ESTRASBURGO.- El ex presidente del Banco Central Europeo
(BCE), Jean-Claude Trichet, ha defendido este martes en una audiencia
ante la comisión de Asuntos Económicos de la Eurocámara que sin la
actuación rápida y decidida de los bancos centrales la actual crisis
hubiera sido peor que la de 1929.
Trichet ha culpado de la crisis de deuda al mal gobierno de la
eurozona y al hecho de que varios Estados miembros gastaban más de lo
que ingresaban, tanto en el plano presupuestario como en el plano
interno. Por ello ha defendido que el ajuste era inevitable y que la UE
lo que hizo fue ayudar a estos países.
"Estamos experimentando la peor crisis desde la Segunda Guerra
Mundial y todavía estamos en crisis", ha sostenido el banquero francés
ante los parlamentarios que examinan la actuación y los fallos de la
troika en los rescates de Grecia, Irlanda, Portugal y Chipre.
"Si los bancos centrales del mundo no hubieran sido muy valientes y
rápidos en sus decisiones, y si los Gobiernos no hubieran sido también
valientes y rápidos, habríamos tenido la peor crisis desde la Primera
Guerra Mundial. Podríamos haber estado en una situación peor que la de
la crisis del 29", ha alegado Trichet.
"No debemos subestimar las inmensas dificultades con las que
tuvieron que bregar todas las instituciones", ha defendido. "Evitamos la
Gran Depresión que se vislumbraba, no evitamos una Gran Recesión y por
supuesto todas las economías avanzadas pagaron un alto precio por esa
razón", ha agregado.
A juicio de Trichet, el motivo por el que la eurozona se convirtió
en el epicentro del tercer episodio de la crisis (tras las hipotecas
subprime y la caída de Lehman Brothers) fue porque "no gobernamos
correctamente la eurozona y Europa en general".
"No aplicamos el Pacto
de Estabilidad como hubiéramos debido y no vigilamos los indicadores de
competitividad", ha agregado.
En cuanto a las acusaciones de la Eurocámara de que la troika
subestimó el impacto de los recortes sobre el crecimiento, el ex
presidente del BCE ha respondido que "el problema principal es el hecho
de que algunos países, felizmente no todos, gastaban más de lo que
ganaban en el plano presupuestario y externo y los inversores a partir
de un determinado momento dijeron que ya no confiaban en ellos".
"La comunidad internacional y los países de la eurozona y de la UE
han aceptado ayudar a estos países a superar sus grandes dificultades.
Pero en cualquier caso debían volver al equilibrio, tanto el interno
como el externo. Sin este retorno al equilibrio no había solución ni
salida posible", ha sostenido Trichet, que en todo caso ha defendido una
mayor participación de la Eurocámara en el futuro en política
económica.
El interrogatorio de Trichet forma parte de una serie de
audiencias organizadas esta semana por el Parlamento Europeo para
examinar el trabajo de la troika y sus fallos en la gestión de los
rescates. En su informe preliminar, la Eurocámara critica la falta de
transparencia y legitimidad democrática de la troika y denuncia que los
rescates han provocado un aumento de la desigualdad y el paro en los
países en crisis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario