BRUSELAS.- Los trabajadores afectados por peores estándares de
vida y un desempleo récord se manifestaron en distintas partes de Europa
el miércoles en el Día del Trabajo, esperando persuadir a los gobiernos
de la zona euro de que alivien las medidas de austeridad e impulsen el
crecimiento.
Miles de manifestantes marcharon en Madrid, tomando la
calle comercial Gran Vía, agitando banderas y portando pancartas que
decían "Esa austeridad arruina y mata" y "Reforma = Robo".
"El futuro de España es fatal, vamos atrás", dijo
una exfuncionaria de la Administración que
está desempleada desde hace dos años.
La economía española se ha contraído siete trimestres consecutivos y el desempleo alcanza el 27%.
"Nunca un Primero de Mayo ha estado más cargado de
razones para la movilización", dijo Cándido Méndez, líder del sindicato
UGT, uno de los dos principales que convocaron a los trabajadores y
desempleados a participar en más de 80 manifestaciones en todo el país.
Los servicios de trenes y ferries fueron cancelados y
el personal de los hospitales abandonó sus puestos de trabajo el
miércoles en Grecia,
después de que los principales sindicatos públicos y privados
realizaran una huelga de 24 horas, la última de una serie de protestas
en un país que lleva seis años en recesión.
En Atenas, unos 1.000 policías fueron desplegados para
manejar cualquier acto violento durante las protestas, pero la
manifestación se desarrolló pacíficamente, con unos 5.000 trabajadores
en huelga, jubilados y estudiantes marchando al Parlamento con pancartas
que decían: "No nos convertiremos en esclavos, salgan a las calles".
Más temprano, cientos de manifestantes afiliados al
partido Comunista KKE se acercaron a la plaza de Syntagma, escenario de
enfrentamientos violentos entre la policía y los participantes en
protestas anteriores.
"Nuestro mensaje hoy es muy claro: basta de estas
políticas que dañan a las personas y hacen más pobres a los pobres",
dijo Ilias Iliopoulos, secretario general del sindicato del sector
público ADEDY.
La asistencia en Grecia fue menor a la del año pasado
cuando 100.000 personas marcharon en la plaza de Syntagma. El Primero de
Mayo cae pocos días antes de la Pascua Ortodoxa Griega, lo que supone
escuelas cerradas y muchos trabajadores que ya se han ido de vacaciones.
Cuatro países de la zona euro fuertemente endeudados -Grecia, Irlanda, Portugal y Chipre- han sido rescatados.
Con poco o ningún signo de crecimiento en la zona euro,
se espera que el Banco Central Europeo recorte los tipos de interés a
un mínimo récord de 0,5 por ciento en su reunión del jueves.
Pero los analistas dicen que eso solo no alcanzará para
sacar a la zona euro de la recesión y varios gobiernos están ahora
debatiendo abiertamente políticas para intentar impulsar el crecimiento.
El nuevo primer ministro italiano, Enrico Letta, dijo a Alemania que su Gobierno cumplirá sus compromisos
presupuestarios, pero que esperaba que Europa abandone su mantra de
austeridad y haga más a favor del crecimiento.
La canciller alemana, Angela Merkel, vista por muchos
en el sur de Europa como la defensora del ajuste en la zona euro, tuvo
un tono conciliador diciendo que "la consolidación del presupuesto y el
crecimiento no necesitan ser contradictorios".
Decenas de miles de personas marcharon en las
principales ciudades italianas para demandar acciones del Gobierno para
abordar el desempleo -del 11,5 por ciento en general y del 40 por ciento
entre los jóvenes- y poner fin a la austeridad y la evasión fiscal.
La mayoría de las marchas fueron pacíficas, pero
manifestantes en Turín arrojaron huevos rellenos con pintura negra
contra la policía.
El Papa Francisco apeló a los Gobiernos para que
combatan el desempleo puesto que el "trabajo es fundamental para la
dignidad de una persona".
"Pienso en cuántos, y no sólo gente joven, están
desempleados, muchas veces debido a una concepción puramente económica
de la sociedad, que busca la ganancia egoísta, más allá de los
parámetros de la justicia social", dijo a decenas de miles de personas
reunidas en la Plaza de San Pedro para su audiencia general semanal.
Las tradicionales marchas por el Día del Trabajo también se desarrollaban en lugares fuera de la zona euro.
En Rusia, se esperaba que cerca de 1,5 millones de
rusos participen en los desfiles del Primero de Mayo, una pequeña parte
de los millones que solían hacerlo en los tiempos de la Unión Soviética.
En Turquía, la policía antidisturbios lanzó gases
lacrimógenos y utilizó un cañón de agua para dispersar a la multitud
reunida en el centro de Estambul para manifestarse en la que se ha
convertido en un feriado tradicional. Un fotógrafo de prensa dijo que
al menos seis personas resultaron heridas en los enfrentamientos.
En Estambul, miles de policías estaban apostados en el
centro de la ciudad para bloquear el acceso a la plaza Taksim, mientras
una multitud de manifestantes convergía en diferentes puntos de la
ciudad por la mañana tratando de superar las barricadas policiales.
Los incidentes siguieron el patrón de los últimos años,
cuando las manifestaciones del Primero de Mayo en la principal ciudad
turca han estado marcadas a menudo por enfrentamientos entre la policía y
los manifestantes.
Las autoridades suelen usar la fuerza para evitar que
la protesta llegue al centro de la ciudad -este año se ha impedido a los
grandes sindicatos el permiso para marchar hacia Taksim-, aduciendo que
los grandes trabajos de construcción allí lo hacen demasiado peligroso.
Dos funcionarios fueron heridos por pedradas y objetos
de metal lanzados hacia las líneas policiales, dijo el canal de
televisión estatal TRT, citando a la oficina del gobernador de Estambul.