidad y la confianza en el euro en su conjunto".
   El jefe del Ejecutivo comunitario ha destacado los avances para instaurar la arquitectura de una unión bancaria y una unión económica y monetaria porque contribuirá a evitar nuevas crisis como la que se vive en Chipre.
   Además, Barroso ha apelado de nuevo a la solidaridad para afrontar la crisis y ha reiterado la necesidad de dar "respuestas europeas a los problemas comunes", con lo que ha querido dejar claro que "Europa no es el problema, sino la solución" y, por tanto, "hay que trabajar a nivel europeo, con espíritu de solidaridad y responsabilidad".
   En opinión del presidente de la Comisión, es "esencial" mantener el ritmo y "no relajar los esfuerzos" para una consolidación fiscal que permita el crecimiento, para reformas estructurales con las que impulsar la competitividad y para invertir en crecimiento, "teniendo en mente que la principal preocupación de los ciudadanos es el crecimiento y el empleo".

El BCE insta a los gobiernos a intensificar las reformas estructurales

FRANCFORT.- El retraso en la aplicación de las reformas estructurales necesarias a nivel nacional por los distintos gobiernos de la zona euro representa  uno de los principales riesgos a la baja para la recuperacion económica, según el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, quien no espera que la "gradual" mejoría de la economía se produzca antes de la segunda mitad de 2013.

   "Es esencial intensificar las reformas a nivel nacional", dijo el banquero italiano en su habitual rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno de la entidad, que mantuvo por consenso los tipos de interés en el 0,75%.
   En este sentido, Draghi, advirtió de que los datos manejados por la institución constatan que la debilidad registrada por la economía de la región en el cuarto trimestre de 2012 se trasladó al arranque de 2013, por lo que la recuperación económica de la eurozona será "gradual" y tendrá lugar a partir de la segunda mitad de año.
   A este respecto, el presidente del BCE apuntó que predominan los "riesgos a la baja" sobre estas expectativas de recuperación, entre los que destacó el posible retraso en la aplicación de las reformas estructurales y medidas de ajuste para mejorar la competitividad de los países.
   "No podemos reemplazar la acción de los gobiernos", defendió Draghi, después de asegurar que el BCE mantendrá su actual postura acomodaticia "durante el tiempo que sea necesario".
   De este modo, el banquero italiano subrayó la necesidad de que los gobiernos aceleren la aplicación de las reformas necesarias para dotar de mayor competitividad a las economías de sus países, así como de reducir los desequilibrios presupuestarios, junto con la introducción de medidas encaminadas a favorecer el crecimiento.
   Asimismo, Draghi reiteró la necesidad de introducir medidas de flexibilización en los mercados laborales de algunos países, así como un mejor alineamiento del empleo y la productividad.

El euro marca su nivel más bajo desde noviembre

MADRID.- La moneda común europea se situaba este jueves por debajo de los 1,275 dólares durante la rueda de prensa del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, marcando así su nivel más bajo desde el pasado mes de noviembre. 

   En concreto, el euro ha llegado a descender hasta los 1,2745 'billetes verdes', en contraste con los 1,2849 dólares en los que ha comenzado la sesión, aunque luego volvía a acercarse hasta los 1,28 dólares.
   De esta manera, la divisa europea marca su nivel más bajo desde el pasado 21 de noviembre, cuando registró un mínimo durante la sesión de 1,2733 'billetes verdes'.
   Asimismo, el oro también continuaba con su senda descendente y caía hasta los 1.539,71 dólares, una nivel que no registraba desde el pasado 30 de mayo de 2012, cuando llegó a marcar un mínimo de 1.531,49 dólares.

El BCE mantiene un mes más los tipos de interés en el 0,75%

FRANCFORT.- El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido este jueves mantener estables un mes más los tipos de interés del euro en el mínimo histórico del 0,75%, donde permanecen desde el pasado mes de julio, según anunció la institución presidida por Mario Draghi.

   Los analistas esperaban esta decisión del Banco Central Europeo, ya que consideran que no existen fundamentos macroeconómicos que justifiquen una rebaja de los tipos de interés en esta reunión, por lo que habrá que estar pendientes de la evolución de la economía de la eurozona en los próximos meses.
   De esta manera, la atención se centrará en la rueda de prensa que ofrecerá a las 14.30 horas Draghi, de quien se espera un mensaje "tranquilizador" que incida en la excepcionalidad del caso de Chipre para mantener la confianza y evitar una salida masiva de depósitos.
   La actividad económica en la zona euro experimentó en el conjunto de 2012 una contracción del 0,6% respecto al año anterior, cuando el Producto Interior Bruto (PIB) se incrementó un 1,5%, lo que supone una décima más de lo contemplado en la primera estimación del dato publicada por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.
   En el último trimestre del año, la caída del PIB de la zona euro respecto al tercer trimestre fue del 0,6% y supone encadenar tres trimestres consecutivos en negativo, mientras que en términos interanuales el PIB de la eurozona retrocedió un 0,9%.
   Asimismo, la tasa de desempleo en la zona euro se situó el pasado mes de febrero en el 12%, en línea con el nivel récord del mes anterior y muy por encima del 10,9% registrado hace un año. Por primera vez, el número de desempleados supera los 19 millones en la región, lo que implica un incremento de 1,77 millones en los últimos doce meses.
   Por su parte, la tasa de inflación anualizada de la eurozona se situó el pasado mes de marzo en el 1,7%, una décima menos que en febrero y el nivel más bajo del indicador desde agosto de 2010, según el dato adelantado publicado este miércoles por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.

El Banco de Inglaterra mantiene tipos y no amplía los estímulos

LONDRES.- El Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra (BoE) ha decidido mantener los tipos de interés en el 0,5%, así como el importe de su programa de recompra de activos mediante la emisión de reservas en 375.000 millones de libras (445.000 millones de euros), que fue incrementado por última vez el pasado mes de julio, según anunció la entidad en un comunicado.

   La institución presidida por Mervyn King mantiene estables los tipos de interés de la libra esterlina en su mínimo histórico desde el 5 de marzo de 2009, fecha en la que la institución también estableció un programa de compra de activos mediante la emisión de reservas, que ha sido ampliado sucesivamente hasta alcanzar su actual volumen.
   La tasa de inflación de Reino Unido se situó en febrero en el 2,8%, una décima por encima del mes anterior, mientras que el producto interior bruto (PIB) experimentó en el cuarto trimestre de 2012 una contracción de tres décimas respecto a los tres meses anteriores, dejando a la economía británica al borde de una triple recesión.

BBVA calcula hasta 30.000 millones para cumplir con el déficit público en España

MADRID.- BBVA Research calcula que la economía española necesitará nuevos ajustes fiscales en los próximos años equivalentes a entre dos y tres puntos del PIB, es decir, entre unos 20.000 y 30.000 millones de euros, con la finalidad de alcanzar el equilibrio presupuestario al que obliga la nueva ley orgánica de estabilidad presupuestaria.

   En un análisis del Servicio de Estudios de la entidad, titulado 'Saldo presupuestario, desempleo estructural y ajustes fiscales', advierte de que es preciso ser "cautos" y "no ir más allá" en la adopción de medidas fiscales adicionales a esos tres puntos del PIB porque pueden "innecesariamente asfixiar el crecimiento". 
"Conviene ser prudentes y no realizar ajustes fiscales que puedan terminar siendo excesivos", subraya.
   En estas circunstancias, añade, es aconsejable seguir un proceso de ajuste "más gradual" que permita consolidar los ajustes fiscales realizados en los últimos años para asegurar que tiene efectos permanentes sobre el déficit público.
   BBVA Research indica que 2013 podría ser un "año de transición" en el que bastara con la aplicación de las medidas de ajuste fiscales ya en marcha, sin adoptar otras adicionales, y que se aprovechara para avanzar en la "calidad" del ajuste fiscal, por ejemplo, con medidas "más selectivas" que permitan mejorar la eficiencia de las administraciones públicas y concentradas en partidas que tengan menos efectos a corto plazo sobre el crecimiento.
   "Mientras tanto, hay que perseverar en la aplicación de nuevas reformas estructurales, así como dar tiempo a que las que ya están en marcha vayan haciendo su trabajo", añade la entidad financiera, que estima que por cada punto de reducción del paro estructural se reduce el déficit estructural en 0,7 puntos, es decir, España se ahorra 7.000 millones de euros en ajustes adicionales para cumplir los objetivos de déficit a medio plazo.    
   En cuanto al cierre del déficit en 2012, BBVA Research estima que España acabó con un déficit público del 10,6% del PIB contando las ayudas a la banca (que habrían aportado 3,7 puntos al déficit), por encima del 10,23% que estima tanto el Gobierno español como la Comisión Europea.
   Así, apunta que tanto el ajuste en la inversión pública como en el gasto en consumo final de las administraciones públicas, junto al crecimiento de los impuestos netos percibidos por el Estado, ha permitido que el déficit, excluyendo las ayudas a la banca, se haya ajustado en torno a 2 puntos porcentuales a lo largo de 2012, situándose en el 7% del PIB.

Los europeos demandan un papel más activo del Estado en la economía

MADRID.- Los europeos quieren mantener el Estado del bienestar aunque tengan que pagar más impuestos y demandan un papel más activo del Estado en la economía, aunque hay diferencias entre países en cuanto a la vinculación de los ciudadanos respecto a la esfera pública, según el estudio 'Values and worldviews' elaborado por la Fundación BBVA.

   Según el estudio, que es la primera vez que se elabora, los europeos buscan una mayor intervención de los Estados en las economías en tiempos de crisis, aunque la mayoría cree que la economía de mercado es el sistema más conveniente pese a que sea también la causa de las desigualdades sociales.
   Así, la mayoría de los europeos apoya la diferenciación de los ingresos a partir del esfuerzo individual, aunque España se aleja de la posición europea, con una mayoría (55%) que aboga por ingresos más equilibrados con independencia del esfuerzo personal.
   Los europeos coinciden en la desconfianza que expresan hacia los políticos, puesto que creen que se preocupan más de sus propios intereses que de los de la sociedad. De hecho, los políticos constituyen el grupo social que menor confianza genera en Europa en general y en España en particular. La confianza en España llega a niveles mínimos (media de 1,5 en una escala de confianza 0 a 10 frente a una media de 3,7 en una medición realizada por la Fundación BBVA en 2005) y los más bajos de todos los países examinados (1,5 frente al promedio europeo de 3).
   Pese a las coincidencias, los resultados describen distintos modelos de cultura política. Suecia, Dinamarca y Países Bajos se caracterizan por ciudadanos mejor informados, con mayor nivel de asociacionismo y una participación pública mayoritaria que se canaliza por vías como la decisión individual de consumo o el boicot a productos por motivos políticos, éticos o medioambientales.
   En cambio, Italia y España representan otro modelo en el que los ciudadanos están menos informados, con un bajo nivel de asociacionismo y una participación pública que no alcanza a la mayoría y que se canaliza mediante recogida de firmas o movilizaciones colectivas. En estos países, la confianza en la democracia, las instituciones y los políticos es menor, pero hay una valoración positiva del voto como la vía por la que los ciudadanos pueden influir en lo que hace el Gobierno.
   De hecho, los españoles son los que más han participado en manifestaciones y huelgas en el último año (23% y 21%, respectivamente, frente al 10% y 8% en el promedio europeo)
   Sobre la propia crisis, existe consenso sobre su gravedad, aunque la percepción de esa gravedad aumenta en países como España o Italia. La responsabilidad del ajuste se la atribuyen a un amplio conjunto de grupos e instituciones, entre los que destacan los políticos, los bancos, los gobiernos nacionales, los dirigentes de la UE, las compañías financieras y las agencias de calificación.
   En concreto, los españoles destacan de la media europea porque adjudican mayor responsabilidad de la crisis a las empresas constructoras y menor responsabilidad a "los países del Sur de Europa".
   En este contexto, el 39% de los europeos se inclina por hacer ajustes con el fin de cuadrar las cuentas públicas, mientras que el 40% cree que es mejor mantener o aumentar el gasto para estimular el crecimiento. Predomina la preferencia por mantener o aumentar el gasto en España (el 59%), Suecia, Países Bajos y Dinamarca, y también en República Checa y Reino Unido. En Francia y Alemania predomina, en cambio, la preferencia por implementar ajustes para cuadrar las cuentas públicas.
   Así, los españoles quieren que crezca el gasto público en sanidad (78%); en atención a discapacitados (75%), mayores (73%) y parados (69%);  en educación (65%) y en investigación científica (62%).
   La mayoría en los países de la Eurozona incluidos en el estudio cree que el euro ha sido algo negativo para la economía de sus países, salvo en Países Bajos. Sin embargo, la mayoría de los ciudadanos se posicionan en contra de volver a la antigua moneda nacional.
   Aún así, la mayoría de la población en todos los países prefiere que cada Estado miembro mantenga su propia autoridad económica frente a que la Unión Europea tenga más autoridad sobre todos los países, posición que se acentúa en Reino Unido, República Checa y Suecia.
   La crisis es percibida de manera desigual por la población de los países analizados, puesto que los españoles, checos, italianos, británicos, polacos, franceses y, en menor medida, los holandeses se sienten "muy" o "bastante" afectados por ella. Daneses, suecos y alemanes, en cambio, son quienes menos se sienten afectados. En concreto, el 73% de los españoles se siente muy o bastante afectado personalmente.
   Esta situación ha llevado a que la mayoría de los europeos haya desarrollado nuevos hábitos de consumo frente a la crisis con el fin de reducir el gasto del hogar. En concreto y entre los españoles, las medidas más frecuentes han sido comprar productos de marca blanca (75%), reducir los gastos en actividades de ocio (73%) o reducir el gasto en alimentos (53%). Además, un 51% tuvo que recurrir a sus ahorros para cubrir gastos del hogar.

El PIB de la OCDE cae un 0,1% en el cuarto trimestre

PARÍS.- El Producto Interior Bruto real (PIB) en el conjunto de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) descendió un 0,1% en los tres últimos meses de 2012 en comparación con el trimestre anterior, cuando se incrementó un 0,3%, según informó en un comunicado la institución, que mejora en una décima el dato preliminar del cuarto trimestre.

   La OCDE también ha mejorado en una décima el dato correspondiente a todo 2012, hasta el 1,4%, cifra inferior al 1,9% de 2011. El incremento del PIB en el conjunto del año se vio impulsado por el consumo privado y las exportaciones netas, que lograron compensar la contribución negativa de los cambios en los inventarios.
   En el cuarto trimestre, la organización destaca que los cambios en inventarios fueron el principal causante de la contracción del dato general, ya que pasó de aportar 0,1 puntos porcentuales al dato global del PIB a contribuir negativamente en tres décimas.
   Por su parte, el gasto público también realizó una aportación negativa de una décima en los tres últimos meses años, en contraste con la positiva de 0,1 puntos porcentuales del trimestre anterior, mientras que, por el contrario, la formación bruta de capital fijo pasó de una contribución negativa de una décima, a una positiva del mismo valor.
   Asimismo, el impacto negativo del gasto público y los inventarios se vio compensado en parte también por las exportaciones netas y el consumo privado, que  aportaron un trimestre más una décima al incremento del PIB.
   Por países, la OCDE constata que en el cuarto trimestre se mantuvieron los "patrones divergentes" en la evolución del PIB, aunque en todas las grandes economías, excepto Alemania, el factor dominante fueron los cambios en inventarios.
   En concreto, destaca que la inversión y el consumo privado compensaron la contribución negativa de los inventarios y el gasto público en Estados Unidos, que creció una décima. En Canadá, donde la economía creció de nuevo dos décimas, el aumento del consumo privado ayudó a compensar los cambios en los inventarios.
   Por su parte, la economía de Japón se estancó en el cuarto trimestre, después de contraerse nueve décimas el anterior, al aumentar el consumo privado, en contraste con la caída de dos décimas de las exportaciones y los inventarios. En Reino Unido, el PIB se contrajo tres décimas, frente al crecimiento del 0,9% del trimestre anterior, debido a la caída de las exportaciones y, sobre todo, de los inventarios.
   Asimismo, en Francia e Italia, donde la economía se contrajo tres y nueve décimas, respectivamente, la contribución de los inventarios lastró el comportamiento del PIB. Por su parte, la economía alemana se contrajo seis décimas principalmente por la contribución negativa de 0,8 puntos porcentuales de las exportacines.

El Banco de Japón anuncia "una nueva fase" de medidas de estímulo monetario

TOKIO.- El Banco de Japón, presidido por primera vez por Haruhiko Kuroda, ha anunciado una agresiva batería de medidas de estímulo que suponen la entrada en "una nueva fase" de relajación monetaria que implica duplicar la base monetaria y las cantidades de deuda pública y otros instrumentos financieros adquiridos por la institución con el fin de alcanzar una meta de inflación del 2% en un plazo de dos años.

   "El consejo de política monetaria del Banco de Japón ha decidido la introducción de medidas de estímulo monetario cuantitativo y cualitativo y para ello entrará en una nueva fase de flexibilización monetaria tanto en términos de calidad como de cantidad", anunció el BoJ en un comunicado.
   En este sentido, espera duplicar la base monetaria y las cantidades de deuda pública y de fondos negociados (ETFs) adquiridos en los próximos dos años y multiplicará por más de dos el plazo medio de vencimiento de los bonos nipones en su poder.
   En concreto, la entidad llevará a cabo operaciones en el mercado monetario con el objetivo de incrementar la base monetaria a un ritmo anual de entre 60 y 70 billones de yenes (490.930 y 572.750 millones de euros).
   Asimismo, el BoJ aumentará en 50 billones al año sus compras de deuda soberana de Japón y ampliará los vencimientos elegibles para estas adquisiciones hasta 40 años, lo que elevará a una media de siete años el plazo de vencimiento medio de los bonos soberanos en cartera, frente a los tres años actuales.
   "El BoJ alcanzará el objetivo de estabilidad de precios del 2% lo antes posible, con un horizonte temporal de dos años", señaló la institución al término de su reunión de dos días sobre política monetaria que por primera vez estuvo presidida por el nuevo gobernador de la entidad, Haruhiko Kuroda, quien ya había anunciado su voluntad de "hacer lo posible" para impulsar el crecimiento y superar la deflación.

El Tesoro Público español supera sus objetivos y coloca 4.300 millones

MADRID.- El Tesoro Público español ha vuelto a superar sus objetivos al colocar 4.307,43 millones de euros en bonos y obligaciones, en medio de las tensiones que viven los mercados ante las incertidumbres que rodean el rescate de Chipre y a la espera de que el país presente a la 'troika' su plan para reactivar la economía.

   De esta forma, el organismo ha superado con creces su objetivo de emisión, ya que esperaba captar entre 3.000 y 4.000 millones de euros. La demanda, por su parte, ha sido alta y ha superado los 9.400 millones.
   En concreto, el organismo ha vendido 3.057,08 millones de los 5.697,08 millones solicitados por el mercado en bonos con cupón del 3,30% y vencimiento a 30 de julio de 2016. Así, la demanda ha superado en 1,9 veces la cantidad colocada.
   El bono a tres años es nuevo, por lo que las rentabilidades marcadas no son comparables. En este caso, el organismo ha ofrecido a los inversores un interés medio del 3,019% y uno marginal del 3,046%.
   Sin embargo, si se comparan los intereses con la última vez que el Tesoro sacó al mercado papel a 3 años, aunque con un cupón diferente (marzo de 2013), el organismo ha tenido que elevar la rentabilidad, puesto que el mes pasado ofreció un tipo medio del 2,632% y uno marginal del 2,680%.
   Por otro lado, el Tesoro ha colocado 589,88 millones de los 2.415,02 millones pedidos por los inversores en obligaciones con cupón del 4,10% y vida hasta 30 julio 2018. Así, la demanda ha superado en 4,1 veces lo vendido (2,9 veces en la anterior ocasión).
   En este caso, el organismo ha rebajado los intereses respecto a la última vez que sacó a la venta esta misma referencia (marzo 2012). En concreto, el tipo medio ha pasado del 4,193% ofrecido entonces al 3,598% actual, mientras que el marginal ha pasado del 4,242% al 3,619%.
   Si se compara con la última emisión de bonos a cinco años, pero con diferente cupón, que se celebró el mes pasado, los intereses han permanecido prácticamente estables, ya que en marzo el tipo medio fue del 3,572% y el marginal del 3,612%.
   Finalmente, el Tesoro ha emitido 660,47 millones de los 1.361,04 millones solicitados en obligaciones con cupón del 5,50% y vencimiento a 30 de abril de 2021. Así, la demanda ha superado en 2,1 veces lo finalmente colocado por el organismo (1,8 veces en la anterior ocasión).
   En este caso, la rentabilidad también se ha moderado ligeramente al pasar el tipo medio del 5,517% registrado en el mes de noviembre del año pasado al 4,477% actual, mientras que el marginal ha pasado del 5,555% al 4,496%.
   En cualquier caso, el organismo adscrito al Ministerio de Economía y Competitividad ha superado una nueva prueba en los mercados, en un momento en el que la prima de riesgo española se mantiene en el entorno de los 350 puntos básicos.
   La próxima semana, el Tesoro volverá a someterse al escrutinio de los mercados con dos emisiones más. La primera de ellas será de letras a 6 y 12 meses y se celebrará el martes y la segunda será de bonos y obligaciones y tendrá lugar el jueves.

Más de 860.000 menores españoles de 25 años han abandonado el mercado laboral

MADRID.- Más de 860.000 jóvenes menores de 25 años abandonaron el mercado laboral desde que arrancó la crisis, en el tercer trimestre de 2007, hasta finales de 2012, según un informe de la patronal de grandes empresas de trabajo temporal, Asempleo.

   En concreto, el número de activos menores de 25 años se ha reducido en 864.100 personas en este periodo, un 33,9%, descenso que contrasta con la media nacional, que arroja un crecimiento de la población activa de 619.900 personas (+2,8%) en estos años.
   Esto significa que el saldo negativo de activos registrado desde el tercer trimestre de 2007 se debe a la población joven, que no confía en sus posibilidades de encontrar empleo en el mercado laboral español.
   Cantabria es la comunidad que más activos menores de 25 años ha perdido en este periodo, un 51,8%, seguida de Asturias (-42,9%); Castilla y León (-42,7%) y Navarra (-42,6%). Las que menos activos han visto desaparecer han sido Extremadura (-22,9%), Canarias (-25,8%) y Baleares (-29,5%).
   A cierre de 2012, un total de 930.200 jóvenes menores de 25 años que querían y podían trabajar estaban en paro, el equivalente al 55,1% de los activos. Casi la mitad de los jóvenes desempleados, el 45,9%, lleva más de un año en el desempleo, por lo que entran en la categoría de parados de larga duración.
   El paro juvenil se ha duplicado desde que estalló la crisis, pues al inicio de la misma los jóvenes en desempleo sumaban 458.000 parados. Seis de cada diez nuevos jóvenes que han engrosado las listas del paro en estos años eran varones.
   El perfil del joven en paro se corresponde, por tanto, con el de un varón, con un nivel de formación de hasta secundaria, y que lleva más de un año buscando empleo sin éxito.
   En algunas comunidades, la tasa de paro juvenil es todavía más alarmante que el resultado obtenido a nivel nacional. Es el caso de Canarias, donde siete de cada diez jóvenes están en paro, de Andalucía (65,1%) y de Extremadura (61,1%). Las que menos desempleo juvenil tienen son La Rioja (36,3%), Cantabria (41,6%), Aragón (45,9%) y País Vasco (46%).
   Mientras que la tasa de actividad del colectivo juvenil se ha reducido en diez puntos desde el estallido de la crisis, hasta el 41%, la tasa de empleo se ha reducido prácticamente en un tercio, hasta el 18,41%.
   En total, desde el tercer trimestre de 2007 se han perdido 1,33 millones de empleos juveniles y en el último año, la caída de la ocupación en el colectivo ha sido de casi 180.000 trabajadores.
   Sólo la Comunidad Valenciana ha creado empleo joven en el último año, a un ritmo del 5,9%, mientras que el resto de regiones lo ha destruido a tasas de dos dígitos, con excepción de La Rioja (-6,9%).